Dulce Tentación -Starco-

Capítulo 30

A la mañana siguiente, el castaño había despertado. Intentó estirarse pero fue en vano, su brazo izquierdo se encontraba inmóvil ya que Star estaba recostada en el. Cuidadosamente sacó su mano  y se puso de pie, se sentía tan ligero... Esta vez sí había podido dormir tranquilo, miró a al rubia por unos segundos. Le encantaba observarla mientras dormía.

—Me encanta todo de ti, mi bonita...

susurró mientras contemplaba a la rubia, ella hizo un pequeño quejido y se movió en su lugar, por un momento pensó que la había despertado pero río al ver que se había acomodado para seguir durmiendo. Riendo por lo bajo fue a lavarse los dientes, al terminar bajó a preparar el desayuno.

Acomodó dos platos en el comedor para sus padres y dos los llevó a su habitación. Entró y la encontró durmiendo aún, dejó los platos en la mesita de noche y le comenzó a despertar.

—Star... Mi amor, despierta -hablaba al mismo tiempo que la movía de su lugar.

—No... No quiero despertarme -murmuró, abriendo un ojo y mirando al castaño

sonrió burlón —Vamos... Siempre andas de perezosa y quieres estar duermieron hasta tarde.

—No, no me digas así -abre los ojos mientras hace pucheros.

—Entonces despiertate... Mira, te traje esto -sonríe mientras le entrega su desayuno.

—Ooooh que hermoso -habló emocionada con un brillo en sus ojos —Se ven deliciosos, gracias -sonrió mirando aquellos hotcakes en forma de corazón.

—No agradezcas cariño. Además, lo hice pensado en ti, en los hermosos corazones de tus mejillas.

—Eres tan lindo -sonrió sollozando

—¿E-estas llorando?

—No, no lo estoy -responde, pero una lágrima solitaria cae de su mejilla.

—Bueno... -le miró extraño ¿Esos cambios de humor son normales? — Ahm ¿Dormiste bien?

—Si, de maravilla -sonríe —¿Sabes que es lo gracioso?

—¿Qué? -responde con una sonrisa en el rostro.

—Estabamos tan aterrorizados ayer -rie —Y fue un poco extraño decir que... Estoy embarazada de mi mejor amigo...

—Corrección, novio -interrumpe sonriente mientras arqueaba una ceja.

—Aun no lo somos mi amor -le da un beso en la frente —Y aunque lo fuéramos, me estarías engañando con Mauline...

—C-cierto, lo olvidé. Hoy la terminaré, lo juro.

—Tranquilo -sonríe. —Se lo dirás, solo no te alteres.

—Y tú a Enrique ¿Cierto?

—Nop -responde burlona mientras introduce bocado a su boca.

—¿Q-qué? ¿Por qué no? -cuestionó con el entre cejo fruncido.

—Por qué no está aquí, salió de vacaciones con sus familiares lejanos.

—Bueno, lo harás cuando llegue.

—¿Y quién eres para decirme que hacer, chico castaño? -preguntó tratando de no reírse.

—Star... Por favor.

—Bueno, ya... No te enojes, mi amor -rie.

—Es que tú... Me haces enojar -dice haciendo pucheros.

—Ya, ya. ¿Quién es el novio más bipolar y celoso?... Sip, tú lo eres -bromeó mientras le tomaba de ambas mejillas.

—¿Celoso? Si claro...

—¿No me crees? ¿Recuerdas cuando hablaba con Enrique en los descansos y me reclamabas? ¿Recuerdas que mordiste mi labio por qué te molesto nuestro beso?

—Bueno... Pero solo un poco -rueda los ojos —Gracias por recordarme esos momentos.

—Lo siento, te amo mucho, mucho...Marco Díaz -sonríe y planta un casto beso en los labios del castaño haciéndole sonreír.

—Y yo a ti, Star Butterfly.

—¿Se puede, par de enamorados? —cuestionó Janna, recargada en el marco de la puerta.

—¿Qué escuchaste? -preguntó la rubia asustada.

—Dese que le decías las cosas por las cuales le daban celos... Y te faltó una -rie —Su rostro cuando tú y Enrique se besaron, debiste verlo, pareciera que por poco lo  golpeaba y a ti te daba un tremendo castigo, a Marco lo siento capaz de muchas cosas por sus celos posesivos -rie.

—Ash... Cállate Janna, bueno mi amor, te dejo con tu amiguita -rueda los ojos y después da un beso en la frente de la rubia -te amo —susurró y se dió media vuelta

—cilliti jinni... Bla, bla, bla.. ti imi stir -dice burlona, haciendo molestar al castaño.

—Demonios... Más odiosa no puede ser -murmuró mientras se marchaba. la rubia se encontraba riendo.

—ahora si... Cuéntame todo -rie.

—¿Qué deseas saber? -pregunta sonriendo.

—Todo -responde, sentándose al lado —Ahm... Espero que Marco no se moleste, pero últimamente he tenido muchos antojos -rie mientras toma los hotcakes y comienza a comerlos —Y prometo no estar embarazada, pero leí que alguien muy cercano a ti que esté embarazada algunas veces puedes sentirlas tú mismo, sentir los antojos y eso... Me pregunto, quién será -piensa mientras come, para después mirar a la rubia —¿Eres tú, traviesa?

—¿Q-QUÉ, N-NO...? -nueha mientras se sorprende y sus mejillas se tiñen de un color carmesí.

—Mmm... Entonces ¿Cómo explicas eso? -cuestionaron mirando el abdomen de la rubia.

—No he salido y he estado comiendo demasiado.

—Ajá... Y yo saco diez en mis exámenes... Star, no puedes mentirme... Además, ser tu amiga más cercana me ayuda, te conozco como a una hermana.

—No es cierto...

—El silencio de tu mirada lo dice todo... Tranquila, no lo diré a nadie.

—E-espera ¿C-cómo lo sabes? ¿Quién te lo dijo?

—Nadie, solo es cuestión de ver, además no creo ser la única mujer que sospechó ¿O sí?

—N-no...

—¿Lo ves? Es nuestro sexto sentido -sonríe —Aunque me parece gracioso pensar que tú y Marco tuvieron...

—Janna -rie apenada —Mejor no hablemos de eso.

—Bueno, Comienza a contarme todo, te escucho...