Epílogo.

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Habíamos pasado un verano muy tranquilo en Qatar preparando nuestra mudanza. Por supuesto, me negué rotundamente a dejar mi casita con piscina en Doha y es que ningún lugar se me antojaba más perfecto para volver en vacaciones que el hogar que me había dado tantísimas alegrías.

El día antes de nuestra partida, celebramos una pequeña fiesta para despedirnos de nuestros amigos y familiares. Por desgracia, Ibrahim no pudo asistir por un viaje urgente relacionado con las aerolíneas que le surgió en el último momento. No obstante, Mohammed y su mujer, Gigi, mis suegros y algunos compañeros de universidad de Faisal y míos acudieron al evento.

-Me alegra verte feliz,Zoe. Te voy a echar de menos en Doha aunque hace mucho que no me paso por España. Quizás pueda haceros una visita.

-Te recibiremos con los brazos abiertos, Mohammed. A pesar de no tener nada con nosotros, te consideramos uno más de la familia. ¿Qué haríamos las Seacrest sin tí?.

-Muchas y buenas cosas, Zoe. Ya sabéis que tan sólo tenéis que confiar en ello.

-Al igual que usted, ¿verdad?. Nos sentimos muy dichosos al saber que se había casado.

-Muchos se sorprendieron pero a nuestra edad no teníamos ganas de grandes celebraciones.

-¿Quién mejor que vosotros para celebrarlo?.

-De eso se trataba.

Me sonrió y juntos fuímos a asediar la mesa de pastelitos que, por supuesto, estaba repleta justo antes de aparecer nosotros.

-¿Cómo sois capaces de mantener la línea con todo lo que coméis?.

-Tenemos una genética envidiable, Gigi.

-Eso y las horas que se pasa nadando en la piscina-intervino Faisal-.

-Lo hago por gusto no por mantener mi talla. Te puedo asegurar que si no me gustase nadar, lo más probable es que no lo hiciese.

-Tendré que emularte y nadar también.

-¿Desde cuándo tienes problemas de peso, Gigi?. Te veo igual que siempre.

-Nada más lejos. ¿Os importaría que hablase un momento con vosotros a solas?.

Me pareció ver a Gigi preocupada mientras caminábamos hacia la cocina a buscar un poco de intimidad. Desde que me había quedado embarazada, la había venido observando extraña, enamorada diría yo pero ahora su rostro y sus ojos habían cambiado.

-¿De qué se trata, Gigi?. Tengo una ligera intuición de que algo no está yendo nada bien.

-Y no te equivocas, Zoe. Os tengo en una gran estima por eso quiero ser yo quien os de esta noticia en persona. Estoy embarazada.

-¡¿Embarazada?!-exclamamos Faisal y yo al unísono-. ¿Pero de quién?.

-Eso es lo menos importante, Faisal. El padre ha decidido no hacerse cargo del bebé.

-¿Estás bien, Gigi?.

Fue la pregunta clave. Se lanzó a brazos de Faisal llorando y yo me quedé allí evaluando la situación. ¿Qué iba a ser de Gigi sóla en Doha?. ¿Qué iban a decir sus padres de ello sabiendo lo retrógrados que eran?.Si ya había costado un mundo convencer a los de mi marido de nuestro matrimonio, no me imaginaba lo que sería hablar con los de Gigi sobre un embarazo no deseado y más siendo soltera.

-Gigi, quizás sería mejor consultar las cosas con mi marido pero dado lo complicado de la situación, ¿por qué no desapareces un tiempo de Doha?. Podrías venir con nosotros o hablar con mi hermana para empezar a trabajar en Italia.

-Te agradezco tu preocupación, Zoe pero me temo que debo quedarme aquí.

-¿Y eso por qué?¿ Sabes como reaccionarán tus padres?. ¡Se volverán locos!.

-No si me caso que es lo que tengo previsto hacer en menos de quince días.

¿¿What?? ¿Gigi casándose y sin amor?.

Faisal y yo nos miramos asustados y preocupados porque el destino del que tanto había huído Gigi, había vuelto para encontrarla. ¿Casarse sin amor?. No había cosa más triste en el mundo y eso era algo que yo no le deseaba a mi amiga.

-¿Estás segura?.

-Muy segura. Es lo mejor para mí y para el bebé. Nadie pondrá en tela de juicio mi dignidad ni lo tildará a él de no deseado.

-Tan sólo espero que sea un buen hombre.

-Y lo es, Zoe. No hay problema con eso.

-¿ Lo conocemos?.

-Sí, me conocéis.

Me giré para ver quien hablaba pero cuando ví de quien se trataba dí un traspiés teniendo mi marido que sujetarme para no caerme de culo.

-¿¿¡¡Tú!!??.

¿Pero qué cosas raras estaban pasando?.¿Acaso los Seacrest contagiábamos a los demás con nuestros locos romances?.

                  *****FIN*****

Desierto De Amor (Zoe Seacrest) (COMPLETO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora