Capítulo 35

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NARRA MOLLY:

Estábamos de camino a casa andando, le había dejado el coche de Valen a Carina ya que se había sacado el carnet. Ni Alison ni yo habíamos cruzado ninguna palabra, estábamos en silencio, hasta que se atrevió a hablar:

Alison: Siento lo que ha pasado- paramos y la miro, estábamos en medio de la carretera.

Molly: No, no lo sientas, yo quería que esto pasara, supongo que tú también- niega.

Alison: No, esto ya se ha acabado Molly, se acabó hace tiempo- trago saliva- y siento haberte dado falsas esperanzas pero no voy a volver contigo solo te necesitaba, necesitaba calmarme- suspiré y asentí dolorida.

Sentí como si mi vida acababa de pararse, como ya nada tuviera sentido, ahora mismo podía hacer dos cosas, besarla de nuevo o dejarlo todo como está, llamadme imbécil pero pensaba dejarlo todo como estaba, había decidido que no volvería conmigo y yo lo respetaba, la amaba pero ante todo la respetaba.

Sin darme cuenta ya habíamos llegado, nos dedicamos una ultima mirada, la cual decía un gracias y un adiós, no entré en casa hasta que la vi a ella entrar, mi coche no estaba, lo que significaba que Carina tampoco, entré y subí con cuidado. Me cambié de ropa y me dormí.

A la mañana siguiente me desperté con mareo y algunos gritos, me dolía la cabeza, me senté en el borde de la cama y miré por la ventana, Ali no estaba en su habitación. Bajé las escaleras y vi como mi padre reñía a Carina, lo nunca visto, la niña de papá había roto las reglas.

Papá: No es propio de ti, además eso no está bien, ¿qué has hecho toda la noche fuera?- negué con la cabeza para que no lo dijera.

Molly: Me buscaba a mí, salí corriendo de la fiesta y ella solo quería buscarme- intento ayudarla.

Carina: Molly- le lanzo una mirada para que se callara.

Papá: ¿Eso es verdad Carina?- la mira y asiento rápidamente, ella solo asiente- ahora no me extraña, siempre dando problemas- frunce el ceño en mi dirección- ¿cuándo cambiarás?- me mira con decepción y anda hacia su habitación.

Carina: Gracias- suspira- no tenías porque hacerlo- la miro confusa.

Molly: ¿Y qué pierda la confianza que tiene en ti? Eres su favorita, ten más cuidado la próxima vez- sonríe.

Carina: No soy su favorita Molly, ellos te adoran, ¿sabes lo mucho que lloraron cuando te fuiste?- encojo mis hombros- todos te queremos mucho aquí, sobre todo yo- me abraza.

Molly: Ya se que no puedes vivir sin mí- se aleja y resopla.

Carina: Eres tan estúpida- me empuja y se va.

Molly: Pero no te vayas colador- me mira extrañada.

Carina: ¿Colador?- me río y hago un gesto obsceno representando la noche de Robbin y mi hermana- Eres una vulgar de mierda- sube las escaleras y yo suelto una carcajada.

[...]

(Cuatro días más tarde)

Había recibido una llamada de Lisa, quería que la acompañara a por un vestido para el baile, la cosa era... ¿POR QUÉ YO? estaba esperándola junto a el coche de Valentino mientras fumaba, hasta que salió, me miró con una sonrisa y yo se la devolví, le di un beso en la mejilla y entramos en el coche.

Molly: ¿Dónde te llevo?- miro el reloj eran las 7:00 pm.

Lisa: Llévame a esta dirección- me enseña el papel, estaba en el centro del pueblo, asiento y pongo el coche en marcha.

Maldita ItalianaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora