Trato con el diablo ©

43. Ayúdame

Lena

Las clases habían terminado y ya había recibido un mensaje de Dean diciendo que se encontraba en el campus principal esperándome.

Guardé mis libros en la mochila y caminé a la puerta del aula, caminaba por los pasillos de la universidad y miré mi reloj, este marcaba las 7:00 de la noche. Estudiar por las tardes era aún más pesado que por las mañana, con trabajo y tenía tiempo para bañarme.

Miré a Dean quien tenía un cigarrillo en mano, miré como lentamente sacaba el humo de su boca, su mirada se dirige a mí y señala la salida. Era hora de irnos.

Yo camino hacia donde está el y una vez a su lado el toma de mi mano, yo lo miro confundida y al parecer el se da cuenta, el detiene el paso y me mira.

—Actúa como si fueras mi novia, allá afuera hay un tipo que me preguntó si te conocía. No se ve confiable Lena.—Estaba claro que no se trataba de Demian ya que solo pueden verlo las personas que están aliadas con el. Entonces, ¿De quién se trataba?.

No podía ser Braxton ya que Dean lo conocía y tampoco puede ser Nathan ya que el no tiene nada que ver en esto.

—Esta bien.—es lo único que puedo decir.

No se me venía nadie a la mente, yo no solía tener problemas con nadie pero no sabía de quién hablaba Dean.

—Toma bien de mi mano.—dice susurrando, al parecer el miró al hombre ya que el dice.—Vamos cariño nos esperan.—dice.

Yo miro enfrente de el y no puedo creer lo que mis ojos están viendo.

Era Seth, el mismo Seth que también se metió en mi vida, ¡Mierda!, ¿Cómo carajos escapó del infierno? Se suponía que el no tenía poder alguno.

—Es el Lena.—dice en voz baja.

—Dean, corre.—El me mira y al parecer el logro entender ya que tomó de mi mano aún más fuerte y comenzó a correr junto conmigo al estacionamiento.

Ambos corríamos y a mí se me ocurrió voltear hacia atrás y Seth venía hacia nosotros.

—¡Mierda Dean corre!.—le digo.

Faltaba poco para llegar hacia donde estaba el auto de Dean, llegamos y el abrió las puertas del auto. Ambos subimos y el lo encendió.

Comenzó a manejar algo rápido y en un semáforo rojo el habló:

—¿Quién era ese tipo y porque carajo te busca de esa manera?.—dice.

—Larga historia Dean.—le digo.—Ahora no sé si ir a mi casa porque el sabe donde vivo y él no dudaría en ir a ella.

—No te quedarás en tu casa, te quedarás en la mía.—dice y yo lo veo.

—Gracias Dean.— el me mira de una manera rápida y después toma de mi mano.

—Vas a estar bien Lena.—dice y puedo sentir como acaricia mi mano.

Comenzaba a llover en la ciudad de Cincinnati, llegamos a casa de Dean y yo lo primero que hice fue alertar a Braxton y a Aitana. Tomé mi celular y llamé a Aitana ya que era ella quien sabía todo.

Sonó una, dos veces y ella contestó.

—¿Qué quieres Harper?.—dice.

—¿Recuerdas a Seth?.—le digo y ella contesta al instante.

—Claro que recuerdo a ese tipo, estaba obsesionado contigo. ¿Qué tiene?.—dice.

—El volvió Aitana.—le digo y puedo escuchar como escupe algo, de seguro era agua.