Le dedico una mirada nerviosa al hombre que esta justo a mi lado, ambos ubicados frente a la puerta de una enorme casa.
Will acaba de marcharse, es el culpable de que ambos estemos en este lugar.
El jefe me dedica una sonrisa tranquila y respondo con la misma acción, admirando los rasgos perfectos de su rostro y el sonido de la puerta interrumpe mi intento de besarlo. Está se abre dejando a la vista a un joven de aproximadamente unos 19 años.Me observa fijamente para luego mirar a mi acompañante, — Hermano llegaste. — eleva la voz emocionado.
Nos invita a entrar y así lo hacemos, el chico me mira — Y tú eres? — dice nervioso a la vez que toma mi mano, en la cual deja un incómodo beso.
Ethan lo mira seriamente, — Eres un imbécil. — habla enfadado.
Suspiro, — Sara Brown, y tú eres Evan?.
Asiente, — Eres muy hermosa. — habla sin vergüenza.
Sonrío irónica, — Ahora entiendo porque no tienes novia. — digo levantando una de mis cejas.
Me mira confundido, — Como lo sabes?.
— Tu mano es demasiado áspera. — digo sonriendo, a la vez que escucho la risa de Ethan.
Mira a su hermano con seriedad, — Están todos en la sala. — dice evitando el contacto visual conmigo.
Luego de varios saludos y gestos hermosos con cada una de las personas que compone la familia de mi jefe, me encuentro en un sofa individual. Manteniendo una agradable conversación con su hermana menor Julia.
Ella menciono muchas cosas, además de soñar con ser diseñadora de moda. Algo interesante, y en el área donde más me cuesta resaltar.
Sonríe, — Me alegra que finalmente te conozco. Sinceramente nunca había visto a las citas de Ethan dos veces.
Sonrío, — Supongo que es una buena señal estar aquí?. — hablo tomando un trago de mi bebida.
Asiente mostrando sus dientes, los cuáles tienen un detalle hermoso. Todos perfectamente en su lugar, con una pequeña separación de las paletas del frente. — Podría decirse que has conquistando a la bestia. — ríe emocionada.
Sonrío, — Entonces eres su asistente. — habla su madre entrando en la conversación.
Asiente nerviosa, — Sí — digo automáticamente.
Sonríe sentándose a mi lado, — Estás aquí por trabajo?.
Niego, — Un pequeño favor. — digo seriamente.
Sonríe admirando mis ojos, — Me alegra que por fin haya encontrado a una persona especial. Ahora dejara de desperdiciar su tiempo con chicas pasajeras.
— Lo entiendo, pero sinceramente no estamos en una relación. — digo mirando al hombre que se acerca a nosotras.
Asiente mirando mis ojos, — Eso quiere decir que no son pareja ni nada por el estilo? — habla Julia seriamente.
Niega, — Y si dejan de interrogarla?, Vamos a cenar chicas. — habla Raymond con una sonrisa.
Un hombre adulto con barba perfectamente cortada, cabello gris y una personalidad demasiado amable. Lo contrario a su hijo en el área de personalidades.
Ellas asienten, así que todas caminamos hacía el enorme comedor. — Sara donde quieras. — habla la madre señalando los asientos.
Veo que mi jefe esta sentado en la punta de la mesa, así que me acerco a él sentándome lo más cerca posible.
Esto se esta convirtiendo en algo incómodo para mi persona. — Ethan deberíamos mirar las gráficas económicas después de la cena. Creo que te gustará demasiado el impulso que nos doy el nuevo diseño. — dice el hombre de cabello gris.
Él hombre a mi lado asiente, a la vez que apoya ambos codos a los lados de su plato. — Sí, eh visto algunos detalles sobre eso. Me alegra obtener buenas ganancias de esa belleza, por cierto Julián mencionó sobre un interesado en comprar el diseño. — ríe al decir sus últimas palabras.
Niega, — Tendremos que charlar con ese chico, siempre dejamos claro que nunca vendemos nuestros diseños. Recuerda lo que decía el abuelo. — habla mirando su plato.
Sonríe, — Mi arte es mi fiel compañero, por eso le digo adiós a aquel que quiere adueñarse de mi imaginación. — hablan ambos a la par, mencionado orgullosamente dichas palabras.
Los mira seriamente, — Saben que esta prohibido hablar del trabajo en la mesa. — habla mirándolos.
Rió levemente, — Que es esto?. — le pregunto en voz baja a mi jefe, señalando una bandeja metálica ubicada frente a mi plato.
Esté me mira poniéndo atención a mis palabras. — Mariscos. — dice mirando mi reacción.
Sonrío evitando mirar la bandeja cuando siento nuevamente toda mi comida en la garganta, le dedicó una mirada rápida a Ethan y salgo de la mesa rápidamente.
Corro a la sala en busca de un baño, cuando finalmente lo encuentro.Entro en el y logro acomodarme frente al inodoro, donde literalmente me deshago de mi molestia. Siento las manos de alguien agarrar mi cabello, — No me gustan los mariscos. — digo girando mi cabeza para ver a Ethan.
Me mira seriamente, — Deberíamos ir al hospital.
Niego, limpiando mi boca con una servilleta. — No. Enserio estoy bien, deberías dejar de preocuparte por mí.
Niega sonriendo, — No me pidas lo imposible. — dice ayudándome a ponerme de pie.
Le muestro una sonrisa, me acerco a besarlo cuando me aleja con un gesto desagradable. — Acabás de vomitar. — dice asqueado.
Lo miro sorprendida por sus palabras, — Me encantaría ver como me vas a rogar por un simple beso. — hablo sarcástica a la vez que abandono el baño.
Camino en dirección a la mesa, encontrándome con la mirada de todos sobre mi persona. — Querida estás bien?. — cuestiona la madre con preocupación.
Asiento, — No me gusta el marisco, no suelo comerlo. — digo sentándome en mi antiguo lugar.
— Lo siento, no tenía idea. — mira a su empleada — Llévate la bandeja a la cocina. — indica amablemente.
La mujer asiente agarrando la bandeja. Me dedica una sonrisa, — Le traeré agua fría. — dice en un tono agradable.
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Mi jefe, yo y su ex |#Wattys2020
Romansa¿El amor existe? ¿Alguna vez se enamoraron de alguien perdidamente?, Porque yo tuve la suerte de hacerlo y todavía de mi Jefe. 📛📛📛📛 Está totalmente prohibido el plagio de esta novela, así que por favor respeten el trabajo de los demás. Obra ori...