|A una semana para el Baile |
Narra Camila
“Por un momento creí que era uno de eso boletos dorados de Charly y la fábrica de chocolates.” Le contaba Lucy al resto del grupo. “Pero resultó ser su petición para el baile.”
“¡¡Awwww!!” Soltaron Ally y Normani al unísono.
“¡¡CUUURRSII!!” Gritó Verónica sin importarle que medio comedor le mirase como una loca.
Lucia colocó su mano sobre la boca de la latina “Silencio.” Pidió en un susurro para luego soltarla.
“Hubiese estado genial ir a la fábrica de chocolates…” Continuó la colombiana todavía desilusionada porque aquel boleto no nos llevará a conocer a Charly. “Pero ha estado lindo el gesto, porque Mila ama el chocolate, tanto como Dinah y Mani aman a Beyoncé.” Señaló mirándome y asentí en concordancia con lo que dijo.
“Lu.” La llamó Ally. “¿Te das cuenta que ahora no tienes con quien ir al baile?” Interrogó la rubia baja.
La colombiana ladeó su cabeza mientras pensaba lo que acababa de mencionar Ally, para finalmente dejar caer sus hombros con tristeza, aquel gesto me hizo sentir terriblemente culpable, porque se suponía que iríamos juntas.
“Lucy Lu, puedo decirle a Ari que…” Traté de emendar pero la colombiana negó con firmeza sin dejarme continuar.
“Puedes ir con Vero.” Opinó Mani, para nadie era un secreto que la latina todavía no había invitado a nadie.
Verónica giró su cuello para dedicarle una mirada asesina.
“¡¡De ninguna manera!!” Exclamaron ambas latinas para luego mirarse con una ceja enarcada cada una.
“Me parece buena idea.” Apoyé la sugerencia de Normani que estiró su puño para que lo chocara con el mío y así lo hice. Lucia negaba con su cabeza.
“Así podríamos ir todas en grupo, compartir la limusina.” Empezó a enumerar los pros, pero rápidamente la interrumpí.
“¿Limusina?” Repetí para asegurarme.
Todas me miraron con una ceja levantada y esa expresión de « ¡OBVIO!»
“¿No os parece demasiado?” Consulté no muy segura de querer llegar a un baile de preparatoria en una limusina.
¿Os imagináis? A mí, que ni siquiera cojo el autobús, en una limusina para llegar a un simple baile de Halloween de un instituto. Seguramente el señor Soo me miraría cual bicho raro con solo escuchar la palabra «limusina.»
“Chancho.” Tomó la palabra Dinah. “Si la Regis tuviese una pista de aterrizaje, créeme que vendríamos en helicóptero… así que, no, no nos parece demasiado. Una limusina es todo lo que nos permiten.” Explicó.
“Yo también creo que deberíais ir juntas.” Se sumó Ally mirando entre Vero y Lucy de manera alterna.
Vero resopló, resignada.
