Capítulo 5

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Estoy tan sorprendida que me quedo allí plantada. Nadie melo había hecho antes, nadie me había tocado así como si nada, de aquella forma tan posesiva. Siento frío y calor a la vez,
y unescalofrío de miedo me recorre la espalda. No vacila en susgestos. No
pide permiso ni se detiene a ver si lo dejo tocarme.No el sólo toma lo que quiere doy un pasa vacilante así atrae y se le oscurece la mirada parece que no le gusta que me aleje de el entonces recuerdo lo que me dijo mi papa De los monstruos disfrazados de corderos-- creo que debería irme-- le digo vacilante a Klaus-- si claro- Sé que me deja ir y me siento agradecida porquealgo en mi interior me
dice que podría haber ido más allá, que no sigue las reglas establecidas.
Que seguramente sea la persona más peligrosa que he conocido jamás.
Me doy la vuelta y me
abro paso entre la gente.
Metiemblan las manos y el pulso me late con fuerza en la garganta. Tengo que salir de allí, así que cojo a sam y le pido que me lleve a casa Al salir del bar miro hacia atrás y vuelvo
a verlo. Sigue mirándome en su mirada se lee una oscura promesa; algo que me hace estremecer.

RoseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora