Cuando me fui de intercambio a Washington, me sentí extraña, no conocía a nadie, obviamente.
Con forme los días me hice amiga de dos chicas geniales y de tres chicos, los más guapos del instituto (o eso dicen), entre esos tres chicos esta Alex, es...
Empezamos a acomodar, todo teníamos un disfraz único, diferente a los de siempre.
Jason de militar, Alex de dios griego, Chris de Steve de Stranger Things, Char de Nancy de Stranger Things, Scar de Lilo y yo de Cher Horowitz de Clueless.
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Decoramos la casa del tío de Chris con telarañas, momias, lápidas, vampiros y de diferentes monstruos.
La casa quedó tenebrosa, nos tomamos una foto en grupo y empezaron a llegar todos, poco a poco se lleno la casa de personas de la escuela.
Fui a la barra para agarrar dos shots de vodka, para empezar bien.
-Oye Jason... - dije en cuanto vi a Jason.
-Mande?? - dijo y se acercó a mi.
-Solo recuerda que es tu cumpleaños, disfrútalo y se que vas a beber, pero no te excedas. - dije.
-Esta bien, pero no prometo nada. - dijo Jason y empezamos a reírnos.
Fui con Char a platicar un poco.
-Hola!! - le dije.
-Ane!! - dijo Char.
-Cuantos tragos llevas?? - le pregunte.
-Creo que cinco. - dijo Char riéndose.
-Ya te perdí. - le dije riéndome con ella.
-Ane, me llevó a mi Char, nos vemos. - dijo Chris.
-BYE!! - grite.
Vi que no paraban de llegar más y más gente y vi a una compañera de ingles, Samanta.
-Sam!! Viniste. - le dije y la abrace.
-Pero claro!! - dijo y me respondió el abrazo.
-Me quedé sola, Char se fue con su novio y Scar se me perdió. - le dije a Sam.
-Bueno ya llegue, solo busco a mi novio y vengo contigo. - dijo.
-Si yo buscaré a Scar o a Jason. - dije.
Fui por toda la casa buscándolos, pero nada, hasta que vi a Jason, bueno el me vio.
-Ane!! - grito Jason. - Haz visto a Scar??
-No yo igual la estoy buscando. - le dije.
-Bueno, voy a ir con el equipo. - dijo y se fue.
***
Dieron las 3.30 am y yo seguía buscando a Scar, pero nada, iba a subir, pero recordé que arriba era privado, pero aun asi subí.
Abrí las puertas y por suerte no vi nada extraño, llegué a la última puerta y ya la iba a abrir pero escuché ruidos, no eran ruidos comunes, eran gemidos, yo me empecé a reír pero no estruendoso.
