Capitulo 59

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  Sólo había una cosa que Justin podría decir para aplacar a sus hermanos, y era que estaban comprometidos, pero no iba a hacerlo. Metiendo el traje de harén en un cajón, se pasó un cepillo por el pelo y salió descalza al pasillo.

Rhino sonaba furioso.

- ¿O sea que me estás diciendo tan tranquilo que te aprovechaste de la inocencia de nuestra hermana?

En absoluto, pensó _____ preguntándose qué habría dicho Justin.

- Eso es exactamente lo que estoy diciendo -dijo Justin con tono más bajo y controlado-. Y si no lo hubiera hecho yo, lo habría hecho cualquier bastardo de Nueva York. No podía ser virgen para siempre, maldita sea. La convencí de que debía prepararse antes de salir para la gran ciudad.

- ¡Que la convenciste? -gritó Hammer-. ¡La sedujiste, querrás decir! Esa pobre chica no tenía una sola oportunidad.

_____ entró apresurada en la habitación.

- Sí que tenía una oportunidad. Yo...

- _____ -Justin se dio la vuelta hacia ella-. No puedes asumir la responsabilidad de esto. Yo me aproveché de tu falta de experiencia. Tan simple como eso.

- ¡Desde luego que no! -comprendió que estaba intentando protegerla, pero no podía dejar que lo hiciera. Si quería una oportunidad de salvar la relación con sus hermanos, la verdad tenía que salir a la luz-. No sé lo que os ha contado, pero todo este proyecto de verano fue idea mía. Decidí en junio que quería perder la virginidad antes de irme a Nueva York.

Rhino y Hammer la miraron anonadados.

- ¿Pro... proyecto de verano?

Justin lanzó un bufido.

- No la escuchéis. Ya conocéis a _____. Siempre se inventa las historias más increíbles para protegerme. Lo está haciendo de nuevo.

- ¡No lo estoy haciendo! Yo hice mi plan y le pedí a Justin que me buscara a alguien para llevarlo a cabo y se ofreció él mismo.

- ¡Ya me lo imagino! -Rhino avanzó hacia Justin-. ¿Y cómo se le ocurrió esa idea para empezar? A _____ nunca le han preocupado cosas como ésa, así que, ¿quién le metió esa idea en la cabeza, Casanova?

- ¡Llevo pensando en cosas como ésa desde que tenía catorce años, Rhino! ¡Y no fue idea de Justin, fue mía!

- Puede que te haya hecho creer que la idea fue tuya -dijo Hammer uniéndose a su hermano con los puños apretados-. Siempre hemos sabido lo mujeriego que es. Simplemente no pensábamos que iría a nuestras espaldas a seducir a nuestra hermana pequeña, ¿verdad, Rhino?

- Exacto. Supongo que tendremos que salir fuera y arreglar esto, Justin.

- iDe ninguna manera! -dijo _____ apoyando cada una de sus manos en el voluminoso pecho de sus hermanos.

- Puedo cuidar de mí mismo, _____ -dijo Justin encogiéndose de hombros-. No tienes que protegerme de tus hermanos.

- De todas formas, ella no puede detenernos -dijo Rhino, empujando a _____ con suavidad.

- ¡Claro que puedo! -_____ se metió entre los hombres de nuevo-. Si le tocáis un solo pelo de la cabeza, le contaré a mamá y papá la vez que cruzasteis la frontera, os emborrachasteis de tequila y pasasteis la noche en una comisaría de México.

- No me importa -dijo Hammer-. No es para tanto.

- ¿Y la vez que encontré marihuana en tu habitación, Hammer? -preguntó ella con dulzura.

- ¿Tenías hierba en tu habitación? -intervino Justin asombrado-. Nunca me lo contaste. Dios a tu padre le habría dado un infarto.

Hammer se sonrojó.

- Sólo di unas caladas y me mareó.

- Eso es lo que le contaré a nuestros padres -dijo _____-. Estoy segura de que lo entenderán. Aunque podrían preguntarse qué pasó con el resto de los cigarrillos de marihuana, ya que encontré seis.

Hammer se sonrojó aún más.


CONTINUARA...

Mi Dulce Tentación - (Justin Biber y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora