Peter se recostó en su cama mirando el gran ventanal sin los escudos metálicos que habían oscurecido su habitación por un par de días. Tony, como era de esperarse, había encontrado una forma para que su encierro no se sintiera como tal. Los cristales habían sido reforzados con un campo magnético que impedía ser rotos con armas comunes y a la vez le permitía ver la oscuridad de la noche, las luces de la gran ciudad y la lluvia creando caminos en el vidrio.
Suspiró removiéndose en la cama. No encontraba una posición cómoda, casi podía sentir la llegada feroz de su celo pues ya no faltaba mucho y no estaba muy seguro de poder aguantarlo sin tener a su destinado. Esa incomodidad previa a los calores nunca la había sentido y eso solo era señal de que estaba a punto de pasar una semana dolorosa y desesperante.
Intentó concentrarse en la lluvia torrencial para no darle mayor importancia a su molestia. Se sentó en la cama de improviso cuando vislumbró que algo aparecía en uno de los bordes del ventanal. Era Deadpool quien trepaba con dificultad hasta quedar completamente visible, de nuevo parecía una lagartija aferrada al vidrio.
—Creo que esta vez tu esfuerzo será en vano —se burló poniéndose de pie para acariciar el ventanal, allí donde se apoyaba la máscara empapada del mercenario—, no hay forma de que estos cristales se rompan, es una tecnología...
—Algo indestructible que construyó tu papá, lo sé —comentó Deadpool desde el otro lado—, no vengo a intentar tocarte, solo quiero que escuches.
—Bien —respondió cruzándose de brazos y esperando a que continuara.
Deadpool se quitó la máscara, tenía los ojos rojos e hinchados como si hubiera estado llorando. Sacó un celular cubierto por una bolsita plástica y puso una canción melodramática de desamor, una de esas donde pide a la pareja corresponder su amor, si no, moriría.
—Te extraño, baby boy —habló Deadpool con exagerada seriedad—, necesito tenerte a mi lado, escucharte, abrazarte, poder amarte...
—Sí, claro —se mofó alejándose un poco del vidrio—, solo para seguir intentando quitarme el "cinturón de castidad". No me digas que no se te antoja todo esto.
En ese momento llevaba su pijama, levantó su camiseta revelando un poco de piel de su delgado torso. Los ojos de Deadpool se oscurecieron recorriéndolo completo y poco después sacudió la cabeza.
—No importa que me provoques —respondió el mercenario con una seriedad auténtica, se podía ver que intentaba concentrarse de verdad—. En serio quiero estar contigo, por favor, dame la oportunidad de demostrarte mis cualidades, soy bueno para ti. Desde ese primer momento en el que te pude tener cerca entendí que te amo y solo deseo cuidarte.
Peter suspiró enternecido por semejante confesión, más viniendo de un sujeto del que se creía no tenía sentimientos y solo se dejaba conducir por sus instintos alfas.
—Yo no puedo decirte que te amo —respondió acercándose de nuevo al vidrio.
En parte era cierto, no podía entregar un sentimiento tan fuerte a alguien que no conocía, pero el lazo lo contradecía; los sentimientos brotando en ambos eran tan intensos que resultaba bastante obvio que algo estaba creciendo entre ellos.
—Permíteme mostrarte que puedes llegar a amarme —pidió Wade—, puedo comportarme estando a tu lado. Claro, no puedo ignorar tu sexy figura envuelta en ese pijama de tortugas ninja y lo mucho que deseo arrancártelo para hacerte mío —Pete entornó los ojos. Al contrario de lo que se pudiera pensar, no le molestaba esa actitud del alfa; no importaban sus propias quejas, adoraba que fuera tan pasional y descarado—, pero puedo ser alguien normal a tu lado, por favor acéptame una cita.
— ¿Romántica? —Sugirió para poner incómodo al mercenario.
A pesar del acto tan cursi de hace pocas horas frente a su familia, sabía que no haría nada romántico solo para él. Tener público era algo que su destinado disfrutaba y quería comprobar que fuera capaz de hacer lo mismo estando solos.
—Si es lo que deseas lo haré para ti.
Peter se rio entre dientes, era su oportunidad para darle una cucharada de su propia medicina, lo haría avergonzarse.
—Está bien —aceptó—, te doy solo un día para preparar algo que me deslumbre y debe ser algo excesivamente romántico.
Los ojos de Wade brillaron al igual que su gran sonrisa.
—Pasaré por ti mañana en la noche. Lleva tu mejor traje, mi amor.
Sonrió ampliamente cuando lo vio guardar su celular y una cebolla partida por la mitad cayera de su traje. Ahora entendía porque se veía como si hubiera llorando. Deadpool se despidió besando el ventanal y se dejó caer de la torre, estuvo a punto de intentar romper el cristal para salvarlo cuando un paracaídas se abrió, permitiendo el descenso seguro de su destinado. Exhaló aliviado dejándose caer en el piso y a la vez leyendo lo que el paracaídas decía.
"Te amo, arañita"
Peter se echó a reír y a la vez se arrepintió de lo que le había pedido a Wade, si así de sentimental era para pedirle una cita, no quería pensar en lo que le esperaba en unas cuantas horas. Se tapó la cara angustiado, esperaba ser capaz de esconder esa cita de su familia, no quería más burlas de su equipo como había pasado desde que regresaron de la misión.
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Me gusta imaginar a Wade siendo cursi y descarado con Peter que lucha internamente con ser lo suficientemente maduro para estar a la altura de su familia. Esas son las personalidades de ambos en este fic, espero que lo estén disfrutando ❤️Nos vemos el martes para el capitulo de la cita 🙊❤️
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Tu destino es amarme (Spideypool)
FanfictionPeter Rogers es un omega y súper héroe de Nueva York que vive con su gran y amorosa familia. Un suceso que desata la guerra entre los vengadores y Hydra, lo obliga a tomarse un año sabático donde tiene que ayudar a combatir el gran problema que sup...