Capitulo 5

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Santuario del Kraant. En algún lugar del universo.

—El Kraant se ha encendido... — dijo Sacarlett

—¿Qué está ocurriendo? — preguntó Apex, su compañero hechicero.

Una llamarada ámbar brotaba de una especie de caldero. El fuego moldeó mágicamente una conocida silueta para la humanidad para la humanidad... la isla de Alcatraz.

—¡El santuario A ' poo! ¡El Ankh lo abrió!

—Creí que ella se había desecho de esa cosa ¿Quién lo podría tener?

—¡Tenemos que ir! — exclamó la chica.

Un portal grisáceo se abrió al lado de la llamarada. Tenía un aspecto intrigante y maravilloso a la vez, como si alguien hubiese "cortado" el aire con una espada, dejando una grieta flotante en la cual donde se podía apreciar la isla de alcatraz en el fondo.

Isla de Alcatraz 18:23hrs.

—Es aquí... — dijo la chica, mirando alrededor. Estaban en una de las antiguas celdas de la prisión.

—No hay señales de magia. Ni del Ankh.

—Alguien estuvo aquí. El Kraant no se equivoca

—Creo que la hora de visitas fue hace décadas — bramó alguien, a sus espaldas. Inmediatamente, el par de hechiceros se dieron la vuelta.

—¿Quién eres? — preguntó el hechicero.

—Crawford... Logan. Pero no estoy aquí para dialogar — sacó la reliquia del bolsillo de su elegante pantalón.

Los "magos" agitaron los dedos de una manera extraña, cuando de pronto sus atuendos (un conjunto de túnicas blancas de aspecto mongólico), se transformaron, a base de un leve resplandor, en armaduras milenarias. Incluso el color de ojos de la chica, se tornó rojo sangre.

—Nosotros tampoco — dijo Scarlett.

Logan apuntó el Ankh hacia ellos, arrojando un potente rayo de luz verde. El chico reaccionó más deprisa y abrió un portal circular, por el cual el rayo entró y salió a las espaldas de Logan, consiguiendo un impacto directo quemándole los dorsales. Este emanó un grito de dolor y se arrodilló.

—¿Cómo obtuviste la reliquia? — preguntó el hechicero.

Logan echó a reír desde el suelo, confiado.

—Así que es verdad... ustedes existen. Dioses entre nosotros.

—No somos dioses — dijo Scarlett.

—Cierto ¿" Ancestrales"? ¿Así es como les llaman a los dioses?

Cuatro siluetas se hicieron presentes detrás de Logan, emergiendo de la nada. Se trataba de tres hombres y una mujer. Taciturnos y bien vestidos.

Los hechiceros adoptaron una pose defensiva, no eran tan fáciles de intimidar. El cuarteto parecía ser un grupo de humanos común y corriente... hasta que estos engulleron a la pareja en una especie de agujero de gusano. No eran humanos.

—Lo siento, tengo una cita — dijo Crawford —. Acábenlos. Arranquen las armaduras de sus cadáveres.

Los cuatro sujetos entraron a su propio agujero de gusano, trasladándose a una especie de lugar místico, no había nada más que agua acariciando sus tobillos y un cielo purpura. Tenebroso, a decir verdad.

—¿Estas bien, Apex? — preguntó Scarlett, ayudando a levantar a su amigo.

—Agujeros dimensionales — murmuró el chico — ¿Hechiceros? ¿Hay más hechiceros?

La Profecía de ARKADIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora