Capítulo 5

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NARRA MOLLY:

Esta vez si le conté la historia del pirata Baltasar de Samuele, también había revisado debajo de su cama y dentro de su armario. Me quedé junto a él hasta que se durmió, me fuí a mi habitación, traté de dormir pero no podía, se había convertido en algo imposible.

Agarré mi bloc de dibujo, un lápiz y salí por mi ventana hasta la suya, había dicho que no quería dormir pero no había dicho nada de no dibujarla, subí su ventana, esta vez intenté no hacer ruido, me acerqué, me senté en el suelo y comencé a dibujarla, estaba tan concentrada en ella, era realmente hermosa, media hora después terminé el dibujo, me quedó realmente bien, coloqué mi firma justo debajo y lo coloqué en un sitio donde miraría por la mañana, la ventana.

Coloqué el dibujo y salí de su habitación. Estuve toda la noche dibujando la luna, ya que no pude dormir, cuando terminé todavía eran las cuatro de la mañana, miré a su habitación, estaba dormida placidamente, suspiré, ¿qué me estaba pasando?

NARRA  ALISON:

Desperté con algo desorientada, ¿habían sido reales esos besos? Suspiré y me levanté de la cama, me vestí, ya que pasaría todo el día en casa. Bajé a desayunar, me encontré con mis padres, esto era demasiado extraño, ¿qué hacían todavía aquí?

Papá: Buenos días- sonríe.

Alison: ¿Qué haceis tan tarde en casa?- mire el reloj de la cocina, las 10 de la mañana.

Mamá: Queríamos desayunar junto a vosotros- sonríe y besa en la coronilla a Tristan, peinó su pelo rubio.

Alison: Ah, genial- sonreí y me senté- por cierto, feliz aniversario- me sonrieron.

Tristan: Ali, ¿me acompañas a devolver el coche a Samuele?- sonrió y asentí.

Alison: Iré a cambiarme cuando termine de desayunar- mostró su dedo pulgar haciendome sonreir.

Taylor: Quiero otra tostada.

Papá: deberías comer más despacio Taylor- la pequeña negó con la cabeza.

Desayunamos tranquilamente, más tarde mis padres se fueron a trabajar y comencé a vestirme para ir a casa de los Benedetti para dejar el coche de Samuele. Me puse una sudadera y unos pantalones cortos, sabría que me quitaría la sudadera en menos de diez minutos pero echo de menos las sudaderas en verano, además de que es lo único que me gusta del invierno. Me acerqué por mi
móvil que estaba en la mesa de mi escritorio y no pude evitar notar un papel en la ventana, lo cogí, era un dibujo, mio, también había una firma tenía una B, en ese momento no pensé en quien podría ser, me fijé en el dibujo, era increible, los detalles de mi rostro, la persona que lo había hecho debía ser muy observador.

Tristan: ¿Lista Aly?- dice sonriendo.

Alison: Sí- guardé el dibujo- vamos.

Salimos de casa cruzando el jardín, llegamos a la puerta y tocamos el timbre, no tardaron mucho en abrir, pude ver a Molly rascandose los ojos con una manta sobre sus hombros.

Molly: Buenos días- su tono de voz me puso los pelos de punta, era ronca, sonreí.

Alison: Buenos días- no aparté mis ojos de los suyos, ella tampoco a pesar de que estaba recien levantada.

Maldita ItalianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora