INEFABLE

Capítulo 12

Abril Mtz:

(5:34 pm)

¡Hey holaa! No lo dije hace un rato pero fue bueno verte. Me gustó poder hablar contigo aunque haya sido muy poco tiempo.

(6:10 pm)

Oh cierto, ¿a qué hora te gustaría que nos viéramos mañana? Yo diría que estaría bien por la tarde.

(6:30 pm)

¿Alice, estás bien? No sé por qué siento que algo está ocurriendo, ¿ya hablaste con tu madre?

Alice me estoy empezando a preocupar.

Alice Gossio:

(6:42 pm)

He hablado con mi madre, y su reacción no fue nada buena, terminamos discutiendo, ella se comportó de una manera irreconocible, no parecía mi madre, en cuanto mencioné tu nombre cambio su semblante, no sé qué pasa con ella, porque te odia tanto.

Realmente no estoy bien, Abril.

No tardo en leer los dos mensajes, espere una respuesta pero se desconectó. Justo ahora que necesito a alguien con quien hablar se va, justo ahora que la necesito. Deje la laptop a un lado y trate de dormir un poco pero no me fue posible.

Mi mente estaba hecha un lío, varios pensamientos la rondaban, trataba de estar tranquila de no pensar en nada y era imposible.

Tome de nuevo la laptop y no había ningún mensaje de Abril, conecte los audífonos y puse música a un volumen alto para que así ya no pensará en nada pero este era demasiado molestó así que lo puse en un volumen bajo, me tire en la cama, tome una almohada y apoye mi cabeza en ella, mi mirada estaba directa al techo, estaba una canción de nombre All Too Well y sin duda era buena, no sabía con exactitud el significado de la letra pero con tan sólo escuchar el tono y la manera en que es cantada puedo saber que es una canción realmente conmovedora.

Estoy demasiado metida en la canción, me ha puesto los pelos de punta, me está gustando más de lo que pensé. Entonces escucho que alguien toca la ventana. Pensé que era parte de la canción pero no. Miro hacía la ventana y me encuentro a alguien con un traje rosa, en medio de este tiene hay un círculo con la letra A en el centro, porta lo que parece ser una capa blanca y trae una mochila. Me quito los audífonos, me levanto y abro la ventana.

–¡Sorpresa! – dijo extendiendo los brazos – Alguien me ha dicho que no estás bien y no podía dejarte de esa forma así que aquí me tienes – dijo del otro lado de la ventana.

–Estás realmente loca, ¿que se supone que es eso que traes puesto? – dije sonriendo – Alguien puede verte Abril, o más bien creo todos te vieron, no creo que hayas pasado por desaparecida con eso.

–Nadie me ha visto, con este traje puedo ser invisible para los demás, sólo tu puedes verme. Siéntete afortunada querida – dijo con una sonrisa.

–Oh mira que interesante, ahora me dirás que eres un superhéroe y has venido a rescatarme.

–No hay mejor manera de decirlo. Oye no me molestaría si me dejas pasar eh.

–No lo sé, me gusta cómo te ves ahí afuera – dije y no pude evitar reír.

–Vamos Alice, no querrás que tu superhéroe favorito se enferme por un resfriado.

–¿Superhéroe favorito? – pregunté

–¿A caso conoces a alguien aparte de mí? No querida, soy única, no hay nadie que porte este traje de la invisibilidad.

–¿A quién se lo has quitado? Pareces la pantera rosa – dije riendo.

–En estos tiempos ya no tiene respeto a los superhéroes, te cuento de donde lo he sacado si me dejas pasar – dijo.

–Algo me dice que esto será divertido así que pasa – dije mientras me hacía a un lado para que entrará.

–Uy al fin se dignó la damita – dijo haciendo una voz graciosa.

–Sigues hablando y te saco eh.

–Siguis hiblindi i ti sici ii – dijo de nuevo con la voz graciosa.

–Ya Abril – dije entre risas – no hagas eso que me haces reír.

–De eso se trata mi querida amiga.

Una vez ya dentro la observe bien y me percaté de que alguien le había quitado la cola a su disfraz, había sólo un hoyo, como también que este disfraz le quedaba pequeño.

–Mejor háblame de tu peculiar atuendo, ¿se lo quitaste a una niña?

–Es mío, lo compre hace unos años, lo utilice en una obra de la secundaria, se supone que debía ser la pantera rosa y pues esto salió, no está de más decir que la obra fue todo un fracaso.

–Ya lo creo, alguien te quito tu apuesta cola.

–Pero que observadora eres eh, mientras estaba en escena un niño piso mi cola y la arranco, lo peor de esto es que yo sólo llevaba puesto el disfraz y debajo estaba en calzoncillos, no me di cuenta de que alguien había quitado mi cola hasta que varias personas se rieron de mis calzones de Bob esponja.

–¡Oh por Dios! Hubiese deseado estar ahí.

–Querías ver mis calzoncillos ¿verdad?, mira nada más que traviesa me saliste.

–No es por eso tonta, oye y, ¿qué persona en la secundaria utiliza calzoncillos de Bob esponja?

–Pues me gustaba mucho Bob, además eran muy cómodos, de hecho todavía los utilizo, cuando quieras te hago una pasarela, perdieron un poco el color pero siguen siendo cómodos.

-Gracias por la a tentadora propuesta pero paso.

-Tú te lo pierdes cariño. Bueno ya te hice reír un poco con mi hermoso atuendo. Ahora si dime que ha pasado con tu madre.

–Le pregunté sobre ti, y entonces al parecer eso le molestó, intentó evadir el tema pero la enfrente, discutimos y lo que hice fue sólo venir a mi habitación, ella vino tras de mi pero le puse seguro a la puerta.

–¿Intentó golpearte?

–No, no, sólo quería hablar y dijo que cuando se me pase el berrinche hablaremos. Sé puso de esa forma porque anteriormente le dije que ya no había nada que hablar, que todo estaba claro y es que si lo está. Ella dijo que no valía la pena hablar sobre ti, ósea intento decir que eras algo insignificante, eso me molestó y por eso le contesté también. Sé que hice mal pero no podía quedarme callada.

–Se puso feo, Alice me siento culpable, yo fui quien te dijo que le preguntarás sobre mí y mira como terminó todo. Esto es mi culpa y te pido perdón por ello.

–No digas tonterías, al contrario esto me sirvió para ver como realmente es mi madre, sabes me dijo también que antes yo era más comprensiva y que ahora sólo estoy actuando como una chica rebelde. Y tal vez antes si era alguien a quien podían manipular pero ya no más.

–Alice te ha mentido, tú no eras una chica a la cual podían manipular, eras justo todo lo contrario. Y eso pasó desde que me conociste ese es tan sólo uno de los motivos por el cual tu madre me odia.