Szayel hace un experimento utilizando el ADN de Aizen ¿qué es lo que ha creado?¡¿una mini copia de Aizen?! Ella aparecerá y pondrá su mundo de cabeza sin que lo hubiese planeado. Un poco tarde, pero puede que encuentre a alguien que lo comprenda rea...
- listo - dijo la castaña terminando de vendar el brazo del científico. Mantenía su semblante serio, pues aun no se le pasaba el enojo.
- sólo era un rasguño, me han pasado cosas peores - ella apretó el vendaje apropósito - ite..
- me preocupan, no quiero perderlos, a ninguno - Szayel abrió los ojos con sorpresa. Al ser un hollow nunca había sido apreciado por nadie, aun menos en un mundo donde rige la ley de que el más fuerte sobrevive mientras el débil muere.
Acercó una mano al rostro de ella, haciendo que lo viera.
- no se supone que los Hollows se preocupen por otros. Porqué tu si? Y.... porqué... yo también me preocupo por ti? - ella parpadeó un par de veces para luego sonreír débilmente.
- yo... los aprecio mucho, son como una familia para mí y la familia se cuida entre sí - se rió un poco de ella por esa respuesta tan cursi, pero al fin y al cabo era verdad. Szayel, sorprendido, guardó silencio unos momentos, esa chiquilla era todo un misterio, no la comprendía, sentir eso no era parte de la naturaleza de un Hollow.
- supongo que debe ser parte de tu mitad shinigami - dijo para sí, sonriendo levemente - ya.. no estás enojada? - ella lo meditó un poco para luego sonreír de lado levemente.
- no tanto como antes.
- bien, vamos, tenemos que ir por el otro idiota - dijo ignorando el mini regaño de la niña por la forma en que se refirió a su compañero, para luego ponerse de pie y salir del lugar junto a Hikari. Afuera, Grimmjow los esperaba con cara de pocos amigos.
- ya se estaban tardando, tan mal herido estaba? - le preguntó a la castaña, burlándose del pelirrosa.
- ya, no peleen - dijo en tono cansado - Vamos por Nnoitra-san - el peliazul puso una mano sobre su hombro.
- estoy seguro de que está bien, no te preocupes - le sonrió para tranquilizarla y ella asintió un poco más segura, confiando en las habilidades y fuerza de la Quinta Espada.
Sin perder más tiempo, los tres se dirigieron al lugar de la batalla.
Pero al llegar no se esperaban que las cosas estuvieran tan parejas. El Espada, aún con su resurrección activada, se notaba cansado y tenía bastantes cortes y heridas profundas, aún así se mantenía atacando; su oponente se encontraba igual, sólo que mantenía una sonrisa maniática mientras atacaba constantemente.
- Nnoitra...san...- trató de correr a donde éste estaba, sin importarle que Grimmjow y Szayel trataron de sujetarla de los brazos, ella se safó del agarre y usando Sonido llegó en unos segundos donde el pelinegro, que estaba a punto de recibir otro ataque. Sabiendo que no podía cargarlo y sacarlo de ahí, optó por empujarlo para que la espada no lo alcanzara.
Lo único que escuchó fue el sonido de la katana cortando algo...
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