My Bad Guy (Ziam)

Capítulo 16

-Liam, yo, pues…

-¿Qué pasa?

Preguntó con cierta preocupación el castaño. Jamás sería normal que Zayn tartamudee para decir algo, así que, ya podía considerarlo malo.

-Nada. No es nada. Te decía que tengo dinero, así que podemos ir a comer fuera después de clases.

-Claro. Sería estupendo.

Ese nerviosismo que tenía el Malik no era normal. Sentía como sus manos le temblaban y comenzaban a sudar. Además de sus reacciones algo rápidas o algo más lentas de lo normal, dependiendo.

Ya que iban a salir a comer después de clases, prefirieron no ir a la cafetería. Además, tras unos minutos de plática ya el timbre había sonado, así que, como costumbre. Liam acompañó a Zayn a su clase, se despidieron y quedaron de verse a la hora de salida.

Cuando el Malik entró a su salón, se sentó tranquilamente. Cogió una silla del lado de la ventana y estuvo mirando a través de ella. Aburrido. Intentaba borrar todo recuerdo de las palabras de Lucía, o evitar imaginar que tan grandes eran los rumores para ese momento.

Una vez la clase empezó, no presto ni la más mínima atención. Muy por el contrario, se recostó sobre sus brazos, estaba a punto de dormirse. Cuando un grito de fuera le llamó la atención. Escuchó claramente un “Payne, es su turno” y como reflejo se estiro, buscando de donde venía la voz.

Tal fue su sorpresa al ver que justo a Liam le tocaba clase de gimnasia, en el patio que le daba una vista perfecta desde aquella ventana. Genial, pensó con sarcasmo. Eso lo confundiría aún más.

¿Y qué si Liam fuera gay? No le importaba en lo más mínimo. Él seguiría siendo su amigo y todo, es más, estaba buscando que alguien soltara algún comentario inoportuno para romperle la cara a golpes. No se meterían con Liam jamás, no mientras él pudiera evitarlo.

Pero la única duda que le quedaba, era porque no encaro a su amigo y le pregunto si lo era o no. Así se hubiera ahorrado la confusión entre creerlo o no creerlo. Pero cuando le preguntó si se encontraba bien, un miedo a la respuesta lo azoto, dejándolo sin palabras y únicamente permitiendo que le mintiera, mentira piadosa, sí, pero mentira al fin y al cabo.

Cuando Liam corrió en la carrera de postas, como era de esperarse, su equipo ganó. Todo gracias a la gran rapidez del castaño. Cajita de sorpresas, rió Zayn. Liam era un raro nerd, gracioso, deportista y muy simpático. ¿Habría algo que no tuviera?

Pero sin embargo, para Zayn, Liam era frágil, por todo lo que sabía de su pasado. Aunque el ojimiel intentara sonreír todo el tiempo. Era por la misma razón que ya había llorado demasiado. “Las personas más calladas son quienes tienen mucho más que decir.” Eso pensaba.

Por eso, una pequeña parte de él. Aunque esa parte se hacía más grande diariamente, deseaba protegerlo de cualquier cosa, la que fuera.

*

-Eres bueno en deportes también. De verdad, ¿Hay algo que no hagas?

Ambos se encontraban en un café cerca al instituto. Ya tenían lo que habían pedido, sin embargo, hablaban de cualquier tontería, sin importarles mucho la idea de comer.

-Lo tomaré como un halago, así que, gracias Zayn.

Sonrieron mutuamente. La verdad no tenía ninguna idea de porque no le había dicho ya a Liam sobre ese raro rumor. Tras mucho pensar, solo se le ocurrió que tenía miedo de escuchar la respuesta, algo totalmente ridículo, pero era la única razón posible por la cual no le decía la verdad.

-Oye Liam. Tengo una pregunta.

-Dime.

-Bueno, es algo relativo, ya sabes.

-¿Vas por las ramas, Zayn? No es tu estilo. ¿Es serio?

Rió nervioso. Debía de hablar normal.

-No, no. Solo una pregunta, ya sabes.

-Bien, dila.

-Tú… ¿Qué opinas de los homosexuales?