9:00a.m.
Park JinYoung permanecía aún en su cama, tratando de olvidar que día era hoy. Si tan solo pudiera desvanecerse por un día o eliminar esta fecha del calendario.
-JinYoung-ssi, ¿se encuentra bien? -llamó YuGyeom desde fuera de la habitación de su esposo. Usualmente a esta hora JinYoung ya estaba fuera de casa ubicado en el escritorio de su oficina. YuGyeom se sentía extrañamente preocupado por lo que sea que le pudiera estar pasando al hombre dentro de esa habitación.
-¡Largo de aquí mocoso! -vociferó enterrando la cabeza entre las almohadas. YuGyeom dio un suspiro derrotado y regresó a la cocina solo, no es que le importara la compañía de JinYoung, ese era su ser normal, siempre preocuparse por los demás, su corazón no conocía el odio.
JinYoung seguía intentando hipnotizarse así mismo e ignorar que día era hoy. Cuántos malos recuerdos le traían esta fecha. Y más aún cuántas risas y felicitaciones falsas. Estaba seguro que más de uno de sus empleados le deseaba la peor muerte pero la necesidad de conservar sus empleos les hacían falsear unas sinceras felicitaciones por esta fecha. Hoy era su cumpleaños número 29 y todo lo que quería era que el mundo lo hiciera a un lado y olvidara su existencia.
Finalmente se rindió al darse cuenta que no podía estar de por vida enterrándose en su cama y con toda pereza se vistió y salió de su habitación.-¡SORPRESA! -JinYoung casi pierde los papeles cuando una lluvia de confeti cayó sobre su rostro y logró reconocer a su abogado y mejor amigo, de pie detrás de la mesa del comedor, al lado de su joven esposo. Ambos con gorros de fiesta y un modesto cartel colgado en el techo con las letras "Feliz Cumpleaños" impresas.
Mark no paraba de tocar la pequeña corneta que llevaba en manos mientras que YuGyeom permanecía de pie tímidamente observando el piso. El joven recién casado lucía demasiado adorable, como para no dejar de mirarlo, los ojos de JinYoung captaron las mejillas ligeramente sonrojadas de su joven esposo, inmediatamente sacudió sus pensamientos.-¡¿Qué demonios es esto?! -reaccionó el dueño del cumpleaños haciendo temblar a su esposo quién se colocó detrás de Mark buscando protección.
-¡Es tu regalo de cumpleaños idiota! Deberías agradecer que me tomé la molestia de organizarlo todo a pesar de cómo te has estado comportando últimamente. -respondió Mark en defensa del inocente muchacho que se escudaba detrás suyo.
-Sabes que odio esta fecha -JinYoung pretendió seguir de largo pero fue detenido por su amigo.
-Es la primera vez que celebras tu cumpleaños con YuGyeom, al menos quédate un rato, compré un pastel y YuGyeom hizo sopa de algas.
-Sopa de... ¿qué?
-Sopa de algas idiota, todo el mundo la toma en su cumpleaños.
-Me largo de aquí.
-Vamos JinYoung al menos hoy no actúes como la bestia que eres siempre. -suplicó Mark.
Como ya era costumbre, JinYoung fulminó a su amigo con la mirada antes de sentarse en la mesa decorada con un hermoso y pequeño pastel. Mark sonrió complacido al ver a su amigo tomar asiento en la mesa. -Aquí... -el pequeño abogado colocó el plato de sopa frente a JinYoung quién lo miró con cuestionamiento.
-Todo el crédito es de Gyeommie, aunque no sabe preparar comida coreana lo hizo muy bien solo con la receta que le di. -Mark elogió al muchacho parado aún del otro extremo de la mesa.
JinYoung tomó la cuchara y bebió toda la sopa en cuestión de minutos. -Listo ahora me voy, tengo mucho trabajo por hacer.
Mark nada pudo hacer al ver a su amigo salir a la velocidad de la luz por la puerta principal del departamento.
ESTÁS LEYENDO
The Boy and The Beast || JinGyeom
FanfictionPark JinYoung es un tipo frío, ambicioso, sin escrúpulos, capaz de hacer cualquier cosa por obtener lo que quiere. Kim YuGyeom es un muchacho dulce, apacible, sensible y siempre pendiente de los demás. JinYoung es un hombre maduro de veintiocho años...