Dulce Tentación -Starco-

Capítulo 11

Star se encontraba en su habitación, se había ido sola a casa ya que según Marco acompañaría a Mauline hasta su casa a lo cuál Star respondió que no habría problema ya que Enrique se había ofrecido a acompañarla pero no era así.

—¿Está bien que le haga esto a Marco? bueno... ¿le darán celos? yo, no se si esto esté funcionando.

Pensó, pero Marco llegó interrumpiendo.

—Star ¿Se podría saber que es lo que hacías con Enrique todo este día? -Preguntó serio.

—Ahm... ¿Llevarme bien con el?

—No, no te puedes llevar bien con el Star, te hizo daño.

—Lo se lo entiendo  pero ¿para que vivir con rencores?, además no había hablado mucho con el, creo que es... interesante.

Dijo, provocando que Marco llegara hasta su contraria tomándole de las muñecas fuertemente y recostandola en su cama.

—¿Qué haces? -Preguntó la rubia con algo de temor, Marco le tomaba fuertemente de las muñecas y comenzaban a dolerle.

—Nada, solo... solo quiero... —Dijo con el entrecejo fruncido y respiración pesada, se encontraba molesto.

Con una mano tomó ambas manos de la rubia para evitar que ella pudiera moverlas y comenzó a besarla, lo hacia desesperadamente como si estuviera sediento y para curar su sed tenía que tomar de esos labios rojizos. Se posicionó sobre la rubia y mordió el labio de Star provocando que saliera sangre y un quejido de dolor de parte de ella.

—¿Por que hiciste eso? -Cuestionó. limpiando la sangre con su mano.

—tus labios son exquisitos mi amor, no pude evitarlo. -Dijo, para dar un beso en la herida y marcharse, sin ninguna expresión de felicidad, se encontraba serio, molesto.

Star se quedó ahí, sin saber que hacer, lo dolían las muñecas y su labio inferior. ¿Por que demonios hizo eso? ¿Sintió celos de Enrique? maldita sea ¿Qué?. Si era así no dudaría en seguir, solo por un labio con sangre no renunciaría a la idea de Enrique, en cierta forma le está ayudando.

Después de no tener contacto ninguno de los dos en toda la tarde, la madre de Marco les llamó para merendar y ahí, ahí es donde tuvieron que hablarse nuevamente.

—Gracias señora Diaz -Agradeció Star alegremente.

—De nada cari.... ¿Que te sucedió en el labio? -cuestionó preocupada.

—Oh, nada, nada. Simplemente no miré bien que había un pedazo de metal en la puerta de la escuela y me golpee, estoy bien no se preocupe —Mintió. y pareciera que Marco sabría que lo haría ya que se mostraba relajado.

—Esta bien, pero deberías tener más cuidado a la próxima. Marco, al terminar la merienda antes de dormir le pones algo en su labio para que se cure ¿Bien, hijo?

—Si madre, no hay problema -sonrió.

terminado la merienda, Marco toma la mano de Star y la lleva a su habitación.

—Bien, limpiemos la sangre ¿Esta bien? -dijo para que la rubia simplemente asintiera —Bonita, no quería herirte no se que quería hacer, lo siento.

—Con un lo siento mi labio no deja de sangrar Marco.

—Bueno ¿Qué quieres que haga por ti? lo que sea, solo quiero que me perdones -sonríe.

—Ahm... Dejame dormir contigo.

—¿QUÉ? No, nos regañarían...

—Podemos mentir Marco.

—No Star, no lo se...

—Vamos, por favor -Pidió haciendo pucheros.

—... -suspiró -Bueno, pero es tu culpa si nos dicen algo mis padres ¿bien?

—Si, si, si -Dijo sonriendo para después dar un casto beso en los labios de Marco.

Llegó la hora de dormir... juntos.

Era extraño hacer todo eso, no son pareja, pero... el "AMIGOS CON DERECHO" provocaba todo ello.