Camino con mis flores y llegue a la biblioteca, no entro, simplemente me quede ahí mirándola con tranquilidad, ahora me frustraba entrar al único lugar que me ponía en un modo relajante y seguro.
—Miren, es ella, la nueva novia de Frost—expresa una chava detrás de mi.
—Si, es muy diferente a las demás...a caso ¿le hizo un embrujó, quizá un agua de calzón?—ruedo los ojos y sigo mi camino. Es increíble como la gente puede hacer tantos, pero ¡tantos chismes! No pueden ni con su propia vida. Agua de chón, háganme el puto favor.
Llegue hasta el salón de computación, básico como era de costumbre, me metí para poder relajarme un poco, la cabeza me estaba punzando, no había taba tanto estrés provocado por otras personas. Me dejo caer en la silla que es para el profesor y saque mi libro y me dispuse a leerlo, aun no me sentía cómoda...tenía que encontrar un nuevo lugar donde sentirme a gusto. Miro por la ventana, acordándome de mi lugar favorito.
Flashback.
El día estaba lluvioso, hacia muchísimo frío y no era recomendable salir, la nieve cubría una parte de las áreas verdes. Le di un sorbo a mi té de manzana con canela y me dispuse a leer el libro de Nicolás Maquiavelo titulado "el príncipe"
—Él león, no puede no puede protegerse de las trampas y el zorro no puede defenderse de los lobos. Uno debe de ser tanto zorro para reconocer trampas y león para asustar a los lobos...— cerré aquel libro y mire a mi alrededor, mente convertido en un zorro, astuto y sigiloso, tratando de ocultarse de los lobos que estaba listos para cuando lo vieran salir, lo perseguirían hasta capturarlo. Deje de ser el león porque no quería que las personas me temieran, sin siquiera conocerme aun que a veces no está mal ser temido, nadie me hacía menos o se burlaban, me respetaban sea como sea. Le tome a mi té y seguí con la lectura.
Fin del Flashback.
Deje salir un suspiro largo y pesado, extraño no salir de mi madriguera, ahora mismo estoy siendo perseguida por una manada de lobos demasiado pesada. Cerré el libro y me recargue de mi mano derecha, ¿acaso tenía que dejar salir el león ora ser respetada? Tal vez tenía que ser ambas partes, el problema es que no sé cómo hacerlo.
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Oh my Daddy!
Fantasy-No eres como las demás. -Dulce, tierna, e inocente. -Eres completamente diferente a lo que estoy acostumbrado. -Ahora tú serás completamente mía. Historia diferente, con contenido para adulto.