Un amor entre rosas y espinas [TERMINADA]

6.

Nuevo cap!!!!! n.n

Una mujer de unos treinta años apareció en la sala de espera en la que ambos habían estado sentados unos dos minutos esperando en completo silencio, luego de que Ezra le había pedido a Oliver que dejara de caminar detrás de él como si fuera su obligación, pero el omega no le hizo caso alguno. Incluso se había sentado detrás de Ezra.

–¡Ez! –exclamó y se acercó al nombrado, abrazándolo y luego lo miró –¡Creí que te había sucedido algo grabe! –miró entonces a Oliver y se acercó, hasta que sus piernas chocaron con la primera fila de sillas para verlo más de cerca –¿Qué sucedió contigo Oliver? –le preguntó y se sintió asombrado que supiera su nombre, por lo que miró al alfa por sobre el hombro de la mujer, que claramente era alfa.

–Le he dicho tu nombre por un texto. Me ha bombardeado a mensajes desde que se enteró que estábamos aquí –y era cierto, pues el celular de Ezra no había dejado de sonar desde que se habían sentado.

–Si fueras más inteligente hermano y me hubieras dicho bien qué sucedía no hubiera salido por patas de mi descanso, aunque teniendo en cuenta que lo has traído para que lo atendieran rápido supongo que ha sucedido algo grabe –terminó girándose y enfrentando a su hermano con los ojos entrecerrados. Ezra rodó los ojos.

–Solo un estúpido alfa pasó –le contestó con cierto retintín en su voz –Le ha hecho daño en uno de sus brazos y aunque no creo que tenga nada grabe lo traje para que lo revisaran.

Ella se giró entonces mirándolo nuevamente y asintió.

–De acuerdo, vengan conmigo –ordenó y ambos la acompañaron. Ezra esperó a que Oliver rodeara toda la fila y sin discutir, lo dejó pasar delante.

Llegaron entonces a un consultorio donde Oliver antes de ingresar vio claramente el nombre de la alfa "Freya Parrish". Ella rodeó el escritorio y se sentó, esperando que ambos hicieran lo mismo antes de continuar hablando, por lo que Ezra cerró, pues había ingresado el último y esperó a que Oliver se sentara.

–Bien, dime qué ha sucedido –comenzó Ferya, acomodando su cabellera castaña clara, larga y como una cascada, en una coleta alta algo desordenada.

Oliver la miró con cierto miedo y luego llevó su mirada a Ezra.

–No le estoy preguntando al idiota de mi hermano, te estoy preguntando a ti. Si quieres, él puede esperar fuera mientras hablamos los dos tranquilos.

Volvió a mirar a Ezra por el rabillo del ojo y luego llevó su mirada verde a los ambarinos de ella, asintiendo con la cabeza.

–Ya lo has escuchado Chucho, fuera –le dijo rudamente señalando con una de sus manos la puerta.

Ezra solo se limitó a rodar los ojos ante tal apodo que aun seguía utilizando y se levantó, sintiendo que su alfa no se encontraba para nada conforme con separarse de él y dejarlo con su alocada hermana, pero no tenía otra opción.

–Estaré fuera si me necesitan –fue lo único que dijo antes de dejarlos.

–Bien, ahora dime, ¿qué sucedió?

–Solo... –tragó grueso, inquieto y para nada tranquilo con la presencia de aquella alfa que parecía destilar poder por cada poro de su piel. Ni siquiera se atrevía a mirarla –Un alfa me tomó fuerte del brazo –terminó contestando y señalando con su otra mano el lugar herido –Y creo que me lastimó, pero no lo suficiente como para romperme a... algo –le miró de soslayo, escuchándola suspirar y viendo que claramente ella mantenía su mirada sobre él.

–De acuerdo, entonces primero que todo –se levantó y se colocó a su lado, lo cual le sorprendió –Deberás de subirte a la camilla y quitarte la playera. Vamos a revisar el estado de tu brazo ¿vale?

Oliver la miró, sintiendo de a poco la misma sensación que parecía transmitirle Ezra, pero en menor medida, por lo que dedujo que claramente la alfa estaba haciendo un esfuerzo por evitar que más feromonas se desprendieran de ella y lo afectaran.

Acató el pedido, y sin más y con su ayuda, logró sentarse, quitándose la playera con su ayuda, pues a pesar de que cuando había estado con Ezra el dolor había menguado sensiblemente, al encontrarse allí, el dolor poco a poco volvía a flote. Como si el alfa hubiese actuado ciertamente de sedante para su cuerpo y alma.

Freya revisó minuciosamente el lugar golpeado, incluso apretó con cierta forma para ver el rostro que él ponía, el cual fue de gran dolor, claramente.

–No creo que tengas nada roto –dictaminó –Pero por las dudas te enviaré a hacer una radiografía, hay que prevenir cualquier efecto que haya tenido el agarre –finalizó quitándose los guantes blancos de latex que se había colocado y los tiró en el cesto que se encontraba cerca –Deja que te ayude a colocarte nuevamente la playera –continuó amable y lo ayudó en la tarea, pues al tener uno de sus brazos doliendo aun más de lo que ya le había comenzado a doler gracias a la alfa, agradecía que esta lo ayudara.

Bajó de un pequeño salto de la camilla y siguió a Freya hasta volver a estar enfrentados, separados por el escritorio de la mayor, quien había comenzado a teclear en su ordenador.

–¿Sabes si tienes alguna entrada anterior en el hospital Oliver? –le preguntó sin quitar su mirada del ordenador, pero al no escuchar respuesta del menor, decidió llevar su mirada a este, viendo el terror que se había formado en los ojos del pequeño omega y cómo parecía destilar gran cantidad de feromonas de miedo.

Freya tragó grueso sin saber qué hacer.

–¿Oliver? –lo llamó, intentado que el menor enfocara su mirada en ella, lo cual hizo y pareció reaccionar –No tienes que decírmelo si no quieres, llenaré un nuevo formulario si quie...

–Tengo –le cortó con voz baja y escondiendo su rostro gracias a sus rizos que se fueron hacia delante cuando agachó la mirada –Pero... Pero...

–No tienes que forzarte, si quieres hacemos una nueva planilla, como he dicho antes –intentó calmarlo con una leve sonrisa, aun si no la veía.

Oliver de a poco comenzó a levantar la cabeza, dejando en vista que había fruncido los labios y se notaba ciertamente contrariado.

–Si... Si le digo... ¿Solo lo sabrá usted?

Freya entonces volvió a dibujar en sus labios una dulce y comprensiva sonrisa.

–Nunca iría contando los estados de mis pacientes, no es profesional. Si no quieres que nadie más se entere, tienes mi palabra de que no saldrá de mis labios –le aseguró, lo cual Oliver creyó, pues al igual que le había sucedido con Ezra, sentía que podía confiar en aquella alfa amable y dedicada. 

Me encanta la hermana de Ezra XD toda una dulzura con su hermano jajaja

Para los que tienen dudas sobre los familiares de Ezra, él cuenta con ambos padres (El padre alfa (Chanan Parrish) y la madre Beta (Remy Hilton)) y cuatro hermanos (Cayden Parrish (el mayor y beta), Freya Parrish (Alfa), Él (Alfa) y sus dos hermanas mellizas más chicas (Harper Parrish (Alfa) y Irish Parrish (Omega))

Si quieren saber algo más de los personajes no duden y preguntar y con gusto contestaré si es posible XD jajaja