Yo soy Alex (EN CORRECCIÓN)

Capítulo 7

Alice fue mi mejor amiga de toda la vida, nos conocimos desde muy pequeñas gracias a nuestras madres. Me hubiese gustado tanto que viviera conmigo estos momentos tan importantes para mí.

No sé nada de ella, como ella nada de mí, o al menos eso creo. Nunca pensé en buscarla de nuevo, para ser sincera ya no es indispensable en mi vida como antes. Es verdad que me ha dado curiosidad por como está ahora, si cambió tanto como las personas que me rodean, si ella y Braulio siguieron viéndose, si realizó todos esos sueños en común que teníamos de pequeñas.

Respecto a su novio, nunca supe más de él. Cuando salimos de preparatoria me desconecté al instante, aunque un año antes de graduarnos, él ya lo había hecho. Pensé que Alice y yo nos uniríamos de nuevo, pero no fue así. Se enfocó más en ser porrista y hacer nuevas amistades; todas las tardes veía a Braulio, así que ya no había tiempo para estar juntas. Todo indicaba que mi infierno terminaba ahí, pero como siempre, estaba equivocada.

Uno de los chicos del ex equipo de americano vivía a unas cuantas casas de la mía; todas las tardes ese grupo de idiotas se reunían a unos pasos de mi casa. Las burlas y maldades seguían, porque para mi mala suerte, sus reuniones iniciaban justo cuando yo regresaba de mis clases de inglés.

Mi cerebro en defensa propia ha olvidado el aspecto de ellos dos, como el de muchas personas; me refiero a que no los reconocería si los encontrara en la calle, creo que los pasaría por alto. De todas maneras hemos cambiado lo suficiente, éramos unos pubertos de pies a cabeza... o al menos yo lo era. Alice siempre fue muy bonita: rubia, delgada, alta; como esas chicas americanas de revista. Braulio por su parte, era casi lo mismo: musculoso y con la palabra "idiota" en la frente.

Al nunca se enteró de todo lo que su novio me hacía. Jamás tuve el valor suficiente para contárselo, probablemente él tampoco le contó la verdad, creo que hay cosas de las que jamás sabemos aunque estén en nuestras narices.

Actualmente a la única persona a la que le he tenido la confianza de contarle todo es a Mariana, mi roomie. A Mar la conocí en la universidad, estudió la misma carrera que yo y ahora vivimos en la misma casa; también trabajamos juntas haciendo publicidad para diferentes marcas. Realmente amamos nuestro trabajo y nuestras vidas. Ella es una niña muy linda, a veces puede parecer infantil pero en realidad es todo lo contrario. Mar es libertad pura, inspiración y alegría; si algo he aprendido de ella, es que si no lo intentamos, mañana nos consumirá la duda. Esta chica lleva por lema de vida el arte. Ama crearlo, portarlo en su piel; plasmarlo en otras pieles, en lienzos, en anuncios publicitarios, en melodías, en todo.

Ella también ha tenido una vida difícil, creció en un orfanato porque sus padres murieron cuando era pequeña. Una familia muy linda la adoptó cuando ella estaba un poquito más grande. Sin duda cree que a pesar de lo difícil que fue su infancia, su destino ha sido perfecto.

El día que Mar me invitó a casa de sus padres fue un día increíble. Ellos prepararon algún platillo mexicano para que yo me sintiera en casa; jugamos juegos de mesa, cantamos en karaoke; me enseñaron el álbum de fotos de cuando mi amiga era pequeña, y por supuesto, me acogieron como parte de su familia.

Ella ya les había platicado a sus padres sobre mí, son de mente muy abierta así que les pareció genial conocerme. Ese día me hicieron muchas preguntas acerca del tema, las típicas dudas que cualquier persona tiene cuando conoce a alguien como yo. La verdad es que no me incomodó hablar del tema porque me sentía en un ambiente de confianza, fueron muy respetuosos.

Mar es hija única, es muy afortunada de que la vida le haya dado la oportunidad de tener unos padres tan lindos. Sus papás no podían tener hijos, me contaron que en cuanto conocieron a Mar les robó el corazón y no podían negarse a adoptarla. Dicen que era una niña preciosa y muy risueña como hasta ahora.

Llegué a preguntarle a sus padres por qué habían escogido ese nombre para su hija y ellos me dijeron que fue intencional, les gustaba el nombre Mariana porque querían que fuese como el mismísimo mar: grande, de muchas tonalidades, hermoso, libre y lleno de misterios. Fue una elección muy inteligente ya que Mar es así. De hecho, la primera vez que se tintó el cabello fue de azul, azul turquesa, y a sus padres les encantó. También se tatuó unas olas en el brazo porque ella misma sabe que es así.

Es increíble cómo te encuentras con personas que hacen de momentos simples en recuerdos auténticos. Mar sin duda es una de esas personas, es quien me anima y me aconseja, me hace reír y a la vez me hace enojar, es quien siempre estará ahí. Me encanta que sea mi amiga, casi mi hermana. Es verdad que no la conozco desde hace muchos años como llegué a conocer a Alice, pero siento como si nos conociéramos de toda una vida. Mi amistad con Mar es muy diferente a la amistad que tuve con Al. Mar te da ese aire de alegría, de buena vibra, de querer vivir tu vida, de aventurarte y todo eso sin siquiera tocar palabra con ella; incluso hasta su apariencia refleja eso. En cambio Alice, aparentemente era una chica más reservada, no era muy colorida pero he de decir que era muy bonita a su manera. Era una chica que te irradiaba sensibilidad, además de que solía ser un poco vanidosa o a lo mejor no lo hacía a propósito; su sonrisa, sus ojos claros y su cabellera rubia eran suficiente para que la miraras.

Estas dos chicas son de pensamientos y mundos completamente diferentes, las dos han sido mis mejores amigas en diferentes etapas de mi vida. No podría comparar una amistad con la otra, sería algo irrespetuoso. Hay días en las que siento una profunda nostalgia al recordar a Alice, desearía tanto que mirara todo lo que he logrado, que he cumplido mi sueño y que ahora, soy la chica que siempre miró en mí. 

Capítulo dedicado para conocer un poco más a las M.A. de Alex porque hablar de los amigos nunca viene mal.
Por esta razón le dedico este capítulo a uno de mis mejores amigos... J♡
Sé que lo estás leyendo, para que luego no digas que actualizo ¡cada año! Jajaja (ahora ya tienes que leer de camino al trabajo.)

Gracias a esas pocas personitas que me leen, en serio me hacen ¡inmensamente feliz!♡♡