Trato con el diablo ©

55. No otra vez

Lena

Era sábado por la noche, estaba en el funeral de la madre de Dean, Dean está sentado a mi lado con la mirada perdida, sus hermanos se encontraban tranquilos a excepción de Grace que desde ayer lloraba.

Personas cercanas a la familia Henderson daba el pésame a cada uno de los chicos y Dean cada vez se miraba peor.

El me decía que su madre era lo más valioso en su vida y que no sabría que hacer si ella algún día llegaba a faltar.

—Vengo en un momento cariño.—dice Dean en voz baja y comienza a caminar hasta donde se encontraba Corey.

Todos los hermanos estaban en distintas partes del lugar y al parecer Dean quería estar con todos ellos.

Cloe se acercó a ellos pero Grace hizo lo contrario y lo único que hizo fue alejarse más hasta que cruzó miradas conmigo y comenzara a caminar hasta a mí.

Grace se mantuvo en silencio por unos minutos, ella tenía su mirada baja y podía escuchar pequeños sollozos que salían de su boca, Dean me miró y después volvió su mirada a Corey y Cloe.

Yo miré a Grace quien ahora miraba a un punto fijo de la sala y al mismo tiempo comenzó a hablarme.

—Fui la menos afortunada de todos ellos. Ellos vivieron más y disfrutaron más de mamá.—dice llorando aún más.

Me mantuve callada por un momento en lo que trataba de analizar su situación y en lo que trataba de encontrar las palabras correctas para lo que quería decir.

—Hay personas que ni siquiera tienen la fortuna de tener una madre, de hecho yo nunca tuve una.—le digo y ella me mira con asombro. Nunca conocí a Marie pero realmente siempre quise tener una madre.

—Lo siento mucho Lena.—dice en un susurro.

—Descuida, solo da gracias a que tuviste a una madre que siempre estuvo contigo.—le digo y ella me brinda una pequeña sonrisa.

Estuvimos hablando durante varios minutos, ella era una niña linda y tierna. Me contó que Corey ni Cloe estuvieron con ella cuando más lo necesitaba pero que Dean siempre estuvo con ella, Dean tiene veintidos años y Grace dieciocho así que creo es que se entienden mejor.

Mi celular sonó y vi que era una llamada de Braxton, di una mirada rápida hacia donde estaba Dean y después miré a Grace.

—Si Dean pregunta por mí dile que estoy afuera, te veo en un rato linda.—le digo y ella asiente.

Yo salgo de la funeraria y comienzo a caminar a un pequeño parque que está a una calle del lugar.

Braxton vuelve a llamar y esta vez le contesto mientras caminaba.

—¿Hola?.

—Tienes que venir a casa, es urgente.—dice Braxton.—Aitana no se fue, ella sigue aquí en Cincinnati y tenemos que encontrarla.

—¿Cómo es que sabes todo eso?.—se suponía que Aitana estaba en Colombia.

Sorpresa, sorpresa

—Ella llamó hace un rato y dijo que vendría a casa.—dice.

—Tal vez si estuvo en Colombia, un año sin saber de ella.—digo.

—Es confuso el asunto, solo ven a casa.—dice y el termina la llamada.

Tenía que estar con Dean pero algo dentro de mí me decía que fuera a casa con Braxton.