Te arrastraré a mi infierno. +18 {Parte 1} (Borrador)

Nineteen

Venus L.

Annabeth y su cara de pocos amigos me tienen hasta la coronilla, es que la miro y en verdad no me cabe en la cabeza como es que alguien puede tener tan poco amor propio. La verdad yo no andaría detrás de Grey mientras el me ignora, como ella lo hace.

—Te dije que te alejaras de el,  y tu dijiste que el no te importaba.—Se dirige hacia a mi, ahora armara un berrinche.

La miro sonriéndole, la reina de los dramas eso es lo que es, una dramática.
Respiro profundo.

—Cambie de opinión, ya me importa.—Sus mejillas se enrojecen de rabia, me mira con ganas de querer matarme.

Le dedico una sonrisa llena de hipocresía, no sé porque hacerla enojar se ha vuelto algo que me encanta, así como un pequeño hobby, es fascinante ver todas las cosas locas que está dispuesta a decirme solo por Grey, me pregunto si ella en verdad lo ama o solo lo hace por joder.

—No juegues conmigo... no te hagas la mosquita muerta porque no eres nada, ¿entiendes? ¡NADA!—Gruta para mí, el enojo le sobre sale de todos los lados.

¿Donde están mis palomitas, carajo?

Suelto una seca carcajada que suena muy alto.

—Tengo una duda, ¿Hablas de mi o de ti misma?—Casi votó humo por las orejas, su cara se puso muy roja.

—Ustedes dos no van a ser felices, ojalá y no lo sean.—Dos lágrimas se deslizaron por sus mejillas, sus palabras sonaron más como una predicción, como si nos estuviese echando una maldición.

Dándose la vuelta con sus ojos llenos de lagrimas camina hacia la puerta de la azotea, donde veo a Crystha quien la espera con los brazos abiertos para abrazarla, ella la empuja y sale corriendo, crystha me dice adiós con la mano y corre detrás de ella.

¿Estaría raro decir que me sentí mal al verla llorar así de esa manera? Luego de todo lo que le dije, creo que si lo estaría.

—¿Quieres venir a la bahía esta noche?—Pregunta Hades tomando una de mis manos entre las suyas.

Niego rápidamente, salir como estaban las cosas es buscar un ataque seguro, los rusos seguro solo están esperando a que salga para volver a joder con sus ataques.

—Paso, Grey.

Frunce sus cejas.—Nada de paso es más, olvida la pregunta, la dije mal era, vendrás esta noche a la bahía.—Se corrige y sonríe al ver mi cara toda descolocada.

Lo pienso unos segundos, no haré nada en toda la noche, no quiero quedarme sola tampoco así que creo que sería buena idea ir, digo solo para estar en compañía, con Ari y Megan.
No por Grey, obvio.

Al final asiento provocando que el me sonría.

—Iré un rato esta noche.—Digo.

                                            •••

Un vestido blanco ajustado corto y unas botas rojas de cuero que llegaban justo a la mitad de mis muslos, o donde se termina el vestido, cabello suelto que llega a mi trasero, labios rojos y un bolso rojo, no se que parezco más si la hija del diablo o una angelita perversa con esta ropa, en el bolso pongo un arma pequeña, mi celular y el labial rojo que tanto amo. Me miro al espejo unas diez veces antes de salir confirmando que si estoy satisfecha con este atuendo y me doy la vuelta para salir. Al llegar a la sala de estar veo a Ariadna y a Grey sentados hablando, al verme se ponen de pie listos para irnos.

—¡Demonios! Y eso que no querías ir.—Se burla Ariadna.

Río ante sus palabras.

—Ese vestido esta muy corto, además es blanco, puedo ver tus bragas desde aquí, Pringada.—Escucho a Hades decir.