Tu destino es amarme (Spideypool)

25. La boda

Al siguiente día de la propuesta de Wade, los vengadores fueron requeridos de nuevo al apartamento de Tony donde otra gran sorpresa fue anunciada. Bruce estaba embarazado y sus alfas se veían tan perdidamente enamorados que la felicidad era contagiosa. A pesar de que la misión principal contra Hydra había terminado, nadie quería abandonar la torre todavía, por lo que se quedaron un tiempo más para compartir la dicha que representaba un nuevo integrante en la familia y la tan esperada boda.

En la convivencia día a día, Strange presentó a su nuevo novio, el agente Ross, un pequeño omega que encajó rápidamente en el equipo. Por otra parte, Thor en ningún momento había regresado, aun así, Wanda mantenía contacto con él, por lo que sabían de buena mano que el alfa seguía arreglando pendientes en los nueve mundos y que pronto regresaría para visitarlos.

Desde el día en que Wade había pedido la mano de Pete, faltaban tres meses para que su próximo celo llegara, así que Tony aceleró los planes de la boda para que no tuviera que pasar otro celo sin la marca de su destinado. Los días pasaron tan rápido que cuando menos esperó, Peter ya estaba tomando una ducha en una de las cabañas del lugar que Tony había comprado para la ceremonia. Su padre omega había decidido comprar unas cabañas a las afueras de la ciudad, el lugar contaba con un gran y hermoso jardín donde se llevaría a cabo la ceremonia.

Salió de la ducha con una toalla amarrada a la cintura y se detuvo en seco mirando la cama, no podía creer que de verdad Wade hubiera comprado semejante cosa.

Sobre la cama había un vestido de novia blanco muy amplio, con un liguero, un velo gigante y un sobre rojo encima de él, se acercó para tomarlo y leer la nota del interior.

"Este es el traje que deseaba usar en la ceremonia, pero pensándolo mejor, quiero vértelo puesto, pero no en la boda, sino en nuestra noche donde te marcaré, guárdalo en un lugar seguro. Te veo en unas horas"

Peter negó riéndose, Wade no tenía remedio.

*****

Una hora después, tocaron a su puerta, eran sus padres vestidos en trajes elegantes similares al suyo, la única diferencia era el color pues su traje era rojo con solapas y accesorios negros.

— ¿Estás listo? Mi pequeño bebé —Susurró Steve acercándose hasta darle un beso en la frente y abrazarlo.

—Papá —se quejó abrazándolo por la cintura—, no soy un bebé.

—Lo eres para mí —susurró el alfa con voz quebrada—, siempre lo serás.

— ¿Te estás arrepintiendo de permitir la boda?

—No —respondió aferrándolo más fuerte—, pero siempre te imaginé siendo nuestro pequeño y es un poco difícil dejarte marchar.

—No se mantendrá lejos —aseguró Tony acariciando la espalda de ambos—, de eso me aseguraré personalmente.

Pete bufó en desacuerdo; sin embargo, estaba sonriendo. Los amaba y jamás sería capaz de mantenerse lejos de ellos por mucho tiempo, no era como si Wade fuera a secuestrarlo y alejarlo de su familia. Su futuro esposo sabía lo mucho que le afectaría salir por completo del nido en el que había crecido tomando en cuenta lo mucho que los amaba a todos, no permitiría que volviera a sufrir.

*****

Una hora después, Peter y sus padres se dirigieron al lugar donde Wade y los demás vengadores los estaban esperando. Su prometido estaba vestido igual que él, era la primera vez que lo veía tan elegante y sin su máscara; se veía mucho más apuesto de lo que nunca imaginó.

No supo en qué momento llegó a su lado, solo no podía dejar de mirarlo y esperaba con ansias el momento de firmar, para poder llamarlo "esposo".

Más pronto de lo que pensó, la pluma le fue extendida, no había puesto atención a lo dicho por el juez, solo despegó la mirada un breve momento para firmar el acta de matrimonio. Vio a su destinado hacer lo mismo y por fin fueron libres de besarse. Los aplausos y vitoreo de la familia y amigos los hacían sonreír a ambos. Peter recordaría ese suceso como uno de los más importantes de su vida, uno en el que por fin era libre de amar a su destinado y de obtener la marca que su cuerpo tanto necesitaba.

*****

La fiesta transcurrió como si de una celebración después de ganar una guerra se tratara. Thor había llegado de último momento luciendo triunfante y feliz como nunca, por un rato la plática se había enfocado en él. Explicó lo sucedido con Loki y de la existencia de su pequeña bebé super poderosa. Después de la sorpresa general, todos lo felicitaron por el gran hallazgo, por lo visto una nueva generación de mini vengadores estaba surgiendo, por lo que animaron a los demás alfas a procrear su propia descendencia. Algunos vengadores comenzaron a brindar compitiendo para ver quien tenía más resistencia al alcohol, los primeros en rendirse quedándose dormidos en sus asientos fueron Ojo de Halcón y T'Challa; Thor se burlaba de ellos mientras Bucky y Nat les pintaban las caras y se tomaban fotografías. Por otro lado, Bruce se mantenía atento a la plática con el Doctor Strange acerca de cosas astronómicas que tenían al científico fascinado. Además, se notaba la ausencia de las parejitas que ya se habían desaparecido, incluidos los padres de Peter.

—Tus padres no están casados, ¿cierto? —Preguntó Wade en un susurro mientras intentaban seguirle la plática a Doctor Strange.

—No —respondió simplemente su arañita que al parecer sí estaba entendiendo lo que el mago explicaba.

— ¿Por qué? ¿No se supone que están tan enamorados?

Pete volteó a verlo con una gran sonrisa.

—Mi papá siempre quiso una boda mediática, mientras que mi padre prefería una discreta y pequeña ceremonia solo con su familia. No lo sé, supongo que nunca llegaron a un acuerdo.

Explicado de esa forma sonaba lógico. Su, ahora esposo, continuó poniendo atención a la aburrida charla, parecía que por un momento se había olvidado del objetivo de ese peculiar evento. Wade, sintiendo que su control se desvanecería en cualquier momento comenzó a marcar territorio, afortunadamente el único alfa que estaba cerca era ese doctor que siempre se mostraba tan ecuánime. Lo consideraba el único de esa manada que no respondía ante el reto de un alfa. Suponía que su cerebro funcionaba mejor que el mismo instinto.

Pete comenzó a sudar de inmediato y volteó a verlo con algo de sorpresa.

— ¿Ahora? —Preguntó jadeante su omega inclinándose recargándose en él.

— ¿Prefieres esperar unos días más? —Respondió en tono grueso sintiendo que su sangre comenzó a hervir cuando su lado dominante comenzó a superarlo.

Se sentía tan saturado de la frustración acumulada el último año por no marcar lo que le pertenecía que ya no se sentía en control de sí mismo, creía que en cualquier momento la lujuria lo cegaría y lo tomaría allí mismo frente a todos. No ayudaba en nada que el aroma dulce de su omega comenzara a esparcirse sin control, su lado alfa se apropió más de él al notar la ansiedad de su omega por ser reclamado.

Escuchó a varios alfas gruñir ante la posesividad que expulsaba. Sin llegar a decir más, lo tomó en brazos y salió del lugar a prisa buscando cualquier rincón oscuro para desnudarlo y hacerlo suyo. Ambos expulsaban sus fuertes aromas, solo necesitaba morder y poseer esa inocente criatura que jadeaba y se estremecía en sus brazos, ya no podían aguantar ni un segundo más.

Y como si se tratara de una maldita broma de mal gusto, de algún lugar salió el Capitán América con Iron Man para retenerlos a la fuerza, inyectándoles algún líquido que los dejó sin fuerza. Su omega le fue arrebatado de las manos y Wade lo único que quería era gritar, pero la oscuridad lo cegó, reprimiendo todos sus salvajes instintos.

—Lo siento, pero no voy a permitir que marques a mi hijo como un salvaje, primero tendrán que controlarse —fue lo último que escuchó en voz de Iron Man.

*****
Y antes de que enloquezcan como Wade 😂😂😂 Tony les tiene una sorpresa preparada, así que la mordida ya está más cerca de lo que creen, o sea, en el siguiente capítulo ❤️