Mi intuición era buena: este hombre es capaz de cualquier cosa. —Hola, mi pequeña—dice con suavidad mientras entra en la habitación.
Lanzo una mirada desesperada a mi alrededor, pero no veo nada que me sirva de arma sólo las lámparas de alado de la cama pero están lejos de donde yo estoy parada,tengo la boca más seca que nunca . Ni si quiera puedo reunir la saliva necesaria para hablar. Me quedo ahí mirando
cómo me acecha; es como si fuese un lobo hambriento y yo su presa.
Pienso luchar como se atreva a tocarme un pelo, que no piense que seré la pequeña niña buena y tonta.
Da un paso hacia mí y yo doy otro hacia atrás. Luego da otro y
otro hasta que me topo con la pared. Me encojo en mi lugar, levanta la mano y me tenso; estoy dispuesta a defenderme. Pero se limita a darme una botella de agua y me la tiende. —Toma —dice—. Imagino que tendrás sed.
Me quedo mirándolo. Me estoy muriendo de sed, pero no quiero que vuelva a drogarme, No pienso tomarme nada que el me dé.
Parece que entiende mi indecisión. —No te preocupes, mi pequeña solo es agua, te quiero despierta
y consciente. No sé cómo reaccionar a eso. El corazón me late en el
pecho, estoy muerta de miedo.
Permanece quieto, observándome con paciencia. Me rindo ante mi propia sed cojo el agua con la mano Me tiemblan las manos y le rozo los dedos sin querer. Siento que me recorre una ola de calor y me olvido de ella
rápidamente, estoy tan asustada que empiezo a temblar, el que parezca tan calmado me asusta más, siento que en cualquier momento se va lanzar enzima de mí.
No recuerdo la última vez que disfruté tanto bebiendo agua. La boca
seca debe ser el efecto secundario de la droga que utilizó para traerme aquí.
Ahora que puedo hablar le pregunto. —¿Por qué? estoy aquí.
Para mi gran sorpresa, mi voz suena casi normal. Levanta la mano y me vuelve a acariciar la cara Igual que hizo en el club. Y tal como ocurrió esa vez, lo dejo Que me toqué sin ni siquiera moverme. Siento sus dedos suaves contra la piel, es una caricia
casi delicada. Es un contraste tan brutal con la situación actual
que me siento confusa durante un momento. —Porque no me gustó verte en ese bar. —dice Klaus, con furia en la voz—. Porque todo a te vieron , te pusieron las manos encima.
Apenas puedo pensar. —¿Quién? —susurro, intentado averiguar de quién está hablando. Entonces lo entiendo—. El chico con el que baile? —Sí, Rose —dice desafiante—, ese imbécil —Está… —Ni siquiera estoy segura de poder decirlo en alto—
¿Está…vivo? —claro que NO —responde él con una mirada penetrante, no puede ser en donde vine a parar necesito salir de qui y entonces lo recuerdo sam! —donde está Sam que le histe??-- está en el hospital con una conmoción cerebral leve. Siento tanto alivio que me dejo caer contra la pared. De
repente caigo en la cuenta de sus palabras. —¿De momento? ¿Qué quiere decir eso? Klaus se encoge de hombros. —Su salud y bienestar dependen completamente de ti.
Trago para humedecerme la garganta. —¿De mí?
Vuelve a acariciarme la cara y me pone un mechón de pelo
tras la oreja. Tengo tanto frío que siento como si su tacto me
quemara la piel. —Sí, mi mi pequeña de ti. Si te portas bien, élla estará bien. Si no…
Casi no puedo respirar. —¿Si no…?
Klaus sonríe. —Estará muerta dentro de una semana.
Tiene la sonrisa más hermosa y aterradora que he visto jamás.
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Rose
RomanceLas mujeres somos bellas, astutas, inteligentes! Por eso nos temen.. ¿Creen en el destino? Serás feliz me dijo el destino... pero primero te enseñaré a ser fuerte. **Prohibida su cópia, sin autorización ten imaginación y no robes la de los demás.*...