La hija de Goku| Son Gia [Editando]

Despedida

No solo se había conformado con comerse a todas las personas, sino que también Babidi le ordenó a Majin Boo que destruyera toda la ciudad. Con tan solo un soplido de aire, lo logró.

-Se los diré nuevamente, busco a este, a este y a este- declaró el enano de piel horrenda mientras aparecían la imagen del señor Piccoro, Trunks y Goten -Quiero que me digan donde están estos tres granujas que estoy buscando, claro que si no me lo dicen serán comidos por el temible Majin Boo- amenazó.

La criatura de color rosa parecía estar jugando a sus espaldas, era en realidad tierno, pero poderoso, no creí que fuera malo, sino, al contrario, pensé que solamente estaba obedeciendo a Babidi por alguna razón que desconocía.

El señor Piccoro apretó los puños, furioso.

-Hay algo más, olvidé decir que, si no me lo dicen en los próximos cinco días, todos los humanos desaparecerán de la Tierra- Babidi comenzó a reírse con esa voz tan chillante que tenía.

¡¿Cinco días?!

También señaló que para cualquiera que quisiera pasarle información respecto a mis amigos debería comunicarse con él mediante telepatía. En ese instante, un sujeto de los organizadores del torneo de artes marciales se comunicó con él dándole solamente los nombres. Desafortunadamente, fue información incompleta e hizo que a aquel hombre le explotara la cabeza.

No me permití dejar ver que en realidad me había afectado esa semejante escena. Era una guerrera que tenía la misión de proteger la Tierra, debía ser fuerte ante esta atrocidad.

Babidi invitó a todos a que no se escondieran y que esperaran el día de su muerte si es que nadie le ofrecía información sobre los muchachos.

-¡Maldito demonio! ¡Voy a matarlo!- el señor Piccoro enfureció.

-No creí que fueran tan crueles- habló Dende, nuestro Kamisama.

-A Mr. Popo le empezó a doler la cabeza- señaló el hombre de color y ropas árabes.

-Con que esos malvados fueron los que asesinaron a Gohan y Vegeta, ¿no es así?- cuestionó Bulma temblando de enojo con el ceño fruncido.

-Sí, no pensamos que pudiéramos tener esa clase de amenazas- declaró Krilin mientras una gota de sudor rodaba en su frente.

-Esos demonios tienen razón, con solo cinco días destruirán por completo la Tierra- anunció Kamisama.

-No dejaré que se sacrifiquen más vidas inocentes- gruño el namekiano mayor -Pelearé con él.

-¡No puedes decir esa tontería, Piccoro!- regañó mi padre -Si tu mueres, ¿quién le enseñara a esos niños la técnica de la fusión hasta que logren perfeccionarla?

¡¿Técnica de la fusión?!

Me gire a él pasmada.

-Si no logran hacer la fusión, no podrán derrotar a Majin Boo, de cualquier forma, ellos tienen pensado destruir la Tierra, estoy seguro. Se sacrificarán mil almas que servirán como alimento para Majin Boo hasta que los niños dominen la fusión y tú fuiste quien dijo que deberíamos soportar ese dolor. Con las esferas del dragón reviviremos a los que fueron asesinados y los lugares que fueron destruidos, por eso no te preocupes- dijo papá, apreté la mandíbula.

-Es cierto, Goku tiene razón- apoyó Dende.

-Es ahora en donde debemos ser pacientes- se apresuró a decir Krilin.

-Está bien- aceptó el señor Piccoro.

Al parecer, Goten y Trunks estaban dormidos en alguna de las habitaciones del templo. Me acerqué a papá.