Vamos Otra Vez

Conviviendo con un humano.

(Dentro del bosque Everfree).

El cielo estaba oscuro en aquel bosque repleto de bestias peligrosas y al que los ponis le temían tanto, pero esto no parecía significar nada en lo absoluto para el humano que se encontraba curioseando dentro el antiguo castillo de las hermanas en medio de este.

Victor: (Estaba buscando esa broma venenosa para fastidiar a Adam y me encontré el camino del castillo de pura casualidad. Sería bueno buscar algo interesante por aquí).

Mientras pasaba por todos los pasillos posibles del deteriorado castillo, Victor admiró cada decoración que había en el lugar y cayó en uno que otro pasillo secreto y trampa.

Victor: Tsk. Odio las telarañas. ¿Acaso también tienen estás trampas en Canterlot?– Se preguntó molesto, quitándose un resto de telaraña del cabello– Supongo que no hay nada más aquí que libros y ese órgano que encontré. Hora de irnos.

Victor se dispuso a comenzar a salir del castillo cuando en su camino encontró una pequeña esmeralda casi cerca de la entrada.

Victor: Suerte– Dijo tomando la pequeña roca del suelo– ¿Cómo no la ví antes? Meh.

Al momento de salir del castillo, Victor se detuvo en seco al ver a tres manticoras esperándolo afuera gruñendo, mostrándole sus grandes colmillos.

Victor: ¿Manticoras? Ustedes eran mis criaturas mitológicas favoritas, pero ahora son un fastidio.

[Cambio: Humungosaurio]

Victor: ¡¡GRAAAAAAAAHHHH!!

Las manticoras huyeron despavoridas literalmente con la cola entre las patas por el estruendoso rugido.

Victor: ¡¡GRAAAHHH-!! ¡Cough! ¡Cogh! Maldición, me lastimé la garganta. Quiero un dulce.

Repentinamente Victor regresó a ser humano.

Victor: ¿Por qué tan rápido? Nah, no importa, debería ir a dormir. Me la pasé desde la madrugada aquí y no pude encontrar nada respecto al problema de Adam.

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(Flashback).

Adam: Victor, necesito un favor.

Victor: ¿Qué quieres? Intento dormir.

Ambos estaban en la pradera donde solían holgazanear y Victor estaba acostado en el suelo con sus brazos en detrás de su cabeza.

Adam: Necesito ayuda con este problema.

Victor: ¿Qué? ¿Quieres regresar a ser humano?.

Adam: Quizás... Pero no es eso.

Victor: ¿Y?– Preguntó poniéndose de pie.

Adam: Es sobre esas explosiones de energía. ¿Recuerdas lo que pasó en el imperio de cristal? Esa fue la primera vez que pasó, luego en el accidente de la escuela. Si te acuerdas del castillo de las hermanas, ¿Verdad?.

Victor: Vagamente– Respondió estirando sus brazos– ¿Quieres que busque algo relacionado a eso ahí?.

Adam: Sí.

Victor: Muy bien, lo haré.

Adam: ¿En serio?.

Victor: Sí, cuando tenga tiempo. ¿Pero para qué quieres deshacerte de eso? Es increíble. Lograste romper los cristales de sombra con pura fuerza física.

Adam: Ehhh... Ese no fuí yo.

Victor:  ¿A qué te refieres?.

Adam: No lo sé, fue extraño esa vez. Fuera de esos rayos verdes, ví otro a lo lejos que fue lo que fracturó el cristal por mis espaldas y se despedazó.