La modesta y exquisita mesa servida, el delicioso aroma de los variados platillos llenando el comedor, las servilletas delicadamente dobladas en forma de cisnes sobre los platos, dos copas de champagne y unas velas que estaban empezando ya a derretirse.
Todo preparado para una noche especial.
–Quieres dejar eso ya... ¡Llevas casi media hora dando vueltas! –se quejó Jackson desde un extremo de la mesa, observando a su novio paseando por su departamento con impaciencia.
–¡No debí dejarlos ir solos! ¿Y si JinYoung le hace algo a mi niño?... No me perdonaré si vuelve a lastimarlo... –se defendió Mark desviando la mirada de su novio.
Jackson giró los ojos en molestia, tomando su segunda copa de champagne. –YuGyeom ya está grandecito y no creo que JinYoung sea tan idiota... ¡Fuiste tú quien le dió ese manual! ¡Qué esperabas! –reclamó Jackson en voz alta. El comportamiento de su novio estaba rebasando sus límites de comprensión.
–¡Debiste dejar que los acompañáramos! –respondió Mark a la defensiva enfrentando a su novio con la mirada.
–¡Eres un caso perdido! –se puso de pie dirigiéndose a su habitación.
Mark observó a su novio desaparecer, con la boca abierta. Jackson estaba profundamente enfadado y el abogado sabía que todo era obra suya. Hace tan sólo unas horas acababan de regresar del aeropuerto después de despedir a sus dos amigos, que viajaban a unas paradisíacas vacaciones.
Desde que recibió la noticia de labios de JinYoung, Mark no pudo dejar de preocuparse por YuGyeom y esto llegó a los límites de su novio, que no veía nada de malo con que el presidente de Systematic Company, quisiera llevarse unos días fuera a su esposo. Sin embargo la preocupación de Mark era otra, ¿Y si JinYoung no podía controlarse una vez los dos solos? YuGyeom aún no estaba preparado para algo así, Mark lo sabía muy bien. Recordaba como YuGyeom lloró sobre su regazo la primera vez que JinYoung intentó tocarlo sin su permiso y los días que pasó el muchacho en su casa, teniendo incontrolables pesadillas por el segundo accidente ocurrido en el antiguo departamento de JinYoung.
Mark temía que si JinYoung volviera a intentar algo, YuGyeom podría reaccionar no muy bien. Después de todo, sus anteriores experiencias fueron del tipo traumático.
***
–¿No crees que la vista es hermosa? –preguntó JinYoung al muchacho que observaba asombrado, apoyado en el balcón, la hermosa vista de la Isla de noche.
Finalmente después de unas horas de viaje, JinYoung se encontraba a solas con su esposo, disfrutando de la quietud de la noche en la hermosa suite de uno de los hoteles más exclusivos de la Isla Jeju.
–Es preciosa... –susurró YuGyeom aún maravillado con la belleza nocturna de la Isla.
–Espera a que amanezca y entonces podrás apreciar mejor la Isla. –se acercó por detrás de su esposo, rodeando su cintura con ambos brazos.
YuGyeom dio una breve mirada interrogativa a los brazos de su esposo en su cintura, pero simplemente lo dejó ser, convencido que este era otro paso más para empezar a confiar en él.
–¿Quieres que ordene algo de comer? – preguntó apoyando su barbilla en el hombro de su esposo.
–N-no... no tengo hambre... quiero dormir... –respondió YuGyeom controlando sus nervios, la cercanía de su esposo de pronto se le hacía peligrosa.
–Yo tampoco tengo hambre, podemos quedarnos aquí un momento más. –JinYoung trajo más cerca el cuerpo de su esposo, contra su pecho, despertando aún más los nervios del muchacho.
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The Boy and The Beast || JinGyeom
FanfictionPark JinYoung es un tipo frío, ambicioso, sin escrúpulos, capaz de hacer cualquier cosa por obtener lo que quiere. Kim YuGyeom es un muchacho dulce, apacible, sensible y siempre pendiente de los demás. JinYoung es un hombre maduro de veintiocho años...