Effy Stonem

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-Elizabeth, llegas tarde. Otra vez. ¿Sabes lo que significa?- Dijo la recepcionista de administración.

Es una perra de 40 años frustrada porque no tiene sexo desde que nació y siempre me hace la vida imposible al no darme los pases para entrar a clases

-Es Effy, y no la verdad es que no se. ¿Le importaría iluminarme?- Dije en tono sarcástico.

Sabía lo que significaba, no iba a entrar al primer periodo de clases y para mi suerte hoy tenía examen en historia, no era que me importara mucho porque la verdad no había estudiado nada. pero es más difícil copiarse si me hacen el examen a mi sola

-Significa que no vas a entrar a clases si no hasta el segundo periodo. Disfruta de quedarte en la biblioteca Elizabeth- Me dijo la muy perra dándome indicaciones de que entrara a la biblioteca.

No quería entrar ahí, habían personas de otros años y siempre me miraban y me hacían sentir como un bicho raro

-¿No puedo ir antes a comprar un agua que tengo que tomar unas medicinas?- Le dije a la vieja sólo para que me dejara salir. No pensaba ir a la biblioteca

Se quitó los lentes y dedico tomó unos segundos para mirarme cuando al fin dijo: -Que sea rápido Elizabeth

Cuando al fin salí de su oficina baje las escaleras para ir a comprarme algo de comer porque la verdad tenía hambre. Pero como siempre baje nerviosa y esperando a que no hubiera nadie de otros años ahí, no es que me caigan mal si no que me intimidan un poco y los de último año son una mierda todos, bueno uno que otro se salva pero los demás son una mierda. Yo estoy contando los días para la fin graduarme e irme de aquí, sólo faltaban dos años. Así es estoy en penúltimo año y se siente como si me faltara una vida por salir, pero no todo es malo. Tengo a mis mejores amigas y hacen que el instituto sea más soportable.

Es un poco complicado pero somos 6 y nos decimos que somos mejores amigas y que nos contamos todo, pero en el fondo sabemos que es mentira, la verdad somos muy buenas amigas y sabemos que estaremos ahí para cuando alguna nos necesite pero siendo 6 se vuelve tedioso tener que contarle las cosas a las 6 y siempre hay una que no cuenta sus cosas, en fin, somos: Leonora, Cassie, Rebecca, Sabrina y Alexandria. Pero sólo de ellas le cuento las cosas a Leonora "lele" y a Cassie. Les dije que era un poco complicado.

Bueno cuando llego a comprar mi comida aparece Paolo en la ventanilla, es italiano y dueño de la panadería.

-¿Que puedo hacer por ti Effy?- Me dijo Paolo con su sonrisa de todos los días

-Sólo dame un agua, unos cigarrillos y unos chicles de fresa, por favor

-Enseguida mi niña, y espero que dejes ese hábito de fumar pronto- Siempre es bueno escuchar su acento italiano aunque lo ha perdido con el tiempo, Paolo era muy bueno conmigo se preocupaba por mi -Aquí tienes, serán 20 libras

-Vale aquí están- Le di el dinero y cuando me iba a despedir de el aparece Ryan McKennen, esta en último año y es como una especie de Adonis, o así lo ven todas las chicas del instituto, para mi era otro idiota de último año. Aunque no les mentiré, era muy sexy, con su cabello castaño y esos ojos penetrantes azules. Tenía una altura como de 1.80 y yo era de 1.64 era una miniatura comparada con el.

-Effy, ¿Que tal, como estas?

-Ehh bien supongo. ¿Como sabes mi nombre Ryan?- Pregunté esperando mi cambio de Paolo

-Así como tu sabes el mío, te he estado mirando

-No te he estado mirando. Sólo con pararte en cualquier esquina del instituto puedes escuchar como todas las chicas se babean por ti- Le dije alzando una ceja y dándole una seña a Paolo de que me iba

Salí de ahí pero aún no quería regresar al instituto así que me senté en las mesitas que están afuera de la panadería. Encendí un cigarrillo y tome un poco de agua. Esa era mi rutina de las mañanas y me hacia relajar, no comía nada porque bueno no estoy de ánimos

-Oye Effy no deberías fumar desde tan temprano, ¿Sabias que mata?- Me sorprendió Ryan mientras que agarró una silla y se sentó junto a mi en la mesa

-¿Cuando te volviste mi papa o mi amigo para reclamarme sobre lo que hago o no?- Le dije malhumorada

-Tranquila nena, no te enfades sólo estoy jugando contigo. ¿Me das uno?

-No puedo creerlo el gran Adonis del que todos hablan que es perfecto fuma?- Estaba un poco sorprendida, no mucho porque me daba igual. Le di uno y saco un encendedor

-¿Así que soy un Adonis?- Me dijo levantando una ceja y acercándose más a mi, luego rió -No es para tanto Effy, además si no te fumas hasta el filtro no te daña tanto, o eso dicen

-Vale, como digas- Le dije sin importancia -Ah y respecto a lo de antes, ¿Así que me haz estado mirando?

-Si, veo a todas las chicas del instituto

-¿Ves o te follas?

-Las veo para follarmelas- Me corrigió riéndose

-Bueno espero que estés mirando ya a otro lado porque no pienso jamás follar contigo, o si quiera ser tu amiga

-¿Por que no quieres ser mi amiga? Todos se mueren por ser mi amigo

-Por eso mismo no quiero serlo, eres un egocéntrico, y tu forma de tratar a las mujeres es de lo peor. Me molestas

-¿Te molesto?- Preguntó como si le doliera y luego se rió

-Si, eres un machista de mierda. Y de paso los de último año son una mierda también- Le dije sonriendo falsamente y tirando lo que quedaba del cigarrillo, ya tenía que volver al instituto, y cuando me iba parando Ryan me dijo:

-¿A dónde vas?

-Al instituto, el primer periodo ya terminar y tengo que entrar o llaman a mis padres de nuevo- Le dije, sacando los chicles

-Bueno te acompaño

-No es necesario

-Igual tengo que volver Effy

-Bueno vale, me da igual. ¿Quieres?- Le dije ofreciéndole chicle

-Así que no eres toda una chica mala, compartes también tus chicles

-No es para tanto Ryan

Caminamos en silencio hasta la puerta del instituto y subimos las escaleras. Este lugar si es una mierda, nadie se entera si saliste o no. Cuando llegamos al piso donde estaban los salones de último año, Ryan me miro como si le tuviera que decir adiós o algo así, pero seguí subiendo las escaleras porque los salones de último año eran el último piso. Ven este instituto de mierda no tiene ni sentido. Ya iba a llegar al último escalón cuando una mano me detuvo y me volteó.

Ryan.

-Lograre ser tu amigo, esa será mi meta de último año

-¿Por que tanto empeño en ser mi amigo?

-Eres diferente y estas tan buena que podría follarte aquí mismo

Es un cerdo.

-Suerte con eso Ryan

Y con eso entre a mi salón y empezó la clase.

Intentalo de nuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora