¿El amor existe?
¿Alguna vez se enamoraron de alguien perdidamente?, Porque yo tuve la suerte de hacerlo y todavía de mi Jefe.
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Está totalmente prohibido el plagio de esta novela, así que por favor respeten el trabajo de los demás.
Obra ori...
Me encuentro en mi escritorio charlando con mis compañeras, las más sociables. Romina y Aída, ambas enfrente de mi escritorio sentadas.
Uno de los más importantes temas de la convención son las entrevistas realizadas el día de ayer, al parecer Mathias fue elegido para el puesto vacante en recepción. Nada sorprendente, fue el mejor currículum y gracias a mi buen trabajo es mi responsabilidad darle la agradable noticia.
Salgo de la conversación con un gesto, señalo el teléfono a mi izquierda el cual agarró luego de la palabra "Tranquila" que alcance a discernir de los labios de Aída.
Llamada:
—Hola soy Sara Brown asistente personal del Sr Ethan López, ¿hablo con Mathias?.
Ellas me observan por un segundo para luego proseguir con su charla.
— Con el mismo.
Sonrío,— Tengo el agradable placer de informarle que usted es solicitado para firmar contrato con la empresa para el puesto de trabajo de recepcionista.
Noto su voz emocionada.
—Gracias le agradezco!.
— Felicidades, lo esperamos el Lunes 07:30am.
Mathias — Muchas gracias señorita que tenga un buen día,— igualmente.
Fin de la llamada.
Finalizo la llamada observando a ambas mujeres, riendo. Les regalo una sonrisa ignorando su charla, dejo el teléfono en su lugar cuando escucho su irritable sonido.
Vuelvo a colocarlo en mi oreja, — Empresa López, habla con Sara Brown asistente del Sr López. En qué puedo ayudarle?
— Somos del programa Sobre Ruedas, nos gustaría hacerle una entrevista a su jefe. Queremos hablar con el.
— Muy bien, espere unos segundos.
Vuelvo a finalizar la llamada y caigo en cuenta, las chicas ya se fugaron. Ambas desaparecieron como el viento.
Aprovecho y agarró unos documentos para entregarle a mi jefe, me levanto de mi asiento con pereza y muevo mis pies al interior de la millonaria oficina.
— Le traigo estos documentos, — dejo la carpeta frente a sus ojos. — Hay una persona esperando en la línea. Un programa de televisión quiere realizarle una entrevista.
El sólo analiza mi presencia y observa mis ojos sin perderse un pestañeo, — Sara porque no solo pasaste la llamada?.
Sonrío, — Aproveche — señalo la gruesa carpeta.
La agarra, a la vez que se coloca los anteojos— Llamaste a Mathias?.
Asiento con la cabeza, — Si, le dije lo que usted pidió.
— Muy bien, te llamaré luego para renovar una cosa en la agenda.
Su atención en mi se esfumó cuando terminó de pronunciar la última palabra, sus ojos se concentran en los papeles llenos de números y ignora mi presencia.
¿Es tu manera de echarme de la oficina?
Lo observo durante un segundo más, mis ojos no se despegaban de el aunque quisiera.
¿Será?,
¿Me atrae mi Jefe?.
Esfumó los pensamientos de mi cabeza y decido abandonar la incómoda situación, la oficina. Al salir me dirijo a mi lugar de trabajo, Aída se encuentra atendiendo una llamada así que simplemente me quedo con mi vista fija en un bolígrafo.
La millonaria empresa para la que trabajo se dedica a la fabricación de diseños exclusivos de autos, algunas cadenas de diseños son vendidas a marcas famosas o simplemente son creados para la misma marca de la empresa, "Raymond".
Hay solo 3 encargados importante de los diseños, Ethan, su hermano y padre. Además de los diseñadores que los corrigen, etc.
El sonido del ascensor interrumpe mis pensamientos, las puertas se abren y de el sale la mismísima palabra.
Arrogancia en físico.
La rubia se para en medio de los dos escritorios, — Hola señoritas —dice moviendo el bolso en su mano.
No recibe ningún tipo de respuesta, ni de Aída ni de mi parte.
No eres mi jefa.
Noto lo que le afecta no recibir atención, ella se para frente a mi escritorio y con total molestia levanto mi vista para observar a tal ser espantoso.
Miro su rostro sin interés, — No me vas a contestar?— apoya su mano en mi escritorio.
Río —No — respondo volviendo a poner mi atención en lo que estaba.
¿Sos loca?, Yo más.
Ignora mi actitud y se dirige a la oficina, escucho la risa de Aída.
— Está celosa, sabías? — habla dejando su lápiz en el escritorio.
— Celosa de que?.
— Es una persona celosa, le molesta que Ethan tenga asistentes o mujeres cerca.
Sonrío orgullosa de lo que provocó en ella.
Celos.
Ethan
Finalizo la llamada con Eduardo, el mismo de la entrevista que Sara me paso. El mismo insiste demasiado en saber detalles sobre el nuevo diseño, algo que no puedo decir. Mi padre me lo prohíbe.
Dejo el bolígrafo con el cual me distraía aun lado y arreglo mi traje. Espero a un importante socio de la empresa, tenemos que conversar sobre lo ya mencionado. El nuevo diseño.
Miro mi reloj de mano y escucho que las puertas de la oficina se abren con brutalidad, miro a Lucía entrar a la oficina a la vez que arroja su bolso en mi escritorio.
—Que haces acá? — pregunto serio.
—No me extrañas?— muestra una sonrisa picara.
— No puedo atenderte, estoy esperando a alguien importante.
—Y yo que? — camina en mi dirección.
—Vos y yo no estamos juntos, ya hablamos de esto! — elevo el tono de mi vos alejando su cuerpo del mio.
— Es por ella verdad es por la nueva asistente que tenés?! — respondió gritando.
Gracias a la buena construcción y el grosor de las paredes las chicas del otro lado no escuchan las estupideces que habla está mujer.
— Que hablas, estoy trabajando!!, Vete no vuelvas más, no tenés porque volver — grito sin pensar.
Lucía salió llorando de la oficina, acción que no me afectó en nada. Deje de quererla hace mucho tiempo, los celos no son la razón aunque perfectamente lo podrían ser y mucho pero es por otra mujer.
Simplemente me cansé de dar todo sin recibir nada.
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