treinta y seis

1.5K 159 150
                                    

Why

Mi cuerpo se sentía pesado, mis ojos no podían mantenerse abiertos ni dos segundos y mi garganta estaba seca, habían pasado tres días desde el encuentro con Hye Soo y desde ese día no he salido de mi cuarto, he recibido llamadas y mensajes pero todos han quedado en el olvido porque decidí apagar mi móvil para poder llorar tranquilamente, no tenía hambre, mucho menos frío, tampoco calor, solamente sentía un dolor en mi pecho que no me permitía respirar con normalidad. No podía dormir, cada vez que cerraba los ojos veía a Hye Soo hablando de todas las cosas que hacía que Jae me hiciera y eran efectivamente todas las cosas que hacíamos, desde campo de flores hasta los dulces que comprábamos, nuestra discusión la casa de la playa, absolutamente todo había sido planeado menos ciertos detalles que sólo se agregaban a la situación por casualidad.

—Cielo.

Escuché la puerta abrirse y me hice la dormida justo en el momento en que mi madre entró.

—Sé que estás despierta cariño.—dio varios pasos hasta mí y seguí con mis ojos cerrados.—Habla con mamá bebé, no sigas así.

La escuché llorar y mis ojos se abrieron de golpe, la vi taparse el rostro y tomé su manga para sentarla en la orilla de la cama.

Carraspeé y sentí como el picor de haber durado 3 días sin tomar agua estaba haciendo efectos:—M-mamá, estoy bien.

—No mientas más Iseul.—secó sus lágrimas.—Llevas 1 mes comiendo poco y 3 días sin comer ni tomar nada, no sales de tu habitación y tienes los ojos y nariz roja de tanto llorar. ¿Dices ye estás bien?

Las lágrimas empezaron a salir nuevamente de mis ojos, podía ver la preocupación de mi madre en los ojos, la desesperación por arreglar eso que había roto en mí, pero ya eso estaba casi hecho polvo.

—Ven y cuéntame.—me obligó a sentarme en la orilla y tomó una de mis manos para así sobarla.—¿Qué sucedió ese día cielo? ¿Por qué llegaste llorando?
Miré el piso pensando de qué manera me diría que la novia del chico al que amo me había hecho un infierno.

—Todo fue una farsa mamá.—seguí mirando el piso mientras movía mis piernas de un lugar a otro.—E-ella me lo dijo.

Mi voz sonaba débil y rota y aunque no quería llorar mientras le daba explicaciones sabía que no iba a resistir.

—¿Quién?

—Hye Soo mamá.—hablé bajito.—La novia de Jaebum.

No quise mirarla a la cara porque le había mentido miles de veces y justo ahora le estaba confesando que su hija había estado enrollándose a un tío con novia, que se había estado enrollando en su cama por 8 meses con un chico ajeno.

—¿Novia, Jung Iseul?

—Sí mamá, su novia.—su mano soltó la mía y entendía que estaba decepcionada.—Yo te mentí diciéndote que no tenía novia, pero lo hice para que me dieras el permiso de estar con él mamá, siempre te dije que ella solo era su otra amiga pero no, son novios y se van a casar dentro de dos meses.

Sus ojos se abrieron como platos y la escuché tartamudear varias veces.

—¿Casar?

Why? │jaebumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora