Why? │jaebum

cuarenta y siete

Why?

—¿Qué dices?

Mi mente seguía en blanco, no podía responder nada coherente porque en mi mente no había nada que fuera coherente para expresar, nada.

Miré en varias ocasiones hacia el cielo en busca de una respuesta, pero no recibía nada, hablé con Dios mentalmente y tampoco recibía respuesta, estaba nulo.

Una parte de mí, la razonable y entendida, no quería y me decía lo mucho que me había hecho sufrir, pero la otra, la de mi juventud y niñez, la de mi amor, quería que lo hiciera, que debía lanzarme porque no sabía en qué estaba Taehyung o si me era infiel.
Esa parte de mí que quería disfrutar y arriesgarse, quería diversión por unos minutos aunque fuesen cortos y mínimos, quería estar con él por un último momento y aunque fuese una mujer ya de decisiones, seguía estando en blanco con lo que iba a ser mejor para mí.

Pero iba a responder lo que más conveniente me encontrara, iba a pensar en mí y en mi diversión por sobretodo.

Respiré profundo y lo miré, en sus ojos había una ansiedad expresada a lo público, quería respuesta pronto y la tendría.

Le gustaría.

—Ya pensé...—sonreí coqueta, en sus expresiones pude ver la desesperación.—Yo... no lo haré.

Me miró confundido.

—¿Por qué no?

Reí irónicamente.

—¿Crees que soy la misma chica tonta de hace años? ¿La que se dejaba llevar por lo que decías? ¿La que estaba ciega de amor por alguien que nunca la amó?

Sostuve su rostro entre mis manos, quería decirle todo en la cara.

—¿No que me amabas?

—Y te amo, pero no soy estúpida Jae-bum...—terminé la oración porque ya no éramos mejores amigos.—No soy la misma joven loca que se dejaba manipular por tus gustos y antojos, estoy casada con un excelente hombre que me ama por cómo soy y por la historia de amor y apoyo que llevamos juntos, me ama porque para él soy una prioridad no una del montón como era para ti.

—No eras una del...

—¿Ser la segunda opción de una persona te hace pensar que eres en quien esa persona piensa todos los días?

—Yo pienso en ti a cada momento.

—¡Tonterías!—la rabia subía por mi cuerpo de manera brusca.—Si alguna vez fui una prioridad para ti y pensabas en mí así como decías, no debiste dejarme ir, ni perderme. ¿Me equivoco?

No respondió.

—Lo sé, no me equivoqué...—lo miré y me acerqué a él.—...Nunca me buscaste, solo una vez, hace ya unos años atrás.

—Me dijiste que estabas con alguien más.

—Joder, si yo por ti moví montañas, cielos y mares solo por verte a ti y saber de ti. ¿No podías hacer lo mismo?— extendí ambos brazos.— Nunca me importó que tuvieras chica porque yo te quería a ti , ¿no podías hacer eso?