¿Qué somos? (Kookmin)

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-Eres tan pequeño -le dijo al omega -Pienso que si muevo mi pie te quedaras debajo -le sonrió a lo que el omega le golpeó el brazo.

-Deja de meterte con mi estatura cerdo musculoso. Yo no te digo nada con todos esos músculos que tienes más que cerebro -sonrió satisfecho de molestar al alfa.

Pero Jungkook tenía la facilidad de vengarse y ganar -Pero te gusta que estos músculos -señaló sus bíceps -Te sujeten contra la pared. Se que te gusta esa clase de sexo -le susurró al oído.

-Aléjate o meto tu cabeza en el microondas -caminó a la sala con un tazón lleno de palomitas y detrás el pelinegro siguiéndole.

Jungkook se sentó en el sofá y de inmediato el rubio se subió en el regazo del alfa -¿Te molesta que lo haga? -el alfa le negó y lo dejó estar allí mientras se preparaban a ver esa película.

No pasó mucho para que sus traviesas manos se metieran debajo de la ropa del omega que estaba distraído viendo la película, antes ese gesto significaría un broma, pero ahora significaba tomarlo. Sus manos lo bajaron de su regazo y lo depositó en el sofá, lo vio un poco molesto que no le dejara ver la película, pero su erección no podía más, pasó sus dedos en esos labios y se acercó para tomarlos, tan suaves y deliciosos, el omega gimió por la rápida intromisión, misma que le hizo llevar sus brazos en su cuello aceptándolo, él lo acercó a su cuerpo para hundir su lengua en esa cavidad, se movió en ella hasta que sus respiraciones no se lo permitieron. Se separó dejando esos labios rojos e hinchados.

-No te deje ver la película, lo siento...

-Está bien, sigue... -su respiración estaba agitada y sus mejillas rojas -Bésame...

Lo volvió a besar ahora colocándolo a horcadas de él, bajó sus pantalones tocando su dotado trasero, esos gruesos labios eran la lujuria misma porque cada vez que lo tocaba con los suyos y paseaba su lengua allí lo excitaba más. Sus manos siguieron delineando ese cuerpo, se detuvo para desabrochar sus pantalones dejando ver su miembro totalmente duro, acercó al rubio haciendo que gimiera al sentirlo -Jimin... no aguanto.

-Hazlo...

Bajó más el pantalón de pijama del omega y lo acercó a su miembro, en un empuje logró introducirse completamente.

-Aaah Jungk-Jungkook... muévete -tiró la cabeza para atrás mientras que sus dedos estaban enredados en el cabello del alfa.

Empezó a moverse dentro de ese lugar cálido, se introducía fuertemente tocando ese punto varias veces, lo sabía cuándo ese rubio ahogaba un gemido y lo arañaba con la otra mano, tan sensual y hermoso, solo era de él.

Lo tiró en el fosa y le quitó sus pantalones atorados en sus piernas, separó esos suaves muslos y los acarició, con sus dos manos las agarró para acomodarse allí penetrándolo rápidamente, las rápidas embestidas empezaron haciendo que el rubio se arqueara al hundirse completamente. Observó aquella playera puesta todavía, de alguna manera parecía una escena erótica en sus ojos, semidesnudo, pero quiso ver esos pezones, así que la subió mirando esos botones rosas que no tardó en frotar con sus pulgares.

-Kook... ah ah... estoy... cerca.

Su semen salió y su cuerpo se contrajo en el suyo, lo estaba apretando, debía salirse en ese instante antes de anudarlo, de mala gana y dolorosamente salió corriéndose en el cuerpo del omega manchando su vientre. Respiró una vez más y se desplomó encima del rubio atrapándolo con su cuerpo, sentir ese cuerpo en el suyo era lo mejor.

*

Ambos se encontraron a la hora de comer en la universidad, se sentaron juntos como siempre lo hacían, Jimin estaba comiendo un sándwich mientras que una mano terminaba sus tareas, el alfa en cambio solo se dedicaba a comer y verlo.

Desde que ese trató se restableció de nuevo, lo único que podía hacer era verlo y sabía el porqué. Lo supo desde que se empezó a llevar con él.

El omega terminó de dar la última mordida de su alimento y miró al alfa que estaba perdido en sus pensamientos -¿Te perdiste de nuevo en el mundo de Jungkook?

El pelinegro le sonrió -No, ahora no solo es el mundo de Jungkook...

Jimin trató de seguirle la plática al alfa, pero sus ojos se distrajeron a lo lejos, se dio cuenta que algunos omegas miraban a Jungkook como si un pedazo de carne se tratara y no evitó preguntarle -Los omegas... ¿Te buscan todavía?

No iba a mentirle a su amigo -Si, pero desde que estuvimos juntos, no me he metido con nadie, excepto contigo. Soy solo tuyo -dijo con naturalidad, temiendo que el omega entendiera el verdadero significado de esas palabras.

-Cierto, dije que no íbamos a acostarnos con nadie hasta que uno de nosotros tenga una pareja...

Mostró un poco de decepción a las palabras de Jimin, porque era muy diferente de lo que hacían de todas las parejas de favores, ellos no eran un trato, eran otra cosa. Su amigo no se había dado cuenta, tal vez por la amistad que tenían, pero le demostraría poco a poco que ellos tenían algo más que una amistad.

Dejando esos pensamientos tomó la mano del omega no pasando por alto la mirada de Jimin, la abrió para depositarle un dulce de chocolate -Toma, lo compre hace un rato...

Jimin sonrió haciendo iluminar su rostro para el alfa -Gracias, son mis favoritos...

-Lo sé...

*

No sabía si estaba dejando esos sentimientos o realizando una pequeña venganza, pero estaba decidido, iba a ignorar a su omega y tratar de hacer una vida normal donde Yoongi no existiera. Cerró su casillero con un poco de fuerza, molesto con su omega que quería buscar a ese estúpido alfa. Tomó sus libros y fue a su clase, de nuevo esa sonrisa llegó a sus ojos sin dejarlo pasar.

-Hola Tae ¿No viste mi mensaje?

Retrocedió un poco hacia atrás por esa mirada penetrante -Lo siento... no contesto números desconocidos...

-Pero yo no soy un desconocido, soy tu compañero de clase, por favor respóndeme. Quiero ser tu amigo.

-¿Por qué? Por qué quieres que seamos amigos.

Le sonrió -No te lo iba a decir, pero creo que me gustas... y si quiero acortejarte -tocó la mejilla del omega sonrojado haciendo que quitara su rostro de sus manos -Eres muy lindo, quiero intentarlo contigo ¿Qué dices?

-¿Eh?... Yo

-No tienes que responder, podemos empezar poco a poco.

El omega se quedó allí, era raro que ese alfa se le acercara y se le confesara directamente, no debía confiar en él, pero tampoco parecía mala persona, podía intentar comenzar una relación normal, olvidar los sentimientos por el peli azul y llenarse por los de ese alfa.

Tal vez podría enamorarse de Hoseok, como alguien normal.

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Hola Hola criaturas 

Capitulo nuevo¡¡

Pobre Jungkook :(

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Rabitta