Enamorada de un demonio ( Jungkook y tu) Editada

PRIMERA PELEA

Jungkook se levantó del suelo también y dos chicas se lanzaron a atraparlo, cada una lo tomó de un brazo. Él esbozó una sonrisa pícara con cierta malicia.

- Sé que soy realmente irresistible, pero de a dos chicas a la vez sería demasiado -dijo Jungkook con sarcasmo-. Saquen a estas bellezas de aquí antes de que las devuelva al
infierno. -Sé que sonará tonto, pero yo estaba celosa, esas mujeres demonios tenían en sus manos los fuertes brazos de Jungkook y él las había llamado bellezas. "Soy una estúpida" pensé.

Jungkook no era mío ni mucho menos y había muchas cosas más importantes por las cuales preocuparse. Seguidamente Jungkook se sacudió a las dos chicas mandándolas lejos, unos cinco hombres se lanzaron encima de Jungkook y otros dos hombres ayudaron a las chicas a levantarse. Cuando vi a Jungkook desaparecer debajo de aquellos tipos mi impulso fue intentar correr hasta él pero Hyo se aferró con más fuerza a mí para evitar que me escape.

- ¡Suelta a _________! -gritó Jungkook luego de haber dejado tendidos en el suelo a todos esos hombres. Hyo negó con la cabeza y por la forma en que su cuerpo temblaba supe que él tenía miedo de Jungkook.

- ¡JUNGKOOK! -grité cuando vi que Kuyng se abalanzaba tras él con una daga de unos treinta centímetros de largo. Kuyng tomó por detrás a Jungkook y lo amenazó poniendo la daga en su cuello.

- No te muevas, muchacho -dijo Kuyng y vi el movimiento de la garganta de Jungkook cuando tragó saliva tras la enorme daga que amenazaba su garganta-. Hyo, liquida a la chica ahora -hizo énfasis al decir la última palabra.

- Sí, señor -respondió Hyo.

Hyo me golpeó tremendamente fuerte el rostro y me dejó tendida en el suelo.

- ¡NOO! -gritó Jungkook al verme.

Yo lloré de dolor. Los ojos de Hyo se transformaron y cambiaron a ojos felinos verdes amarillentos, y me lanzó un rasguño mortal a la cara. Chillé adolorida entre sollozos. Tumbada en el piso me volví para ver a Jungkook y él cerraba los ojos con fuerza como cuando no quieres ver una parte fea de una película.

- Ya basta. ¡Es suficiente! -exclamó Jungkook-. Si piensan matarla mátenme primero a mí, no voy a soportar verla morir.

¿Qué? ¡No! Quise gritar, pero mi voz no salía. Yo jamás iba a aguantar que Jungkook muriera antes que yo, eso sería lo más terrible que me podría suceder, eso me dejaría sin vida
instantáneamente. Con sus propias manos Hyo rasgó todavía más mi vestido y dejó en mi abdomen una profunda herida ensangrentada hecha con sus uñas felinas. Jungkook empezó a forcejear para salir del agarré de Kuyng pero este reaccionó rasgando con la daga un poco el cuello de Jungkook y una roja línea de sangre se le formó en la piel justo allí donde lo cortó. Kuyng enfureció de un momento a otro y mandó a volar a Jungkook por los aires utilizando nada más que su mirada, ahora los ojos de este tipo eran rojos brillantes como el fuego.

Me dolió más escuchar a Jungkook gemir de dolor que mis propias heridas. Él estaba inmovilizado, Kuyng lo tenía bajo un extraño poder de sus ojos que no lo dejaba moverse.

- Detente, Kuyng, suéltame -Jungkook intentaba que su voz no sonara demasiado adolorida, lo supe por el esfuerzo que noté cuando lo escuché hablar. Aunque el Sr. Kuyng estaba a bastantes metros de distancia de Jungkook yo sabía que él estaba haciéndole daño con algún extraño poder, Jungkook gemía e intentaba contener gritos de dolor apoyado contra una pared y sin poder moverse en absoluto.

Fue traumatizante y horrible, yo lloraba más por Jungkook que por mí misma, fue aterrador, me dio mucho miedo perderlo a él. Yo aún no había muerto porque Hyo se había quedado paralizado, Lee Kuyng le echó una asesina mirada y este reaccionó nuevamente y arañó mi rostro otra vez, volví a chillar y Jungkook soltó un sonido parecido a un llanto ruidoso. El resto de los demonios seguían a nuestro alrededor inmóviles como muñecos de cera.

- ¡JUNGKOOK! -grité con demasiado esfuerzo y mi voz sonó ronca y lastimada.

Todo se paralizó cuando se escucharon unas voces discutir ruidosamente a lo lejos. Un hombre bajito y de aspecto débil entró por la puerta corriendo y bastante agitado.

- Sr. Lee, vinieron por ellos -dijo este tipo bajito-. Vinieron a buscarlos.

- ¿Por qué no los detienes? -sugirió arrogante Kuyng.

- Tienen un refuerzo -le respondió.

- ¿Qué quieres decir?

Repentinamente la puerta del lugar se abrió y del otro lado aparecieron Yoongi, Namjoon y el padre Donghae con una cruz en sus manos.

- ¡Atrápenlos! -gritó Kuyng.

Esos demonios fueron directo al ataque y vi a Yoongi luchar como nunca, limpiamente lanzó golpes a sus atacantes y Namjoon sacó un cuchillo con el que intentó defenderse pero los enemigos eran más fuertes que él y lo derribaron haciendo que su arma resbalara de sus manos.

Yoongi recibió un golpe en su cara y comenzó a sangrar y el padre Donghae tenía una cruz de madera sostenida y yo leía en sus labios que estaba susurrando algo parecido a
una oración.