¿Qué somos? (Kookmin)

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"Lo siento Jungkook"

Fue lo que le mandó estando rumbo a su destino.

*

—¿Estas bien hijo? ¿Jinnie? —le preguntó su madre apretándole suavemente el hombro de forma empática.

—Si estoy bien —miró a su madre y le brindó una sincera sonrisa —Allí estaré mañana, mientras más pronto mejor. Tengo que ir a mi habitación estoy cansado.

Abrió la puerta de su habitación, agarró su maleta que estaba a un lado para empezar a desempacar todo lo que llevó a Japón. Mientras acomodaba sus ropas pensó en el desastre que se formó en ese país después de que Namjoon lo retuviera. Al salir del salón donde estaba el alfa fue a ocultarse en los sanitarios de un salón cualquiera para llorar como el chico pequeño que era. No le importó que los Miura estuvieran esperándolo, por lo que al salir los reclamos no faltaron, varios acuerdos rotos, así como los llamados de los accionistas cuestionando sus decisiones.

Estaba harto, como lo estaba su corazón. Por eso cuando su madre le dijo que el nuevo matrimonio estaba acordado no tuvo más expresiones qué hacer, solo debía de ir a firmar esos papeles y seguir con su vida normalmente ignorando la existencia de alguien que ya se había propuesto a olvidar.

Lo que le dijo solo fueron palabras vacías para él al final, ya no importaba.

Después de poner todo en orden se miró en el espejo, sus cabellos negros le cubrían parte de sus ojos al no estar peinado y sus labios estaban un poco resecos, puso un poco de bálsamo para humectarlos y se quitó de allí. Fue a su vestidor para buscar el mejor traje que tenía, mañana se casaría.

*

El omega después de llegar a su destino, caminó tan rápidamente casi como si quisiera que su alma se le saliera de su cuerpo, estaba muy nervioso. Su corazón palpitaba con cada pasó que daba, sus piernas se sentían pesados y su respiración se agitaba en cada segundo. Tomó las llaves, pero no logró abrirlas porque estas se le cayeron de sus manos.

Los sentimientos compartidos eran más de lo que podía controlar.

—Mierda.

Antes de tomar el juego de llaves que estaba en el suelo divisó una hoja blanca en la línea de la puerta que estaba tratando de abrir, la tomó de inmediato y la abrió como pudo. Pasó sus ojos rápidamente y sus ojos se llenaron rápidamente de pequeñas lágrimas.

Jimin...

He estado enamorado desde que me ayudaste y dejaste entrar en tu aula de estudio.

Suena absurdo, pero lo he estado desde la primera vez que te vi.

Tus ojos sonrientes, tu sonrisa dulce, tu carisma y amabilidad me enamoraron. Así como tu único aroma a manzanas verdes me hizo sentir feliz y relajado.

Estaba feliz con lo que teníamos y lo que soy a tu lado, lo que pasamos era muy fuerte y sé que también lo sentiste.

Yo fui el idiota de trató de arrancarte de mi corazón con varias omegas porque no quería arruinar lo nuestro ni a ti, pero no lo conseguí.

Se que sonará malo, pero no me arrepiento de marcarte, quiero que seas mi omega y yo tu alfa para siempre.

No tengo miedo, estoy listo para el siguiente paso.

Solo siento que fuera tan rápido, pero mis sentimientos por ti no cambiaran, quiero estar contigo y amarte como mi travieso omega.

Te amo