Mi deseo.

Capítulo 7

Después de la impresión de haber descubierto quien es mi adorado locutor, nada fue igual.

La desilusión se instaló en mi cuerpo. Realmente había creído que conocería a una persona que, lamentablemente, solo existía en mi imaginación.

Bien merecido me lo tengo por ser tan fantasiosa.

Por suerte lo invitados no tardan en comenzar a llegar y me distraigo ayudando en la cocina a Anne. Hace bastante frio, por lo que decido quitarme mi vestido especialmente elegido para impactar a mi locutor y lo cambio por un pantalón de jean negro, una camisa mangas largas color salmón y unas botas de piel que tenía pensado estrenar en casa de Kim en New York.

Anne se muy alegre junto a su esposo recibiendo a los invitados y conversando con ellos, son aproximadamente treinta personas. El bullicio es bastante. Me siento un poco cohibida por no conocer a nadie. Mayormente no soy nada vergonzosa, pero esta vez realmente me siento como sapo de otro pozo, por lo que decido protegerme en la soledad de la cocina y desde ahí ayudar a la familia que tan gentilmente me está hospedando. Creo que será una buena manera de agradecerles lo que están haciendo por mí.

De pronto cambia la música y comienza a sonar algo más movido, no sé muy bien quienes cantan pero el ritmo es realmente bueno. Me dejo llevar por la música mientras alisto las bandejas con la comida que va saliendo del horno.

-Me gustaba más el vestido- dice una voz sensual detrás de mí- aunque el pantalón marcan mejor tus curvas-.

Mis ojos se abren como platos al darme cuenta que Alex está detrás mío. Me giro rápidamente para encontrarlo de frente, cerca, muy cerca. Me apoyo contra el mesón de la cocina tratando de no tambalear. Alex apoya sus manos a mis costados y me mira fijo. Una leve sonrisa curva sus labios y esos hermosos hoyuelos otra vez aparecen en su cara.

-¿Te asuste?-pregunta pícaramente.

-No- contesto dejando escapar el aire que no sabía tenia retenido en mis pulmones.

-Sabrina...-comienza a decir Alex despacio, cada vez más cerca. Sus ojos comienzan a oscurecerse dos tonos más...-me preguntaba si querías...-

-¡Si!- respondo rápidamente - Si... ¿Me ayudas a servir la comida Alex por favor?-

No sé de dónde saqué fuerzas para alejarme de ese hombre tan alucinante. Su cercanía hizo que toda la sangre de mi cuerpo se alborote locamente. Es demasiado sensual y para colmo se aprovecha de lo que provoca en mí.

Esto ya lo he vivido antes... Y lamentablemente nunca me fue bien. No quiero más que me rompan el corazón, no más llantos, ni lágrimas ni tristezas. El hombre con el que quiero formar una familia y compartir el resto de mi vida no existe.

Lo busqué... juro que lo busqué pero en el camino me encontré con personas egoístas que lo único que buscaban era pasar el rato y nada más.

Al parecer Alex es uno más de ellos así que... hasta aquí caballero. Se terminó el juego. Sabrina Sanders tiene un objetivo en new York y no va a parar hasta conseguirlo.

................................................................................................................

Uh Uh

Parece que Sabrina esta bien decidida a no dejarse engatusar por Alex...¿Lo lograra?