|~Capítulo once~|
—¿Qué?—pregunté atónita, sin creerme nada de lo que me estaban diciendo—¿Acaso te estás escuchando?
—Si, me escucho con perfección y ya está tomada la decisión, el niñero estará aquí en unos minutos.—¿Él? Espero haber escuchado mal.
—Espera, espera... ¿Él?—dijimos mi padre y yo al mismo tiempo.
—Si, él.—habló ella tranquila mirando su celular.
Santa Ramona ten piedad por favor.
—Esto no puede ser en serio...—susurró mi padre molesto—Habíamos quedado en niñera, en ningún momento con un niñero.—dijo haciendo énfasis la última palabra.
—Dentro de cinco minutos está aquí, ya no hay vuelta atrás. Ninguna de sus tías está dispuesta a cuidarla porque están ocupadas, la niñera canceló y sólo me quedaba ésta opción.—repitió a la vez que contestaba la llamada.
—¿Al menos lo coneces?—pregunté de nuevo molesta.
—No, pero confío en la persona que me lo recomendó.
Mi padre me miró y volvió a suspirar—Por lo menos no estarás sola, no hace mucho pasaste una situación de peligro y no podemos arriesgarnos, sé que un niñero no es lo mejor pero...
—Sola no te quedas y punto, así que deja tu berrinche.—dijo mi mamá tapando el altavoz del teléfono.
¿Berrinche? ¡¿Berrinche?! ¡Me están dejando con un desconocido de mierda y lo catalogan cómo berrinche!
Nada de esto pareciera que le interesará, me deja al cuidado de otra persona así como así. Como si fuera un animal.
—Me tienes que estar jugando una broma, esto es... ridículo.—miré molesta a mi madre.
Mi padre soltó un sonoro suspiro y se tocó la cien negando, se veía bastante molesto.
—Ojalá lo fuera.
Una vez más traté de suplicarles con la mirada, mi padre sólo la apartó... él no podía hacerme esto, ella me estaba prácticamente humillando y tratándome como una cosa cualquiera. Por otro lado mi madre no me prestaba atención, estaba totalmente concentrada y emocionada en su conversación a través del móvil ignorándome por completo. La miré a ella y luego a mi papá, él solo se alzó de hombros capaz de contradecirla...
Nada raro en él.
—Por favor..., pronto cumpliré diecisiete en unos meses, ¿No crees que estoy lo suficientemente grande para un niñero? Nada malo me va a pasar, es más peligroso dejarme con un extraño que sola. Es ilógico.—exclamo irritada con la situación, de verdad no puedo creer que esto me esté pasando a mí.
Dejan que mi hermano haga lo que le dé la gana, que se vaya sin avisar, fiestas sin control y más... sin mencionar que no ha terminado la secundaria. En cambio a mi, que apenas y salgo ¡Me ponen a un niñero!
Mi madre colgó el celular y me miró, puso una mano en la cadera y la otra en el puente de su nariz.
Allí se viene el sermón.
—Te recuerdo, que mientras seas menor de edad y vivas bajo nuestro techo harás lo que se te ordene. Además nos vamos por meses, no por unas cuántas semanas y como dice tu padre no nos arriesgaremos contigo.—explica la mujer tratando de hacer como si en realidad fuera necesario.
Sé, que dice todo eso para que mi padre no se oponga y lo logró, puedo ver como sus ojos brillan sin parar mirándola con total admiración y ternura. Esta mujer tiene un poder sobre mi padre increíble, él ni siquiera lo nota.
ESTÁS LEYENDO
ʜᴀʀᴅ ʟᴏᴠᴇ - ᴋɪᴍ ᴛᴀᴇʜʏᴜɴɢ
Fanfiction¿Qué fue lo más conveniente para mis padres en un intento de no dejarme sola en casa...? Exacto, un niñero era la mejor solución para ellos. Es tan estúpido e incoherente, parece un muy mal chiste pero lastimosamente, en este caso no lo era. El gran...