Szayel hace un experimento utilizando el ADN de Aizen ¿qué es lo que ha creado?¡¿una mini copia de Aizen?! Ella aparecerá y pondrá su mundo de cabeza sin que lo hubiese planeado. Un poco tarde, pero puede que encuentre a alguien que lo comprenda rea...
Rápidamente localizó a su padre, pero le extrañó que estuviera en su habitación, pues no solía ir mucho allí. Tal vez, al igual que ella tenía algo que decirle, así que apuró el paso pensando que podría tratarse de algo importante.
Al llegar entró a la habitación, donde vio al Emperador de espaldas a ella contemplando el desierto a traves de la única ventana del lugar. Había una tensión en el ambiente que la confundía, habría pasado algo malo? O tal vez estaba a punto de pasar algo malo?
- debo suponer que ya sabes sobre el ataque al palacio, no? - dijo volteando un poco el rostro para poder verla. Ella asintió. Sosuke notó los rasguños cubiertos por bendas en sus brazos y un pequeño corte en su mejilla, pero lo que más le impactó fue su cabello corto. Debía admitir que si antes se parecían, ahora era su viva imagen. A paso calmado se acercó y la curó usando Kido - quién te hizo esto? - preguntó seriamente, y Hikari juró ver sus ojos oscurecidos.
- *ay, está enojado* tranquilo papá, no es nada - sonrió nerviosa restándole importancia.
- quién fue? - repitió.
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- sólo intervine en una pelea, no quería que Nnoitra-san saliera herido y pues, la katana del enemigo me alcanzó, es todo. Lilinette me ayudó a emparejarlo - desvió la mirada. Sosuke llevó una de sus manos a las puntas del cabello - ya crecerá de nuevo.
- contra quien peleaste?
- no sé su nombre, pero era un capitán y tenía un peinado extraño con cascabeles.
- Kenpachi Zaraki - respondió automáticamente -*Voy a matar a ese animal* - pensó terminando de curar a la niña.
- *te apoyo* - escuchó decir a Kyoka, quien se tronaba los nudillos.
- ellos sólo vienen por Orihime-san - trató de aplacar la furia de él - la dejarás ir, verdad?
- si, será libre de irse en unos momentos - luego de eso ninguno dijo nada más, quedando en un silencio extraño para la menor e incómodo para Aizen.
- hay.. algo que quieras decirme? Te noto diferente - ladeó un poco su cabeza.
- ven, sientate - el tomó asiento en el borde de la cama y al invitó a sentarse a su lado. Hikari, un poco extrañada por el comportamiento del mayor, aceptó - iré directo al grano. Sobre tus pesadillas... en realidad son un reflejo de mi pasado.
- entonces ese sujeto de gafas te hizo daño papá? - él no pudo evitar sonreír levemente.
- Aun eres muy joven para entender como la oscuridad consume las almas - ella lo miró extrañada.
- estás.. actuando muy extraño, me estás asustando - dijo soltando una risa nerviosa. Él trató de sonreír de forma amable para tranquilizarla.
