- Ve a comprarme algo de beber -me ordenó Taehyung.
Taehyung, Namjoon y yo nos encontrábamos esperando en el aeropuerto para emprender vuelo hasta el destino de nuestro viaje. Tome el dinero que me dio Taehyung en mis manos y fui directo a buscar un establecimiento donde vendieran bebidas. Con una Soda en mano iba camino hasta Taehyung cuando escuché una voz a lista lejos, una voz desconocida que parecía discutir con alguien.
- Jungkook, no puedes acabar con la maldición, acepta que estas maldito y no puedes amarla -decía una voz masculina.
Me detuve cuando escuche ese nombre... Jungkook. Cautelosamente seguí la voz por lo largo de un pasillo repleto de puertas de habitaciones, cuando la voz se intensificó me detuve tras una de las tras una de las puertas, la puerta estaba entre cerrada pero supe que la voz provenía de ahí dentro.
- A mí no me engañas -dije otra voz. La voz clara y perfecta de Jungkook-. Tú me maldijiste y tú tienes el poder de deshacer esa maldición. Yo se bien quien eres tú J-hope.
Asome mi mirada a través de la abertura de la puerta y ví la escena. Estaba Jungkook de pie frente a un hombre medianamente alto de ojos cafés, el tipo llevaba jeans de color gris y una camisa negra, zapatos negros y una pulsera de cuero grueso adornando su mano derecha en conjunto con el collar que llevaba en el cuello del que parecía colgarle un diente, mejor dicho un colmillo.
- Tú no mereces ser liberado de la maldición -argumentó este tal J-hope-. Tú eres un demonio, los demonios no merecen ser felices.
Ví a Jungkook sonreír con malicia.
- ¿No sientes lástima por esa pobre chica inocente? -le preguntó Jungkook-. Ella sufrirá por culpa de tú maldición.
- Sufrirá de igual forma -replicó J-hope.
Jungkook sonrió mostrando sus brillantes dientes blancos todavía más.
- Todo lo haces por tu envidia -dijo Jungkook acercándose a J-hope-. Tu deseas ser como yo y tener lo que yo tengo, pero nunca llegaras siquiera a alcanzarme.
- Nadie quiere ser un maldito asesino como tú, Jeon Jungkook -la vida de J-hope se intensificó al igual que su mirada.
- ¡Pero que pequeño es Busán! -me dijo Jungkook cuando volteo su mirada y me vio espiandole.
J-hope y Jungkook me miraron sin parecer sorprendidos en absoluto, comienza si siempre hubieran sabido que yo había estado escuchandolos.
- Otra vez tú de nuevo -me dijo Jungkook-. J-hope, ella es mi amiga, _______.
Me quedé mirandolos con gesto de total confusión.
- ¿Es ella? -pregunto J-hope-. Si pides mi opinión yo diría que es muy inocente para ti.
- Nadie pidió tú opinión -grupo Jungkook mirándo con odio a J-hope.
Luego de eso vi a J-hope desvanecerse. Simplemente desapareció en el aire como si nunca hubiera estado allí, me enmudeci de la impresión que me causó ver a ese J-hope desaparecer en un abrir y cerrar de ojos sin dejar rastros.
- Impresionante, ¿no? -me dijo Jungkook sonriendome después de que estuvimos solos.
Yo seguía del lado de afuera de la puerta. Jungkook caminó un paso hacia mí y yo retrocedi un paso al mismo tiempo. No estaba segura de a que me enfrentaba teniendo a un... "Demonio" frente a mí.
- No tengas miedo -me dijo Jungkook en tono tranquilizador.
Mis piernas se tanbaleaban tanto por miedo ahogado dentro de mí que cuándo intente dar otro lado hacia atrás caí en el suelo sobre mí espalda al mismo tiempo que derramaba la soda de Taehyung en el suelo. Jungkook aprovechó la situación, para acercarse hasta mí.
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Enamorada de un demonio ( Jungkook y tu) Editada
Fanfic¿Cómo puedo ser yo la que tenga que salvar al mundo de los demonios? Me eh vuelto adicta a uno de ellos, tan solo soy una chica normal, sin ningún tipo de poder, tímida y con muy poca seguridad de si misma, solo soy (TN) la que se enamoró de la pers...