Trato con el diablo ©

27. El regreso de Aitana

Lena

El día se me hacía tan largo y lento, no sé cómo es que de un momento a otro el ambiente en casa cambió. Cambió de muchas formas al igual que mis sentimientos, sentía enojo, tristeza, melancolía y al decir verdad ya no sé ni qué hacer con mi vida aunque mi vida ya le pertenecía a Demian.

¡Joder como lo odiaba!

El día de hoy había perdido al chico que amaba, había ocasionado una discusión entre el diablo y el alma más poderosa del infierno, también había sido sentenciada por Demian.

Ahora sé que hice mal en dejar ir a Braxton pero tal vez si él se hubiera quedado quizás tampoco estuviera vivo en estos momentos.

Me encuentro sentada en un escalón con mi mirada perdida, el cuerpo de Ethan seguía tirado en el mismo lugar. Las lágrimas que había derramado hace un rato estaban secas. Maldita sea estoy viviendo el infierno en vida. No estaba Demian ni Seth en casa para ser sincera no sé la razón pero doy gracias a que estoy sola.

Miré a Ethan que estaba tirado sin vida en el suelo y no se porque tenía el estúpido pensamiento de que despertaría.

Literalmente le destrozó el cuello

Nunca le dije que lo amaba y ese fue una gran lección de vida porque nunca sabes cuándo va a ser el día en el que la persona que amas se irá, nunca sabes cuándo va a ser el último momento hermoso que vivirán juntos y mierda ni siquiera tuve la oportunidad de demostrarle lo tanto que lo quería.

Todo fue muy rápido, cuando menos pensé mi corazón ya latía fuertemente cuando lo miraba o cuando me decía cosas lindas. Yo sabía que el día en que me detuvo en la calle no iba a ser la última vez que lo miraría pero puedo admitir que jamás pensé enamorarme del chico.

Las lágrimas volvieron a salir de mis ojos y esta vez no sabía si iba a poder pararlas. La vida se estaba encargando de hundirme completamente.

Demian se está encargado de eso

Minutos después siento como es que alguien está a un lado de mi, miro hacia la derecha y no lo puedo creer.

Es Aitana, mi hermana a la cual extrañaba demasiado por la cual he estado sufriendo todo este tiempo pero miro sus ojos y puedo decir con certeza de que ella no es la misma Aitana de hace casi un año, miraba su expresión diferente. En sus ojos ya no había brillo, en su piel tenía marcas de quemadas que era obvio que Demian las había hecho. Ella estaba parada a un lado de Demian, no decía ninguna palabra al igual que yo.

Me paré y caminé lentamente a donde estaba ella, quedé enfrente de Aitana y sinceramente no estaba segura si podría abrazarla como tanto deseaba. Dejé mi duda y la abracé fuertemente, aún me encontraba llorando pero ella no movió sus brazos para abrazarme, esa acción me dejó aún más decepcionada pero lo único bueno que me había pasado en el día era que Demian si cumplió su parte del trato.

Aitana despegó la vista de mi y su mirada fue directo al cuerpo de Ethan, ella sonrió y después miro a Demian.

—Entonces ¿Él era?—dice sonriendo. Obviamente no lo conocía pero no era para que se alegrara por eso.

—Si, ese era el bastardo.—una más y juro que me le lanzo encima.

Yo la miro desconcertada

En definitiva no era la misma Aitana

Negué repetidas veces y ahora ella me miraba pero sin sentimiento alguno, ella se acercó a las escaleras y subió sin decir nada. Ahora yo miro a Demian quien se encontraba parado a un lado de Ethan mirándolo como si hubiese ganado un premio por haberle quitado la vida.