— Chinito, se que es tarde pero... Aquí estoy.
Hiro alzó su cabeza al escuchar aquella voz, lo observó con ayuda de la luz de la luna y las luces luces de la ciudad, se levantó de aquel lugar para darle un abrazo muy fuerte a aquel chico moreno que estaba frente a él, cuando se separaron Hamada le dedicó una sonrisa.
— Gracias — dijo Hiro— me alegro de que mi espera no haya Sido en vano pero... Aún con la poca luz que hay puedo notar que eres tu, Marco.
— ¿Cómo pasas tú a creer que yo soy Marco? Mira, soy Miguel — dijo el moreno, luego simuló tener en sus manos la guitarra blanca de su mejor amigo— Recuérdame, we.
Hiro soltó una carcajada, había logrado aliviar un poco a su adolorido corazón.
— Miguel y tú son parecidos — comentó Hiro— pero aunque uses pupilentes marrón tu lunar está en el lado contrario y en vez de estar arriba está abajo.
— Héctor y yo esperábamos que pensaras que era Miguel — confesó Marco— pero tú eres muy inteligente para engañarte y nosotros muy pendejos por olvidar ese pequeño detalle.
Hiro volvió a soltar una carcajada, estar con Marco y con Héctor siempre le hacia bien. Todos salieron del parque para ir al departamento de Héctor, así los integrantes de Los Rivera se volverían dos miembros nuevos del equipo CRKyBH al cual Coraline tendría que buscarle otro nombre pronto porque ya no eran los únicos que lo conformaban, ya estando dentro se acomodaron en el living se miraron seriamente todos hasta que debieron explicar porque habían llegado ellos en lugar de Miguel.
Al principio solo Héctor era el que hostigaba a Miguel para convencerlo de que fuera, en realidad sólo tenía pocas horas para convencerlo antes de su cita con Shannon así que después de desesperarse tuvo que acudir a Marco, quien acepto gustoso si se trataba de chingar a su amigo, pero el menor de los Rivera era un hueso difícil de roer, porque lo fregaron por todos los medios posibles, llamadas, mensajes, en persona, incluso le rogaron que fuera mientras se bañaba para que al final dijera que no. Todo empeoró cuando salió a la cita con su prometida, porque no das indicios de llegar temprano y ahí tuvieron que usar sus técnicas para hacer parecer que Marco era Miguel para que Hiro no estuviera triste o perdiera las esperanzas con Miguel.
Hiro sabía que Miguel no llegaría por ello no sabe había hecho tantas iluciones, pero quería pensar que si lo volvería a ver antes de que se fuera de San Fransokyo así que a la perspectiva del Hamada más pequeño aquel detalle que habían tenido los mexicanos con el había sido demasiado lindo, pero ahora sabía que era definitivo que perdió a Miguel y ya no había nada por hacer.
O eso creía el, porque el equipo CRKyBH no se rendiría hasta que esos dos estuvieran juntos de nuevo.
Así que comenzaron a ideas planes de nuevo, los cuales serían reemplazados por el plan de la pizza que había dicho Riley si ninguno funcionaba.
— Se inicia la reunión — dijo Coraline pegada a Marco— el tema a tratar de hoy son los dramas amorosos de Hiro, otra vez. Digan sus mejores ideas y que tengan que ver con pizza porque ese es el plan B.
— Yo quiero vestir a Hiro como chica de nuevo — comentó Teodora— eres un modelo DI-VI-NO, Hirito
— Pero Miguel no esta tan menso como para no darse cuenta dos veces — comentó Leo— yo digo que descartemos esa idea.
— ¿Y si Hiro le lleva una serenata a Miguel? — dijo Kubo.
— La música no es mi fuerte, Kubo — respondió Hiro.
— ¿Entonces? — cuestionó Coraline.
— Nosotros la neta no tenemos ideas —dijo Marco— pero Héctor y yo podemos hacer que nos quedemos más tiempo en San Fransokyo, es fácil convencer a Shannon.
— Si, nosotros podemos hacer eso mientras ustedes encuentran un plan — siguió Héctor— pero por favor no te rindas con mi chamaco, Hiro.
— Es que yo no quiero a Shannon como cuñada — musitó Marco— no es porque me caiga mal, pero no quiero que Miguel pase una vida infeliz con ella.
Y la felicidad de ambos chicos era aquello que unía al equipo CRKyBH por ahora, esa era su meta principal.
[...]
La cita de Shannon y Miguel fue bastante divertida, pero para el Rivera menor fue más como una salida de amigos que una cita, fueron a uno de esos lugares que hacían feliz a Shannon, un lugar de rapel y un parque de diversiones, el moreno le compro aquel helado de gomitas que antes le habia prometido a Hiro, cenaron comida coreana a petición de la chica y al final vieron una obra de teatro en el auditorio donde se conocieron. Pero Miguel no había disfrutado nada de aquel día, no era porque no gustará de la compañía de Shannon pero no pudo sacarse de la cabeza que tenía la posibilidad de volver a estar con Hiro y que la desperdicio por ser demasiado necio.
Así que cuando regresaron al hotel ya cerca de la medianoche Shannon notó lo distraído que estaba su prometido, entonces en medio de besos cortos intento saber que le pasaba a su novio, hasta que Miguel comenzó un beso más largo que empezó siendo lento y suave y que poco a poco se volvía rápido, eufórico, como si necesitaran del otro. Por primera vez parecía que pasarían a algo más que solo besos y abrazos, pero ni siquiera Miguel sabía si su intención era volverse uno con Shannon, solamente se dejó llevar.
— Canelita — dijo la chica Williams deteniendo a su prometido— esperemos hasta la boda, falta poco para eso.
—
Está bien, puedo esperar güerita.
Después de eso, con el pesar de no haber llegado al lugar donde Hiro lo había citado se quedó dormido junto a su prometida y al igual que la vez anterior su tío y su mejor amigo interrumpieron en su habitación al llegar la mañana, charlaron con Shannon sin la presencia de Miguel para que cuando el Rivera menor regresará del lobby su prometida le diera la linda noticia de que la boda sería en San Fransokyo, y que por eso se quedarían mucho más tiempo de lo esperado.
Miguel definitivamente mataría a Héctor y a Marco por haber hecho eso.
ESTÁS LEYENDO
How To Fall In Love With A Hamada (Higuel)
FanfictionDonde Miguel descubre el amor en un egocéntrico chico de San Fransokyo... ... O donde Tadashi deja una libreta con consejos sobre cómo enamorar a su hermanito. Dibujo de la portada hecho por Ureshi-san