Capítulo 44

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                        CAPITULO 44

¿QUE ESTAS HACIENDO PEQUEÑA?...............

--Me has asustado –Logro decir, siento como el separa un poco su cuerpo del mío, dando suficiente espacio para dar la vuelta me topo con unos ojos verdes no oscuros.
MIERDA...  

--Lo siento pequeña no quería asustarte– contesta el Pakhan capto el sarcasmo en su voz mientras me acaricia la mejilla Si claro, digo entre dientes que hace aquí.

--¿Qué hace aquí?  Klaus mi esposo debe estar en camino. –Hago pausa en mi esposo para ver si eso lo hace entrar en razón.

El solo me miraba sin decir nada es algo aterrador, vi algo de preocupación es sus profundos ojos verdes, y de nuevo el miedo y deseo me invadió.

La fuerte mano llena de tatuajes bajo lentamente por mi cuello,

con la yema de los dedos fue haciendo un circulo en mi clavícula, bajando al inicio de mis senos, mi pecho comenzó a subir y bajar rítmicamente

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con la yema de los dedos fue haciendo un circulo en mi clavícula, bajando al inicio de mis senos, mi pecho comenzó a subir y bajar rítmicamente.

--Tie..nes que irte –Murmure

--No, aun no pequeña. –Su mano se deslizo por mi cintura y me acerco a él, fue cuando sentí su erección presionando contra mí. 

Con la otra mano me agarro del cuello y me BESO,

suave y lentamente escuche un gruñido salir de su masculina garganta al parecer se estaba excitando cada vez más, tanto como lo estaba ella en ese momento

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suave y lentamente escuche un gruñido salir de su masculina garganta al parecer se estaba excitando cada vez más, tanto como lo estaba ella en ese momento.

--Alguien puede vernos –Le digo entre jadeos tratando de entrar en razón.

--Tienes razón... que nos vean. –¿Que?

Ella no supo que contestar su vida no era especialmente sencilla y menos en ese momento, todo había empezado como un juego aun que siendo sincera la excitaba demasiado que alguien los estuviera viendo.

El la miraba esperando una respuesta, y entonces hizo lo único que realmente necesitaba se dejó llevar y lo beso... ...
Quería sentir su sabor el tacto de su lengua contra la suya antes de que todo terminara, el deseo de ellos se desbordo, el agarro del pelo por la nuca y le echo la cabeza hacia atrás.

RoseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora