— Buenos días chicos — digo mirando a mis compañeros en recepción.
Estoy caminando en dirección al ascensor, acompañada de dos cafés y donas que ocupan mis manos.
Resulta que está mañana me resultó más difícil de lo normal levantarme, sin mencionar que el pequeño rayo de sol que es el causante de mi estrés en las mañanas, hoy no se hizo presente.
El día está nublado, pero aún así es un día hermoso.Tengo la grata idea de desayunar rápidamente en mi escritorio, a menos que el jefe me necesite. Algo que dudo, la agenda está al día. Pero sus pedidos no.
Los chicos corresponden a mí saludo con sonrisas y Federico hizo un gesto de manos, a lo cual sonreí.
Sigo con mis pasos hasta llegar al ascensor, dónde me encuentro con él, esperando que las puedas se cierren.
Sonrío, — Buenos días señor.
Sonríe, — Señorita Muffins....
Mira mis manos, — No creo tener el hambre suficiente. — señala dichos objetos.
Sonrío, — No, uno es mio. Me levanté tarde y no tuve tiempo de desayunar en mi casa. Así que pensé hacerlo en mi escritorio. — levanto mis hombros.
Une sus cejas, — No es mala idea, pero prefiero que lo hagas conmigo. Si te parece?.
Miro sus ojos, — Claro..
Varios segundos después el ascensor abre sus puertas en el último piso, el jefe es el primero en abandonar el cubículo.
Le dedica una leve sonrisa a Aída, — Buenos Dias. — y sin esperar respuesta sigue su camino a su oficina.
Lo miro de atrás, salgo del ascensor rápidamente antes que este cierre sus puertas. Doy pequeños pasos hasta el escritorio de mi compañera para dejar un beso amigable en su cachete.
Dejo mis cosas en su lugar para luego caminar a la oficina de Ethan. Suspiro al abrir las puertas, entró con nerviosismo y dejo el apetecible desayuno delante de sus ojos.
Él me mira sonriendo, — Me estás intimidando. — hablo sin pensar a la vez que me siento en una de las dos sillas frente a su escritorio.
Deja escapar una perfecta risa, — Sabes perfectamente que mi anterior relación fue una de las peores que e tenido en mi corta vida.
Levanto las cejas, — No sé que decirte..
Su semblante se torna serio, — Necesito saber que es lo que piensas sobre lo que estamos haciendo. Nunca me e acostado con una empleada, no sirvo para esas cosas. — lleva el café a su boca.
Bufo, — Sólo soy tu asistente. — levanto los hombros.
— No, una asistente normal no se acuesta con su jefe. — habla seriamente.
Lo miro confundida, — Felicidades tienes una asistente fuera de lo normal.
Suspira, — Sara. — dice en el momento que me levanto de mí asiento con intención de abandonar la oficina.
Se para y camina hacia mi, — Sólo quiero que respondas una cosa. Me quieres?. — toma mi mano con fuerza.
Mis ojos comienzan a brillar con intensidad, al igual que los suyos.
No esperaba esa clase de pregunta, ni tampoco sé que responder. Aunque la respuesta es la más obvia.Sonrío nerviosa a la vez que asiento tímidamente, — Si.
Pestañea lentamente y sonríe tomando la valentía suficiente para responderme con un beso tierno.
Lo sigo, correspondo ese beso como si fuera el más esperado de mí vida. Un beso significativo que demuestra lo mucho que una persona te quiere, aunque no lo diga en palabras. Aún así lo siente.
Me alejo lentamente, — Pienso que era una excusa para acercarte y besarme.
Sonríe tiernamente, — No necesito excusas para tomar lo que ya es mío señorita Brown.
Me sonrojo demostrando lo que provoca en mi cuerpo. Me acerco nuevamente para darle un pequeño beso de despedida cuando las puertas se abren y mi cuerpo se aleja rápidamente de él.
La persona menos esperada en estos momentos cruza ambas puertas con orgullo, — Los interrumpo? — habla derrochando arrogancia.
Niego, — No necesito explicarte absolutamente nada. Me puedes decir qué haces acá?.
Me alejo lo suficiente de ambos, quedando parada en la esquina del escritorio. Con una vista perfecta de la discusión que viene en camino.
Sonríe irónica mientras se acerca lentamente a él, — Está bien, no te lo discuto. Sólo quiero proponerte algo.
Asiente, — Que quieres?. — habla manteniendo la seriedad.
Analiza mi cuerpo con desprecio, — Te invito a cenar a mí departamento, quiero hablar cómodamente contigo. — me mira — a solas.
Niega, — Podemos hacerlo aquí perfectamente.
Niega rotundamente, — No, prefiero hacerlo como te dije. Te espero en mi departamento a las diez, esta noche así que no faltes. — Sonríe — No me falles Ethan.
Termina de mencionar sus últimas palabras con un semblante provocativo, le dedica una sonrisa amigable y abandona la oficina moviendo sus caderas.
Pongo mis ojos en blanco, Ethan suspira para luego concentrarse en mi nuevamente. — No tengo pensado ir.
Niego, — Tienes que ir. Sólo ve escuchala y te vas. No es difícil, quizás tenga algo importante que decirte.
Sonríe, — La conozco, no creo que quiera hablar.
Me acerco lentamente, posando mis manos en sus hombros y acercando mis labios a los suyos.
Sonrío sexy, — Tenemos que volver al trabajo. — sostiene mis brazos.
Asiento, — Solo quiero el último beso por hoy.
Sonríe, alejándome de él. — Prefiero guardarlo.
Lo miro confundida, — Seguro?.
Mira mis pechos, — Tienes que revisar el correo que te mandé, ve. — habla volviendo a su lugar.
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Mi jefe, yo y su ex |#Wattys2020
Romance¿El amor existe? ¿Alguna vez se enamoraron de alguien perdidamente?, Porque yo tuve la suerte de hacerlo y todavía de mi Jefe. 📛📛📛📛 Está totalmente prohibido el plagio de esta novela, así que por favor respeten el trabajo de los demás. Obra ori...