Narra James.
-James despierta -dice mi madre entrando al cuarto junto con Kayla pero ella se sube sobre mí quitándome las cobijas- tenemos que ir a comprar las cosas para ir a acampar mañana con los Ross.
-Ya voy, solo me visto -me paré sacudiendo mi cabello, dejando un pequeño beso en la mejilla de mi madre; esta salió pero se le olvidó a alguien.
-¿Qué hacías ayer con Sara en tu cuarto? -un pequeño puchero salió de su boca.
-Nada enana -sacudí su cabello.
-No me quieras engañar.
-De acuerdo, me descubriste -hice una pequeña mueca- le regalé un collar a Sara.
-Ohh -cubrió su boca con sus pequeñas manos.
-Ahora enana, tengo que bañarme; así que con permiso- llevé hacia afuera a Kayla.
Salí de bañarme y tomé una playera roja, después de haberme sacado mi playera de dormir; me puse unos jeans negros algo justos, y mis botas color café. Ahora sí podía salir. Mientras caminaba por las escaleras agitaba mi cabello de nuevo para ponerme mi gorro nuevo favorito.
-Ya estoy listo, vámonos -dije llegando a la cocina donde estaba mi madre.
-Vamos.
Salimos de la casa, mi madre decidió que iríamos en su carro; yo no quería pero accedí. Luego de unos semáforos llegamos al centro comercial. Aparcó el auto y bajamos.
-Vamos Kayla -dije abriendo la puerta para que bajara.
-Ya voy James-dijo Kayla.
Entramos a Target, ahí encontraremos todo lo que quiere mi madre.
Como era de esperarse mi madre desapareció entre los pasillos, se encontraba en donde las mujeres; buscaba un traje de baño para ella y Kayla, era sorprendente que también hubiera para ella. Luego de 10 minutos de espera por fin encontró ropa adecuada para ir a acampar a un lago. Yo como era de esperarse seguía ahí pero ahora me encontraba sentado en el suelo con Kayla en mi regazo, jugábamos con las manos. Hasta que decidió pararse. Saqué mi celular del bolsillo de los jeans, no sabía qué hacer en realidad; algunos juegos, Internet. Hasta que recordé que ya tenía el número de Sara, lo cual me sorprendió ya que habían pasado algunas cosas como para que aún no le haya hablado por el celular. Así que hice una nota mental de mandarme un mensaje, me gustaría hablar todo el tiempo con ella.-James, vamos a buscar ropa para ti y papá-comenzó a caminar.
Me paré y comencé a caminar detrás de ella hasta llegar al pasillo de caballeros. Mi madre agarró algunos short, algunos eran espantosos, creo que sigue pensando que tiene un niño pequeño; hasta que veo un short color rojo que llama mi atención, se lo quito de las manos y le sonrío.
-Yo lo quiero -digo enmarcando una gran sonrisa- este le quedaría a papá-señaló un short verde que tiene en su brazo.
Camino por el pasillo y encuentro un short color negro que decidí tomar también, por si acaso.
-Ahora vuelvo -le digo a mi madre tomándola del brazo para llamar su atención.
-¿A dónde vas? -pregunta- de acuerdo, está bien, no te tardes para irnos.
Me dirijo hacia el pasillo de regalos, esperando encontrar algo que llame mi atención; luego de caminar por ahí por fin lo encuentro algo, un oso de peluche café de tamaño promedio, no muy grande pero tampoco pequeño. Lleva un gran moño naranja que hace que luzca mucho mejor. Lo tomo y camino hacia mi madre que está en un pasillo no muy lejos del que estaba hasta hace un momento.
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Tan sólo una mirada #Wattys2018
RomansaYO NO CREÍA EN EL AMOR A PRIMERA VISTA, HASTA QUE UN DÍA LO CONOCÍ Y FUE AHÍ DONDE MI MUNDO SE PUSO DE CABEZA. ME LLAMO SARA ROSS, TENGO 19 AÑOS Y ESTA ES MI HISTORIA DE CÓMO CON TAN SÓLO UNA MIRADA PUEDE CAMBIARLO TODO. NADIE PODRÍA PENSAR QUE AL...