(PAUSADA) El idiota de intercambio.

Segunda temporada: Insólito.

Estábamos en la mesa, comiendo. Los cuatro.

Alan recién había llegado, ya que se había ido de vacaciones con los amigos a la playa, pero ya había vuelto. El bronceado le quedaba bastante bien.

-¿Alguien me puede pasar la sal?-pregunté.

-Ten-dijo Alan, dejando la sal cerca de mí.

Agité el salero directamente en la carne, ya que soy demasiado salada. Y sí, lo sé, es malo consumir mucha sal, pero ni siquiera me interesa.

-¿Y cómo la pasaron en el baile de Tania y Felix?-preguntó mamá sonriente.

-Genial, estuvo muy entretenido y eran muy agradables-respondió Isaac.

-¿Y tú, Cariño? O sea... Sé que Valentín no pudo ir al baile y que... A propósito de Valentín, hace tiempo que no lo veo. ¿Sabes donde estará?-preguntó mamá.

Rápidamente me atraganté con el pedazo de carne y tomé el vaso de jugo para beber y no tener que responder a nada.

-¡La carne te quedó exquisita mamá!-respondió rápidamente Alan.

Gracias Alan, no tienes ni idea de lo mucho que te estoy amando...

-¿Tú crees? Siento que le falta un poco de sal-contestó mamá mientras se metía un trozo.

-No, está buena así-respondió Isaac.

Entonces seguí comiendo, intentando calmar la incomodidad que sentía luego de aquella pregunta tan ridícula y fuera de lugar que había hecho mamá. Siempre le dan esas cosas y comienza a preguntar y decir cosas que no corresponden.

-¡Isaac, tengo una bella noticia para ti!-dijo mamá emocionada.

Yo levanté la cabeza y la miré dudosa, sin saber lo que iba a decir.

-¿Para mí?-preguntó Isaac.

-Sí, Cariño, para ti.

-¿Y qué sería?-preguntó sonriente.

Entonces miré atentamente a mamá, esperando a que hablara y la verdad es que no tenía ni idea a qué sorpresa se podía referir.

-La prima de Alexa vendrá mañana a cenar con nosotros y se muere por conocerte. Quizás sería buena idea que salieran al cine o algo entretenido-dijo alegre.

No podía creer lo que estaba escuchando. Mi prima de mierda, la que me había dicho que estaba interesada, la que me había preguntado si me importaba que se lo llevara a un dormitorio. No lo podía comprender. Estaba tan molesta. Y es que a veces sentía que mamá me hacía estas cosas a propósito. Muchas veces pensé que ella ya sabía toda la verdad e intentaba hacer lo imposible por separarme de Isaac.

-¿Cuál prima?-preguntó Alan e shock.

-Camila-contestó.

-¿Camila...? Ni me suena-dijo pensativo Alan.

-¡Venga Alan, la rubia!-dije fingiendo alegría.

-¿La hija de Felix y Tania?-preguntó Alan.

-Sí, Cariño-dijo mamá.

Alan me miró y luego hizo un gesto de inconformidad.

-¡Ay Dios...!-dijo con un suspiro.

Luego de aquel gesto, miré rápidamente a mamá, quien lo miraba dudosa.

-¿Qué ocurre?-le preguntó.

-¡Mamá, dime por favor que es una jodida broma!-dijo cubriéndose el rostro.

No entendía porqué Alan estaba actuando así.

-¿Qué tiene?-preguntó mamá.

-Ella me cae demasiado mal. Encima que es aburrida y fea, no tiene ni una gracia-dijo encogiéndose de hombros.

-Opino lo mismo-dije mientras metía un trozo de carne.

-¿Acaso no quieres lo mejor para Isaac?-preguntó mamá un poco ofendida.

-Cierto, Alexa. ¿No puedo ser feliz?-preguntó Isaac bromeando.

Me dio una mirada atenta y me apretó todo el estómago.

-¡Claro que sí! Por eso mismo te lo digo. Ella no sería la indicada-le respondí sonriendo.

-¡Es increíblemente aburrida, encima que es desagradable!-dijo Alan.

-Cariño, nunca te has llevado bien con ella-le dijo mamá.

-Claro, por lo insoportable que es-contestó.

Alan, eres increíble...

-Opino que no debería venir-dije segura.

-¡Venga, se acabó! Mañana viene Camila y no quiero quiero que sean irrespetuosos. Vamos a darle una cálida bienvenida y ya. Espero no tener que regañarlos-soltó mamá enojada.

-¡Ya mamá! Entendimos. Vamos a recibirla bien y ya está-dije levantándome de la mesa.

Alan me miró perplejo porque me había levantado de la mesa, lo cual jamás se hacía.

Estaba ardiendo en celos y en estrés. Y es que vendría Camila y bueno...

1- Camila es increíblemente desagradable.

2- Camila iba a venir únicamente para conocer a Isaac.

3- Isaac es mi novio.

Levanté mi plato y lo llevé a la cocina, mientras intentaba respirar profundamente y tranquilizarme.

Lo que más me molestaba, era la actitud de mamá. Siempre intentando joderme con Isaac. A veces realmente se me pasaba por la mente que ya sabía todo, y es que era impresionante la cantidad de veces que intentaba arruinarnos el momento.

Subí ignorando a los chicos, y me dirigí con rapidez a mi pieza, para una vez allí adentro, cerrar la puerta y lanzarme en la cama.

Camila...

Camila era una chica de la cual hay que preocuparse. En el sentido de que, es una chica bastante tóxica.
Recuerdo que cuando éramos niñas, siempre me quitaba a los chicos que me gustaban, a veces me cortaba el pelo o me pegaba chicles. Siempre lloraba para que mi mamá la cargara en brazos, ya que atención de sus papás no recibía mucho. Y es que Tania y Felix trabajan mucho, entonces la llenaban de cosas materiales para cubrir su ausencia.

Estaba estresada. No quería ni imaginarme la cena con Camila en mesa. Lo peor es que conocía sus intenciones. Ella me había insinuado que estaba interesada en Isaac, y es terrible saber que una chica está detrás de tu novio y no poder hacer nada.

Mañana tenía clases, y lo único que quería era conversar con Aria, porque sus consejos son lo máximo.