t r e i n t a y d o s

2.1K 187 51
                                    


''No puedo encontrar la luz. Miro a través de la oscuridad, veo días mejores. Sé lo que viene pero no sé cuándo.'' 

 —

  —  

Enero 23, Daegu.



Cuando un hijo provoca lágrimas en sus padres hay un punto de quiebre entre nuestras propias decisiones  y lo que ellos creen correcto para nuestra felicidad. 

Nunca me considere buen hijo, fuí una carga pesada para mi padre y madre. Fuí el que más dolores de cabeza les dio y aún así su amor nunca cambio. Sí, nos distanciamos, no hablamos por algunos años pero al final mi hogar siempre fueron ellos y  mi hermano mayor. 

Luche por años contra mis propios miedos e inseguridades... contra mi ansiedad y contra mis demonios internos. 

Me esforcé en salir por los chicos y después por ella, cuando la conocí, la deteste, no sabía siquiera el por qué pero la quería lejos de mi. No era el tipo de chica que visualizaba a mi lado, quizá era porque nunca me había puesto a pensar en qué tipo de chica realmente me gustaba. En las entrevistas sólo respondía lo primero que por mi mente pasaba, hasta que la conocí a ella. 

—YoonGi piensalo bien... —miré a mi madre con el corazón desbocado. 

—Mamá te amo, pero es lo que deseo hacer. 

—¿No puedes siquiera pensarlo bien? Yoon esto no puede ser así.

Tenía la esperanza de que mi hyung me ayudase, pero me había equivocado y no tenía más remedio que ir en contra marea. 

—No nos pidas que aceptemos el cómo quieres que sean las cosas YoonGi —mi padre, que se encontraba sentado en la sala de estar junto a mi madre me miraba como si fuera lo primero y lo último que sus ojos quisieran ver cada noche al irse a dormir y al despertar por la mañana. 

—Esa es mi última palabra padre, y por última vez, madre, hyung la boda será a principios de primavera cuando los árboles de cerezo comiencen a brotar. 

Y con la suerte de que MinJi llegase. 

Si ella no empeoraba en los meses fríos de invierno, tenía esperanza de que las cosas que tenía planeadas funcionaran para ella. Ella era lo único que quería ver todos los días de mi vida. 




[ . . . ]


—¿Cómo van las cosas por allá Min? 

—¿Te miento con delicadeza o te hablo con vulgaridad?

Escuché una leve risilla por parte de NamJoon a través de la bocina del celular y ya sabía lo que respondería. Incluso en momentos así nos permitimos burlarnos de la vida y sus leyes. 

—Sé tú mismo, dime.

—Va como la putísima mierda.

—¿Tu madre cómo tomo la noticia? —NamJoon evadió astutamente el tema por el cual realmente quise visitar a mis padres. 

—Mal, no le alegro, supongo que tu madre se sentiría de la misma forma que la mía si le dijeses tus verdaderas razones. 

承Her | m. ygDonde viven las historias. Descúbrelo ahora