La hija de Goku| Son Gia [Editando]

La Tierra desaparece

-¡No puede ser! ¡Sabía que algo malo sucedería!

Yo no era oponente para Majin Boo o al menos no ahora. Era una total vergüenza.

¿De qué serviría ser una sabelotodo si no podía defender mi planeta de las amenazas?

Mientras miraba al rosado admirar la pequeña bolita de chocolate en su mano, probablemente pensando en como lo comería, el dulce saltó de su lugar y se elevó a la altura de la cabeza de la criatura.

Todos nos sorprendimos, no podía creer lo que mis ojos veían. Era el caramelo macizo más poderoso del universo, eso era seguro. Y así, el chocolate comenzó a golpear a Boo una y otra vez, su fuerza era igual, pero esta vez la criatura rosada no podía darle ningún golpe. Incluso, el propio chocolate atravesó la cabeza de ese ser cortando su antena, la cual cayó. Él se regeneró al tiempo que volvió a la normalidad a Vegetto.

La batalla continuó tanto con golpes como con ráfagas de energía. Después de un tiempo, el saiyajin contó hasta diez, cada vez era más seguro que la fusión de mi padre y Vegeta vencería hasta que ese miserable iba a hacer lo mismo que hizo con mi hermano mayor.

Una masa rosada se colaba lentamente a espaldas de Vegetto en las alturas, iba a gritar, iba a avisarle, pero un pensamiento se cruzó en mi cabeza.

¡Ese es el plan de papá! ¡Quiere que Majin Boo lo absorba!

Y ahora que lo pensaba mejor, eso debía ser. Él mismo le cortó la antena y vio como se regeneró mientras esa cosa caía y ahora con sus poderes era ilógico que no se diera cuenta de la presencia a sus espaldas, pero debe tener alguna idea para protegerse o de lo contario, sus poderes pasarían a ser de ese monstruo.

La masa saltó envolviéndose en el cuerpo de mi padre y él no opuso resistencia. Ahora aseguraba que ese era el plan de papá, pero ¿para qué?

Majin Boo absorbió a Vegetto.

Su risa no cesaba, en realidad se veía muy feliz. Incluso comenzó a dar vueltas por toda la Tierra destrozando todo lo que podía o al menos eso me imagina ya que había salido de mi campo de visión.

-Goku y Vegeta han...-Dende dijo en voz baja.

Mr. Satán lo tomó del cuello al instante.

-Dime Dende, ¿ahora qué demonios pasará con la Tierra? -lo zangoloteó.

-¡Oiga, deje a Kamisama en paz!- le grité al hombre de afro y este lo soltó.

-No hay guerreros que puedan pelear contra Majin Boo para detenerlo- aseguró el namekiano, cerré los ojos de golpe e hice puños con mis manos -Solo nos queda esperar tranquilamente el momento de nuestra muerte.

-¡Eso no puede ser! ¡Se supone que ustedes son los amigos de Goku! ¿No pueden hacer algo usando algunos de esos trucos?

-No somos magos, Mr. Satán- dije con la vista puesta en mis zapatos -Si mi papá, ni el señor Vegeta, ni mi hermano pudieron contra ese monstruo entonces mucho menos yo podré contra él.

-Y yo tampoco pertenezco a esa clase guerrera, no seremos capaces de detenerlo- añadió Dende con la mirada avergonzada.

Volví mi vista hacia la derecha, fruncí el ceño al sentir el ki de Boo acercarse. El pequeño can comenzó a ladrar llamando la atención de ambos.

-Majin Boo viene- declaré.

Rápidamente, nos ocultamos en unos arbustos.

...

Seguíamos a Majin Boo, vimos como transformó una roca en una especie de WC, Mr. Satán estaba dispuesto a atacarlo mientras estaba en el baño. Afortunadamente, logramos detenerlo además de oler el desagradable olor de un gas de Boo, fue realmente asqueroso.