Buenos días.

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Desperté a causa de la luz brutal que invadía mi rostro. Fruncí el ceño y me levanté. Me acerqué a la ventana y cerré las cortinas. Luego, busqué en el cuarto mi ropa interior y me la puse. De paso, encontré la camisa de Isaac y me la coloqué.
Me volteé y lo vi allí, quejándose mientras abría lentamente sus bellos ojos azulados. Nos encontramos con la mirada y nos sonreímos al mismo tiempo.
Habíamos tenido relaciones anoche, definitivamente una de las mejores. ¡Teníamos mucha química! Fue increíble.
Me lancé a la cama y me fui acomodando mientras estaba allí en el colchón. Él con su rostro con sueño, me sonrió y pasó su mano por mi abdomen para abrazarme.

-Buenos días guapa-dijo ronco.

-Buenos días, ¿cómo dormiste?-le pregunté mientras me apegaba hacia su cuerpo

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-Buenos días, ¿cómo dormiste?-le pregunté mientras me apegaba hacia su cuerpo.

-Increíble. Aunque me gustó el momento que tuvimos antes de dormir-dijo con tono coqueto.

-¿Ah, sí? Quizás sería bueno repetirlo...

-¿Tú dices? ¡Yo feliz!-rió entretenido.

Entonces, se me acercó al cuelo y comencé a sentir su respiración, mientras toda mi piel se erizaba.
Inclinó su cuerpo hacia mí y con su mano tocó mi pecho, por encima, y apenas sentí su tacto me excite al instante. Luego, fue bajando su mano, hasta llegar a mi cadera, en donde me empujó hacia él.

 Luego, fue bajando su mano, hasta llegar a mi cadera, en donde me empujó hacia él

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Fue ahí, en donde escuché la puerta principal de la casa. Era mamá.

-¡Espera!-dije afirmándole la mano, haciéndolo parar.

Entonces, me quedé allí, sin moverme durante unos segundos, y escuché como la escalera sonaba. Mamá estaba subiendo, y lo podía notar a la perfección.
Me levanté rapidísimo, mientras que Isaac se cubría el cuerpo con la sábana.
Corrí a la puerta y le puse seguro, para que así no pueda entrar.
Mi corazón estaba latiendo con mucha rapidez y no sabía qué hacer o qué inventar.

-¡Hija! ¿Estás despierta?-dijo mientras movía la manilla.

-¡Sí mamá! ¿Qué sucede?-pregunté algo nerviosa.

(PAUSADA) El idiota de intercambio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora