Capitulo 11

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Me quedé parada allí observando el extraño lugar, mi corazón dio un vuelco al pensar que mi hermano vivía allí. Era un espacio muy reducido, la ropa estaba esparcida sobre el suelo, donde solamente una cama y un viejo mueble que parecía ser un escritorio. Una puerta desentonaba en aquella pared mal pintada. Jason posó sus manos sobre mi cintura haciéndome entrar...

-Sé que no es lo que acostumbras pequeña - dijo cuando volteé a mirarlo preocupada, se apoyó contra la puerta y me miró fijamente a los ojos - Pero no es lo mas importante ahora.

-Jason, necesito que me expliques, necesito saber que es lo que está sucediendo.

-No tienes nada que saber ________ ya te lo he dicho - contestó enojado, tal ves tendría que haber entendido que no debía, tal vez no tenía que haberme metido en sus cosas, pero solamente sucedió.

-Quiero saberlo - le confesé - Necesito entender muchas cosas, Jason.

-¡NO! - gritó mientras se dirigía a la puerta completamente enojado, por unos segundos había desaparecido, sin mas fui tras él - Lo que menos necesito es que tú te involucres en estos temas, ________ (Tn) no te metas en temas que no te incumben porque saldrás lastimada y no quiero eso.

-¿¡Por qué!? - grité asustándome a mi misma en ese mismo momento, no podía creer lo que acaba de hacer, le había gritado a Jason - Quiero saber que demonios está sucediendo, tú y tus malditos secretos me tienen harta.

-¡A mí no me faltas el respeto, pequeña! - me agarró bruscamente de los brazos estampándome contra la pared, mi espalda se arqueó al sentir el contacto brusco - ¿¡Lo entiendes!? - volvió a azotarme contra la pared - ¡Yo no soy Justin, yo no tendré compasión!

-Puedo entender mucha de las cosas que dices Jason... - dije con dolor, sintiendo que sus golpes me partían en dos, pero aun así no intente separarme de él - Pero a ti nunca te entenderé - cerré los ojos para no verlo, no quería ver su expresión solamente quería soltar lo que tenía adentro - Te vas de la casa, dices cosas sin sentido, llegas a mi escuela, te haces pasar por Justin, ¿Qué demonios sucede Jason? No lo logro comprender.

-Tú no tienes nada que comprender - dijo en un susurro - Tú no debes meterte en esto, los bastardos de nuestros padres tienen la culpa.

-¡Ellos han hecho lo mejor por nosotros! ¡No entiendo tu odio! - grité desafiándolo, por primera vez en mi vida me había cansado de ser sumisa, solamente quería saber la verdad.

-¡NO NECESITO QUE LO ENTIENDAS! - gritó enfurecido mientras apretaba con fuerza mis hombros, la brusquedad, pasó a ser una intensa violencia - ¡TÚ NO SABES NADA!

-¡Pues explícamelo Jason! - grité desesperada, esperando una mínima respuesta que aclarara mis pensamientos, algo que me diera una razón para no estar mas confundida de lo que ya estaba - ¡Ayúdame a entender que es el odio tan grande que le tienes a mis padres! Y a... - hice una pausa, pensando dos veces lo que iba a decir.

-Justin... - masculló, abrí los ojos encontrando ante mí a un enojado Jason, el rostro de la maldad estaba frente a mi - ¿¡Qué demonios tiene Justin!? ¡Él es mucho peor que ellos! Él solamente supo seguir las reglas de ellos, como un imbécil. ¡Yo me rebelé! ¡Yo solo descubrí la verdad!

-¿Qué verdad? - logré susurrar, mirándolo atentamente.

-No te lo diré... - dijo en un tono mas calmo mientras trataba de calmar la revolución que tenía en su interior, mientras que en mi desataba la guerra - Solamente intento cuidarte, y créeme que cuando seas mas grande lo entenderás.

-No soy una niña Jason - dije tratando de ser firme pero simplemente la cercanía de nuestros labios me lo impidió, solamente el nerviosismo controlaba ahora mis acciones.

-Eso ya lo sé pequeña - se abalanzó sobre mí sin mas, devorando cada centímetro de mis labios, aprisionó mi cintura con sus brazos, apegando su cuerpo contra el mío - Eres la única mujer que ha logrado que la deseara tiempo después de tenerla, _________ necesito hacerte mía.

-Pero primero necesito que me digas la verdad - tomé un poco de distancia de él, pero aun así era casi nula, su respiración chocaba contra mi rostro - Basta de secretos.

-No tenemos tiempo pequeña, prometo que algún día te lo diré todo.

No supe si creerle, no supe si era verdad o si era una simple mentira que decía para acortar lo que en realidad iba a pasar, solamente lo seguí.

El atrapó mis labios fundiéndolos con los suyos en un intenso beso, sus manos recorrieron mi espalda adentrándose en la fina tela de mi camisa blanca. Casi sin darme cuenta, tal vez por el hecho de que estaba concentrada en sus caricias nos adentramos en su habitación. Jason cerró la puerta pegándome nuevamente a ella, rápidamente me abrió la camisa mientras que yo con un rápido movimiento lo despojé de su remera, fue tan rápido como en un abrí de cerrar terminamos ambos de una pelea, a una lucha rápida con la ropa para terminar en la cama. Jason se sentó sobre la colcha color verde musco que estaba sobre su cama mientras que yo me deshice de mis zapatos. Lo miré allí sentado sobre la cama, mirándome atentamente, con la respiración agitada, con esos ojos color miel pidiendo a gritos que me acercara.

-Ven aquí - dijo mientras se abrazaba a mi cintura y besaba mi abdomen que estaba descubierto, el contacto de sus labios solamente logró hacerme ahogar un gemido, esta vez lo deseaba mas que ninguna - Nos desharemos de esto también - sonrió mientras bajaba la falda a tablilla del colegio de un solo tirón - Siéntate.

-¿Estás seguro de esto? - pregunté mientras me sentaba en su regazo, pasé mi mano por su cinturón desabrochándolo de una vez, y deslicé mis manos por su abdomen y cuellos hasta dar con su nuca, esta vez yo fui quien lo besó desesperadamente sus labios, enredando mis dedos en su cabello.

-¿Eso no lo debería preguntar yo pequeña? - sonrió mientras volvía a besarme - Créeme esta vez ya no importa nada, solo tú y yo.

Gemelos Explosivos j.b [Erótica] [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora