The Boy and The Beast || JinGyeom

20. Choi YoungJae

Domingo, día de descanso, relajamiento y disfrutar rodeado de la familia o de los seres que más estimas.

-¡YoungJae! -YuGyeom entró muy alegre a la cocina esperando encontrar al ama de llaves dentro, pero grande fue su sorpresa cuando lo que encontró fue a su esposo peleando con la estufa.

-Sal de aquí, tienes prohibido entrar aquí. -dijo JinYoung, decepcionado al ver como la brillante sonrisa de su esposo desapareció al instante que lo vio a él dentro de la cocina.

-¿Y YoungJae?... ¿Dónde está YoungJae? -YuGyeom se atrevió a preguntar en cierta manera triste por la ausencia del ama de llaves.

-YoungJae no podrá venir hoy, está enfermo así que yo haré el desayuno. -respondió JinYoung dándole la espalda a su esposo mientras trataba en despegar lo que sea que haya estado preparando en la sartén.

YuGyeom no podía evitar ocultar la decepción en su rostro al saber que el ama de llaves no vendría hoy a casa.

-¡Maldición! -pronunció JinYoung dejando caer la sartén caliente al piso. -No te acerques, sal de aquí. -advirtió JinYoung a su esposo, cuando notó que éste daba algunos pasos en su dirección tratando de recoger la sartén que había caído al suelo.

El timbre sonó y JinYoung sintió como si le hubieran quitado un enorme peso de encima. -¿Qué es eso? -dijo YuGyeom por reflejo aún sorprendido por la reacción de su esposo.

-Refuerzos. -murmuró JinYoung mientras salía de la cocina tomando al muchacho por la muñeca para sacarlo con él.

YuGyeom se liberó de JinYoung apenas vio a Mark y al Dr. Wang de pie en la puerta del departamento. -Vinimos al rescate Gyeommie, éste hombre quema hasta el agua. -pronunció Mark colocando unos panecillos en la mesa del comedor.

-¡Yah! Tú no eres mejor que yo, lo único que haces es pedir comida para llevar. -se defendió JinYoung.

-¡Aish! Ricos pero inútiles, hagan paso prepararé algo sencillo en un instante. -Jackson pasó entre los dos hombres que se desafiaban con la mirada.

***

Mientras tanto, en uno de los departamentos del décimo piso de uno de los edificios más lujosos de la ciudad, se encontraba un muchacho mirando al vacío, a través de una de las cristalinas ventanas de la sala, mientras su novio se desvivía en la cocina tratando de preparar algo decente y no muy chamuscado.

YoungJae pensaba en la discusión del día anterior y aún no hallaba solución para el enredo en el que estaba metido, ni menos aún sabía qué responder a la petición de su novio para ayudarlo a reunir pruebas en contra de JinYoung. Todo era tan complicado ahora, su vida tranquila y serena, su amorosa relación con su novio, todo se sentía de cabeza ahora.

En todo el tiempo que llevaba trabajando para JinYoung, YoungJae le había tomado cierto cariño a YuGyeom, como si fuera su hermanito menor, y el muchacho se había encariñado también con él y YoungJae lo sabía muy bien. Ahora todo era tan complicado, ¿cómo podría regresar a casa de JinYoung y seguir cuidando de YuGyeom? Sabiendo que éste es el ex novio de su novio y más aún que su novio está tratando, por todos los medios, de obtener su tutoría.

YoungJae no sabía si llamar celos a lo que estaba sintiendo dentro de él,¿Decepción?, sí, quizás esa sea la palabra más adecuada; JaeBum lo había decepcionado al enfrentarse de esa manera con JinYoung por su ex novio. En los dos años que llevaban juntos, YoungJae nunca había visto a su novio reaccionar con esa fiereza, nunca supo que la historia detrás de su vida en Boston fue tan complicada, en cierta parte entendía a su novio pero no comprendía el porqué de su actual comportamiento.