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12| Diferencia de poderes

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12| Diferencia de poderes.

Pude sentir el cómo la presencia de Vegeta se elevó de golpe y, por esa razón, me detuve en seco en medio del cielo.

«¿Qué está haciendo Vegeta?»

Era demasiado obvia la respuesta. Claramente, él había llegado hasta los Androides. Por otra parte, gracias a mi desconcierto y a mi detención, todos los demás no tardaron en alcanzarme y por esa razón, me sentí un tanto torpe.

Observé las facciones preocupadas de Trunks que, a pesar de tremendo golpe que había recibido, se veía bien, después de todo, la vida de su padre corría peligro. Traté de concentrarme en otra cosa, pensé en mi hermano que por ahora era menor.

Busqué a Gohan con la mirada, giré mi vista hacia los lados e inclusive a mi retaguardia, pero no estaba. Tanto tiempo y hasta ahora caía en cuenta de su ausencia.

«¿Qué clase de hermana era?»

¿Dónde está, Gohan? —pregunté al hombre de piel verde.

—Gohan se fue a dejar a Bulma con Goku —contestó, con esa mirada tan seria que lo caracterizaba.

«¡Claro!»

Tampoco me había inquietado el bienestar de Bulma y su nave rota. Estaba siendo demasiado egoísta, solo me estaba preocupando por nosotros dos en lugar de los demás. ¿Qué estaba pasando conmigo?

—Oh no, si los androides llegan a ellos— dejé la oración incompleta, miré hacia abajo, con preocupación.

—Eso ya lo sabemos —giré mi rostro en dirección a la voz. Krilin desprendía seriedad—. Esperamos que Vegeta los entretenga.

Dirigí mi vista al peli-lila quien no paraba de sudar, estaba preocupado por su padre, de eso no había duda. Volví a mirar al frente, con un solo deseo en mente.

«Gohan, hermano, cuídate mucho.»

[. . .]

Logramos llegar en el momento preciso en el que Vegeta fue golpeado por la rubia llevándolo a atravesar la parte de una montaña, perdiéndose en ella. El eco de las suelas logró escucharse a nuestro aterrizaje sobre una autopista. Escaneé el lugar al instante, ahí estaban esos tres Androides.

–¿Se encuentra bien, señor Vegeta? —cuestionó Trunks, preocupado en dirección al enorme hueco en aquella pared de piedra.

El hombre con el cabello en forma de flama salió del agujero, transformado en super saiyajin. Miré en dirección a la rubia, con odio.

—¡Señor Vegeta!

Escuché la exclamación de alivio en mi compañero.

-Pero que sujetos tan fastidiosos son todos ustedes —formuló aquel saiyajin orgulloso, quejándose—, ¿acaso creen que pueden ser útiles en esta pelea? —cuestionó, con altanería.

La hija de Goku| Son Gia [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora